Capítulo 12

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Hace mucho frío y la nieve del exterior aún no se despeja del todo. Se pueden ver los techos próximos a través de las grandes ventanas, se siente el viento, danzando y llevando consigo algunos copos. Calienta una bolsa de agua, siente que la necesita para entibiar un poco su estómago y sus manos. Escribe entonces, una respuesta al mensaje de texto que acaba de recibir. Acorrucado sobre la silla que parece un mullido nido.

—Tu medicina todavía esta en mi  auto. ¿Quieres que te la envíe a casa después del trabajo?

Zhan sonrió y tecleó:<<No, iré mañana>>

No tardo mucho en recibir: <<No tuve ninguna llamada tuya ayer. ¿Está bien para ti contestar el teléfono ahora?>>

Xiao Zhan sonrió, pensando en ello: <<No se preocupe. Realmente iré mañana. Hablaremos sobre esto en el consultorio>>  Wang Darren no le mandó otro mensaje. Xiao Zhan vio las notificaciones por un tiempo...No le tomó mucho sentirse exhausto y dejar de lado su celular. 

Más tarde, fue encontrado por Wang Yi Bo . Se contuvo en despertarle, se rascó la nariz y le miró todavía un largo rato. Está confundido. Wang Yi Bo todavía se siente incómodo, avergonzado y sabe que Xiao se encuentra muy incómodo también. Debería sentirse mejor después de cancelar su cita con Xu Jiao y tendría que estar más tranquilo tras posponer el encuentro con su viejo amigo...

Pero Wang Yi Bo tiene un nudo persistente en la garganta. 

El corazón de Wang Yi Bo ya no es suave como el cabello de Xiao Zhan. Le acaricia la cabeza, nota que está cansad. Tiene los ojos entrecerrados y YiBo, se detiene en la marca de un hoyuelo muy pequeño en la parte inferior de su mejilla izquierda. Se le forma cuando ríe y todavía le gusta. Su voz es tierna, muy tierna cuando susurra: 

—Wang-Ge...

Después de tantos años, Wang Yi Bo puede jurar que nunca nadie le llamó de esa manera en Beijing. Incluso, aunque lo mencione de su propia voz, ya no suena igual que antes porque perdió su acento. Es lamentable, pero una vez que esas cosas se van es imposible encontrarlas de nuevo. Solo el acento de Xiao Zhan es el mismo que el de hace un tiempo atrás, igual a sus días de estudiantes.

Esa es una de las pocas cosas que no han cambiado mucho en estos diez años.

Wang Yi Bo gimió de sorpresa y miró a Xiao Zhan. Durmiendo como si estuviera experimentando el sueño más feliz del mundo. Tomó la manta, prendió el calefactor y lo cubrió suavemente casi hasta su barbilla. Regresó a su estudio y vio que su teléfono celular vibraba una y otra vez sobre su escritorio. El número de contacto le provocó suspirar como si estuviera absolutamente frustrado.

Wang Yi Bo sabe que abusó e su tiempo fuera. Al principio, estaba bien jugar de vez en cuanto. Besar a una o dos personas, enredarse por allí...Se presentaba siempre como un hombre soltero. Estaba disponible la mayoría de las veces y, además, se conocía lo suficiente como para saber que era muy atractivo. Un hombre guapo en verdad. Siempre encontraba a alguien nuevo y nunca echaba de menos a Xiao Zhan.

Descubrió que las flores silvestres eran igual de aromáticas que las canolas.

Siempre existen beneficios cuando se lleva al hombre correcto a un cuarto.

Las personas externas siempre se ven más felices que el hombre que le espera dentro de su casa. 

Las malas conductas siempre se vuelven un hábito. La primera vez, se siente incómodo y temeroso. Al ir a casa después de estar con su amante, no cree que tenga lo necesario para encubrir sus miedos internos. Piensa que será descubierto y es cuidadoso.

Después de un largo tiempo, la carga sobre sus hombros se va haciendo cada vez más pequeña hasta que desaparece casi por completo. Al principio, hace todo lo posible por ocultar sus acciones. Pone excusas, dice mentiras. Un día, sin embargo, cuando Xiao Zhan tuvo la sospecha de que estaba viendo a alguien más y pelearon...Aunque se mantuvo firme, aunque estaba preocupado...Wang Yi Bo descubrió que Xiao Zhan era suyo. Para siempre, hiciera lo que hiciera.

Lo de afuera sigue siendo tan silencioso que es casi irreconocible. No es que lo haga porque este aburrido, pero admite que son juegos divertidos.

No sabe porque, pero Wang Yi Bo de repente siente el tipo de tensón que experimentaba al principio. El fuerte instinto de Wang Yi Bo le hace pensar que la extraña actitud de Xiao Zhan tiene algo que ver con cosas que no conoce. Es muy difícil y le enoja demasiado.

La paradoja es que parece que Xiao Zhan está inconscientemente buscando desaparecer lo antes posible de su vista. 

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Xiao sabe que a YiBo no le gusta que los extraños entren a su casa, por lo que las tareas domésticas siempre han sido realizadas por él. 

Esta mañana, Xiao Zhan se sintió muy incómodo.

Las sábanas de la noche anterior, manchadas de fluidos, fueron arrojadas a la lavandería y todavía no había intentado siquiera lavarlas. Wang Yi Bo vio que parecía haber un poco de sangre en la parte superior y no pudo evitar entrar en pánico. Wang Yi Bo sabe que Xiao Zhan le teme al dolor. No es frágil, piensa que solo no le gusta sentirlo. Es fácil para Xiao quebrarse y tiene el aspecto de no poder soportar ni siquiera un pequeño golpe.

Wang Yi Bo recuerda claramente que, cuando lo presionó debajo de su cuerpo, el dolor de Xiao Zhan impregnado en sus pupilas le había provocado temblar con fuerza. Los ojos negros y brillantes de Xiao parecían haberse apagado un poco.

Ahora es Yi Bo quien mira flores en sus pensamientos. Árboles, libros, lámparas, círculos de pétalo, anillos...A Xiao Zhan jadear y escupir una masa sanguinolenta de esputo. Tose, se atraganta y dice: 

—¿Wang Ge, serás bueno conmigo más tarde?

El corazón de Wang Yi Bo no estaba preparado para tanto dolor.

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Llegamos al final del capítulo 12...

Cuidence, nos leemos pronto. 




°Los 10 años en que más te amé°          YiZhan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora