LA PUERTA DE LA LUNA

22

-¿Por qué?-pregunto en un susurro, él estaba muerto, ella misma había clavado el kunai en su pecho, vio como la sangre salía, como la vida abandonaba sus brillantes ojos azules
-porque solo tú me podrías llevar a la puerta
-déjalos ir- pidió cayendo de rodillas y los ojos cubierto de lágrimas, su mayor miedo se estaba haciendo realidad- ellos no saben nada, por favor suéltalos
-Sakura- susurro el Uchiha llamando la atención de su compañera- ve por Naruto- le pidió, aquel ser extraño no le provocaba buena espina y al verlo sujetar a los gemelos solo empeoraba la situación, giro a ver a Gaara y la expresión en su rostro no mejoro las cosas, al ver a la rubia suplicando solo termino por cabrearlo.
-el tiempo se ha acabado- declaro el albino y sus ojos se tornaron más brillantes- el byakugan se ha unido a mí, el tesaigan ha despertado y la tierra perecerá por mi mano
Cientos de marionetas aparecieron detrás del albino, algunos de ellos montados en unas enormes aves, detrás de ellos la luna seguía escarlata presagiando el final.
-TONERI-se oyó el grito del líder del clan Hyuga detrás de ella y su cuerpo se paralizo de miedo, 5 años habían pasado y aun así tenía el poder de erizarle la piel de terror- te estábamos esperando- Neji estaba detrás de él listo para la batalla al igual que los miembros restantes de lo que quedaba del clan- esta vez no saldrás con vida
-el decreto divino de Hamura sobre el clan Hyuga será cumplido- respondió el albino con una espeluznante sonrisa en su rostro, volteando a ver a la rubia que seguía de rodillas sobre el suelo- no es así...princesa del Byakugan
Todos se quedaron en silencio mientras sus ojos se clavaban en la rubia mujer arrodillada, las facciones de Hiashi se endurecieron con sus opalinos ojos fijos en aquella desconocida, su larga cabellera cubría su rostro pero algo en ella se le hizo familiar, tanto que sintió su estómago contraerse del horror de sus pensamientos
Por su parte Neji no podía entender de lo que el albino hablaba, solo hubo una princesa del Byuakugan y ella estaba muerta, o ¿es que acaso ella...? No eso no era posible, activo su línea sucesoria sobre el cuerpo inmóvil de la rubia pero su visión estaba trastornada, tenía algún tipo de barrera. Tenía que ser una horrible broma.
-¿Quién eres tú?- se escuchó la potente voz del rubio, pero este fue ignorado por el descendiente Otsutsuki que seguía viendo como lloraba de pánico la rubia frente a él
Naruto había llegado acompañado del resto de los nueve novatos, junto con los compañeros de Neji, Kakashi y Sai que no tardo en ir junto al cuerpo inconsciente de su esposa y alejarse del lugar
-iré contigo- dijo de repente Hinata poniéndose de pie con dificultad- solo...solo suelta a mis hijos-Con una mano extendida en su dirección el albino la llamo, Sasuke saco su espada y envolviéndola de rayos se dispuso a atacar al albino sin embargo Hinata lo detuvo-no por favor, no lo hagas- pidió temblando dirigiéndole una última mirada – Cuídalos- le dijo en un susurro comenzando a caminar hacia la plataforma en la que estaba Toneri y sus hijos.
Su fría mano estaba por tocar la del albino cuando él la tomo del cuello y comenzó a estrangularla.
-SUELTALA- grito el peli rojo preparando su arena dispuesto a acabar con el albino
Todos los presentes miraban sin entender la situación, ¿Quién era aquel misterioso hombre? ¿Qué relación tenía con aquella misteriosa familia? ¿y porque Konoha estaba involucrada?
Naruto y Sasuke no sabían que hacer para salvarla sin tener que poner en riesgo a los niños, los dos apretaban las manos con impotencia por no poder hacer nada.
-el decreto divino se cumplirá y el tesaigan destruirá este mundo corrupto- Hinata dejo de moverse esperando su final pero en su lugar solo pudo ver como Toneri llevaba su mano hasta el collar en forma de luna que poseía y sin delicadeza lo arranco de su níveo cuello dejándola caer. Su rubio cabello pasó a ser de un negro azulado y el verde de sus ojos desapareció para dejar en su lugar un color violeta que todos conocían- eres mía...Hinata Hyuga
Los ojos de todos se abrieron por la sorpresa de lo que veían, la chica que todos creyeron muerta estaba frente a ellos, la dulce chica que ellos creyeron haber perdido hace 5 años estaba ahí completamente viva.
-¿PERO QUE RAYOS?-grito Kiba sin poder creerlo, pero el aullido de un muy viejo Akamaru le afirmo que en verdad era ella- HINATA
-¿Qué QUIERES CON ELLA?- pregunto el guardián de la legitima heredera Hyuga, tratando de contener el acelerado palpitar de su pecho, frente a él se encontraba la dueña de su corazón, aquella que creyó perdida
Sasuke Dejo caer la katana que sostenía en la mano, provocando un agudo sonido al chocar con el duro piso, todo a su alrededor había desaparecido, todo ruido se apagó, solo el eco de su pulso era lo que sus oídos percibían ¿Qué estaba sucediendo? Levanto su negra mirada hasta donde se encontraba el cuerpo agitado de la ahora morena y una lagrima imperceptible para los demás se escapó de sus ojos. Estaba viva, Hinata estaba viva y todo este tiempo la había tenido frente a él.
Pero eso no fue todo lo que Toneri hizo, acercándose a los gemelos que se encontraban encogidos de miedo les arranco a ambos sus collares, sus rojos cabellos se volvieron negros al igual que sus ojos.
Sasuke otra vez sintió que el mundo se le venía encima al ver a los gemelos con su verdadera apariencia y en aire se le escapó de los pulmones al ver a quien se parecían. Recordó las últimas palabras de Hinata dentro del hospital "ellos son..." ellos eran sus... los gemelos eran sus..., se dejó caer de rodillas ante la mirada de todos, se sentía confuso, alegre, molesto... ¿Qué era lo que sentía? ¿Qué significaba esto? Por qué se negaba a creer
-ella se casara conmigo-respondió Toneri regresándolo a la realidad, volvió a enfocar su mirada en la morena que tosía tratando de recuperar el oxígeno perdido, volvió a tomar su katana apretándola con fuerza, se puso de pie dispuesto a acabar con aquel sujeto.
-TENDRAS QUE HACER FILA IDIOTA- grito Kiba lazándose al ataque al igual que Shino, dando inicio a la batalla.
Las marionetas comenzaron a atacar de igual forma siendo contratacados por los ninjas de Konoha que estaban dispuestos a proteger a Hinata, ya la habían perdido una vez y no pensaban volver a hacerlo.
-es hora de irnos- le dijo el albino tomándola de la muñeca, levantándola con poca delicadeza hasta que ambas miradas se encontraran- es hora de que me des la puerta
-déjalos ir- pidió débil, dejando caer un par de lágrimas llenas de dolor
-SUELTALA- gruño el moreno con el sharingan y rinnegan activados, su katana cubierta de su chakra y la clara advertencia en su rostro de que no estaba jugando
-¿soltarla?-pregunto fingiendo inocencia- ella fue la que decidió venir conmigo ¿no es así Hinata?- la enfrento al moreno y ella no le pudo sostener la mirada, por pena, miedo no lo supo pero aquellos ojos negros siempre lograban ver más allá, dentro de su propia alma.
-lo siento- se disculpó, evitando su mirada
Toneri observo con cuidado la interacción entre ambos, aquel ninja le recordaba a Indra tanto que le provocaba nauseas, lo observo meticulosamente y entonces lo supo Hinata no era la portadora de la puerta, giro su cabeza hasta donde estaban los gemelos y vio aquel brillo rojo en sus negras pupilas, de nuevo aquella sonrisa sadica se dibujó en su blanco rostro al saber que esto sería más fácil de lo que pensó.
-vendrás a mí- le dijo antes de lanzar a la peli azul lejos él- sabes dónde buscarme
Quiso gritar al sentir el dolor corromper cada una de sus huesos al sentir el duro piso pero ni para eso tenia fuerzas, con la mirada borros observo como Toneri se desvanecía en el cielo junto con sus hijos, se los llevaba y ella no podía hacer nada, ¿así de patética era? De que sirvió huir si al final no era lo suficientemente fuerte para proteger a sus hijos.
-HINATA- grito Naruto acercándose a ella, miro alrededor y ya las marionetas habían desaparecido en su totalidad, la vio derramar lágrimas en completo silencio, estaba rota por dentro y él por más fuerte que fuera no podía hacer nada para ayudarla. Miro a su mejor amigo que seguía observando el lugar por donde desapareció Toneri junto con los gemelos y se llenó de impotencia.
Tomo la delgada mano de su amiga y como una vez lo hizo ella comenzó a pasarle de su chakra a la peli azul que poco a poco comenzó a recuperar sus fuerzas, aunque su cuerpo seguía muy lastimado.
-tengo que ir por ellos- Hinata se levantó lentamente ante la mirada de todos
-TONTA-grito enfadado Kiba acercándose a ella- ¿Qué crees que haces?- la tomo de los hombros para que lo mirara- no estás sola... iremos contigo- le dijo envolviéndola en un fuerte abrazo
-Kiba, Shino- los nombro mirándolos con nostalgia, los había echado de menos- lo siento mucho- se disculpó comenzando a llorar una vez mas
-Hinata
Escucho como la llamaba y giro para encontrarse con ese par de ojos similares a los suyos, sintió su pecho oprimirse al ver la mezcla de sentimientos que se reflejaban en aquellos ojos opalinos de su primo, se alejó de Kiba y comenzó a caminar en su dirección, primero lentamente para terminar corriendo a los brazos de su primo
-NEJI- lo nombro llorando en su pecho, lo había extrañado con demencia, su amado primo, su amigo y confidente-lo siento, en verdad lo siento
Tan extraño era el momento que ninguno se percató de que un gran meteorito se acercaba a la tierra hasta que este se estrelló cerca de la aldea provocando una gran explosión.
-el tiempo se acaba- advirtió la peli azul separándose del pecho de su primo- tengo que ir por mis hijos
-¿Qué ESTA PASANDO?-grito Shikamaru viendo como más meteoros se acercaban-HINATA
-la luna se está destruyendo-respondió la heredera Hyuga- y esta destruirá a la tierra si no detengo a Toneri
Una nueva roca iba cayendo con dirección a la aldea pero fue interceptada por la arena del peli rojo kage, cientos de puntos brillantes se dejaban ver en el obscuro firmamento, cada una, una nueva amenaza para la tierra, a ese paso la tierra seria destruida en cuestión de horas
-debemos ir tras él- comenzó a decir el rubio hokage al mismo tiempo que destruía con su resengan otra roca- Hinata- la llamo ignorando el hecho que el moreno no se había acercado a ella en todo ese tiempo- ¿Dónde está?
- en el fondo de la cascada- comenzó a decir preparándose para partir-pero solo los descendientes de Hamura pueden vencerlo
-Shikamaru, Sakura, Neji Kiba y Shino- los nombro el rubio con la mirada fija en el cielo, con el rostro serio como pocas veces se le había visto al imperativo Hokage- irán con ella
-este no es su asunto Hokage- interrumpió el líder del clan de ojos blancos colocándose frente a su hija mayor- es asunto del clan Hyuga
- si es su asunto- respondió el peli rojo Kage colocándose frente a Hinata alejándola de la mirada llena de desprecio de su progenitor- ¿cómo es que no han podido aniquilarlo?
Aguamarina y blanco se encontraron desafiándose.
-NO ES MOMENTO PARA ESTO-grito el rubio observando como una nueva roca se estrellaba detrás de los rostros tallados en piedra- Hiashi no se interponga, USTEDES-se dirigio a los anteriormente nombrados- VAYAN
Sasuke se había mantenido al margen de todo, el shock en el que se encontraba lo mantenía en una batalla mental difícil de enfrentar ¿Qué estaba pasando? ¿Qué era eso que sentía? ¿Por qué tenía la intensa necesidad de destruir todo a su paso? Dirigió su negra mirada en la espalda de la poseedora del Byakugan que se encontraba escondida detrás del peli rojo y la inmensa presión en su pecho exploto.
-YO IRE- declaro apretando la katana que sostenía en su mano derecha con tanta presión que sus dedos se tornaron blancos
-Sasuke- lo llamo Sakura llevando su mano a su pecho adolorido, ahora entendía aquella presión que sintió cuando vio por primera vez a Hinata con su otra apariencia, dolía, dolía tanto que creía morir.
-MARCHENSE- ordeno el hokage- los demás – miro a los ninjas que quedaban- Kakashi , te quiero junto con los ANBUS en la cima de la montaña de los hokages, ninguna otra roca impactara en la aldea, Ten Ten ayuda a Shizune y demás gennin a evacuar la aldea quiero a todos en el refugio YA!, Choji y cejotas los quiero en la entrada sur de la aldea destruyan toda roca que atraviese la aldea y Gaara...- miro a su amigo que estaba dispuesto a seguir a Hinata- tienes que volver a Suna
-DE NINGUNA MANERA, IRE CON HINATA
-tienes que volver- trato de convencerlo la peli azul acercándose a él- Suna te necesita, ve
-pero tú- frustrado era como se sentía en esos momentos, el amor de su vida o la aldea que juro proteger sobre su vida
-estaré bien- la sonrisa sincera que le dedico la peli azul fue el eterno recordatorio de lo que siempre supo y aunque dolía admitirlo, él sabía que no había otra versión de la historia
-cuídala- le pidió al moreno que estaba detrás de la mujer de ojos opalinos, se estaba dando por vencido , se la estaba entregando, siempre lo supo pero aun así le dolía en lo más profundo de su alma
-VAMONOS- grito Shikamaru comenzando a correr seguido de los demás, el futuro de la aldea y del mundo estaba en sus manos.