Queen (Nathloe/Adriloe/Lukloe/Feliloe)

Corazón

Edad 26 años
Invierno

Estaba frente al espejo dándose un pequeño polvo rojizo que hacía que sus mejillas quedarán ruborizadas dandole un adorable toque.

Con los años fue cambiando de maquillaje, reconoció que el que usaba era demasiado extravagante, así que decidió cambiarlo por uno más elegante y ligero.

Pero volviendo al tema, estaba dandose la última capa de maquillaje antes de salir de su precioso hotel,volvió con su padre aquellos meses a que la consolase y como todos saben el alcalde siempre tiene un hueco para su princesa.

Así que esos meses que se la pasaba en el hotel fue consentida en todos los sentidos,realmente su padre era el único hombre que no era un idiota,ojalá existirán más hombres como él.

Al tener ese pensamiento rodando en su mente solo se golpeó las mejillas con ambas manos haciendo que le doliese,pero claro era lo que quería,se miró al espejo una vez más,ella no quería un hombre,quería estar sola,aún así ella quería alguien a quién amar y que la ame de la misma forma.

Pero nada al parecer la hija del alcalde sera una soltera,la más bella de las solteronas.

Quitando aquella negatividad solo se levantó observandose en el espejo,estaba perfecta.

Tenía un vestido negro muy ajustado a su cuerpo perfecto,tan largo que llegaba hasta sus pies claro que gracias a aquellos tacones dejaba ver un poco de estos,justo en la pierna tenía una abertura que dejaba ver aquella carnosa pierna dandole un toque sensual. Su cabello suelto algo rizado que caía por su espalda tapando ligeramente si espalda descubierta,por último aquel escote que tapaba las hermosidades que le encantan a los hombres.

Definitivamente la palabra perfecta era poco.

Se miro al espejo,era bella,aún así nadie la amaba.

¿Que pasa en el mundo?

Quién mierda piensa que las bellas no sufren,porque encima de ella ser bella era rica,lo que significaba que podían acercarse también por conveniencia.

—No seas negativa Chloe...no seas negativa— se ánimo.

—Señorita,la limusina la esta esperando— aviso desde la puerta el mayordomo.

—Ya voy Jean...—

Por último de puso unos pendientes al igual que un collar para así tomar su bolso e irse de aquella habitación la más cara de todo el hotel.

Bajo por aquel ascensor pensando si hacía bien,quizás aún podía huir,aún podía decidir quedarse en casa,pero otra parte de ella le gritaba que debía ir,debía enfrentarse a esos amores para estar bien con ella y poder gritar "¡lo hice!" con total seguridad.

Al salir del hotel sintió una brisa fresca recorrer su cuerpo,su vestido no era especialmente de época fría,aún así el tiempo estaba cálido parecía que hasta eso se puso de su parte.

Se subió a la limusina dandole la orden al chófer para así sentarse,sacó su móvil de su costoso bolso para ver la lista de los que aceptaron la invitación.

Primero Nathaniel sin acompañante,Adrien acompañante Kagami,Juleka acompañante Luka.

Auch,auch,auch,porque dolía tan solo leer sus nombres ,¿tanto daño le hicieron a su corazón?. Al parecer sí.

Cuando llegó a su destino y su chófer abrió su puerta esta se quedó temblando en su asiento,sus piernas no querían,ella ya no quería,pero lo hizo.

Salió de la limusina temblorosa sintiendo su alma caerle a los pies,pero no se rindió,ella era fuerte,ella era valiente,ella era una reina.

Cuando entró sola es lo que más vergüenza le daba,sola,ella la más hermosa que destacaba por ser codiciada,soltera.