Las Lunas Superiores Apestan || KNY ||

🌙 Tres Lunas Superiores 🌙

El clima los fines de semana en el monte Nagatumo suele ser lluvioso más de lo normal, por lo que. Luego de una llovizna salvaje lo único que queda por el suelo es el barro y los charcos de agua adornando el suelo. Por suerte y ventaja, no ensuciará sus pies pisando del sucio barro en el suelo cuando puede caminar por los delgados hilos que se unen de extremo a extremo con las ramas de los árboles. Siendo casi todo el monte su propio nido.

El silencio adorna el lugar seguido del atardecer apenas ocurrente, el sol se esconde por lo que no pasará mucho para que su familia comience a cazar la cena de lo que será esa noche.

Unos pasos no muy lejos de su posición comienzan a hacerse presentes cada vez más en sus oídos, no percibe ningún aroma a humanos cerca. Solo el clásico aroma a demonio pero cada vez más intenso, podría deducir que es alguna Luna demoníaca, mantiene el aroma del Amo Kibutsuji en su ser.

Pero no, el aroma se intensificó al punto de parecer que el único presente en camino era el Mismísimo Muzan. Por lo que, quisiese o no colocó sus pies en el suelo, el barro era frío y húmedo debajo de sus pies, podía sentir como se hundía fácilmente sin el más mínimo esfuerzo de sus dedos. Prontamente, lo que era una posición de pie se transformó en una reverencia en el suelo. Ignorando lo cerca que estaba de la tierra y de su aroma a humedad. Pronto fue opacado por el aroma de su Amo por lo que este ya no era un problema.

─── De pie. ─── La voz fue clara y la orden directa, sabe quien se encuentra de pie enfrente suyo y no necesita verle a la cara para comprobarlo. Sin dudas ni rechistes o quejas, comienza a moverse para colocarse de pie aun manteniendo la mirada gacha. De repente, siente una mano colocarse en su hombro haciéndole darse la vuelta a la dirección opuesta. Iniciando así una caminata en dicha dirección.

Tener barro entre los dedos de los pies no es algo sumamente agradable, peo no se atreve a dejarle sus inquietudes a los oídos de su Amo, tiene mejores cosas por hacer y de las cuales preocuparse que simplemente los pies sucios de su Luna Inferior. No estaba seguro de a donde se dirigirán. Solo podía pensar en cómo preguntarle el "porqué" de su visita y cual es el paradero que les espera.

Y claro, no tuvo en cuenta una de las habilidades de Kibutsuki; leía mentes. Prontamente sus dudas fueron respondidas.

─── Vine para recogerte, Rui. ─── Menciona sin dirigirle la vista a su inferior. ─── Pensé en el potencial que tenias siendo inútilmente mal empleado y no podía permitirme eso. Por lo que, acordé que un entrenamiento y corregimiento por parte de demonios superiores a ti podría traer beneficios a tus habilidades. Me seria de gran valor tener Lunas que valgan la pena mejorando sus habilidades. Con cada día que pasa los demonios empiezan a ser aniquilados por cazadores.

Entiende, supone. Pero no está seguro de si quiere convivir con otros demonios para mejorar sus habilidades como demonio. Puede usar bastante bien sus técnicas de demonio de sangre, es ágil y sus hilos cortan cualquier Nichirin. No entiende los planes que tiene Muzan para él ni porque quiere que mejore en sus capacidades.

No obstante, no opone resistencia ni emite alguna queja al respecto. Lo que su Amo diga y disponga, es una orden sin rechistar.

En todo el transcurso de la caminata el silencio reina, no de una forma incómoda sino natural. No hay palabras para colocar al aire, todo lo que se tenía que decir ya se dijo. Seria contraproducente el exponer palabras, pensamientos y opiniones irrelevantes para ambas partes. El silencio lo es todo cuando no se necesita ni hay nada más por decir.

Tan pronto que no se lo esperó, la caminata acabó transformándose en un rápido movimiento que los llevó a una casa que por fuera solo se veían las ventanas iluminadas, seguido de un empujón suave de la mano de su amo sobre su espalda hacia adelante. Incitandole a seguir el solo su camino en lo que se daba la vuelta para dar unos cuantos pasos y simplemente desaparecer.

Suspira suave, huele el aroma de tres demonios máximo, comienza a colocar un pie enfrente del otro para acercarse a la entrada, huele realmente familiar, podría decir que empieza a adivinar de quienes provienen esos aromas. Una vez que posa su mano sobre la puerta corrediza y mueve está hacia un lado. Su expresión se convierte en una de pocos amigos.

Divisa rápidamente a Kokushibo, primera Luna Superior, sentado en el suelo simplemente encogido de brazos observando a la nada.

A lo lejos alcanza a ver una cabellera rosada y otra rubia, Akaza y Douma probablemente. Corren de un lado a otro probablemente con intenciones de cometer asesinato en uno al otro.

─── Ya llegué..───  Una vez que anuncia su llegada, los dos al fondo se detienen en seco. El primero en recibirlo de forma cordial fue Kokushibo simplemente con una reverencia silenciosa. Continuando nuevamente con su mirada a la nada.

─── ¡Ruiiii!~ ─── Fue mencionado de un canturreo, Douma corriendo en su dirección con los brazos abiertos y esa sonrisa extraña le inquietó bastante. Un salto seguido de colocar algunos cuantos hilos en los cuales subirse fue suficiente para evitar ese extraño y probablemente incomodo abrazo.

Mientras tanto, solo observó como la Segunda Luna Superior estrelló contra la pared de forma dolorosa, incluso le dolió ligeramente la nariz del golpe y de como sonó.

─── ¡Idiota! Eso te pasa por ir corriendo de esa forma tan extraña, pareces secuestrador. ─── Akaza simplemente se acerca con los brazos cruzados, pero no puede evitar mostrar una sonrisa por ver cómo quien iba a ser su víctima esa noche simplemente fue víctima de la pared. Su vista se desvío al albino encima de sus hilos meneando los pies en el aire.

─── Niño, El Amo Kibutsuki nos dio la orden de entrenarte lo suficiente como para no morir enfrentándote a un pilar. ¡O quizás a un simple cazador!. ─── menciona en tono de burla, las intenciones de reírse de Akaza son claras. Más sin embargo, seria incómodo puesto que nadie más compartió su burla. Luego de aguantar su risa solo tosió incomodamente.

─── Las habitaciones están arriba, solo hay dos así que habrá que compartirlas entre nosotros. Akaza dormirá con Douma y Rui conmigo. ─── Esto, tanto a las otras dos Lunas superiores como a Rui no les pareció agradable. Douma quería dormir con la pequeña araña, Akaza prefería dormir con un perro y Rui quería su espacio.

Fue un "No" rotundo.

Así que, el orden fue el elegido por el albino. Douma con Kokushibo, Akaza en la sala y el ocuparía la habitación solo.

A un ofendido Akaza no le pareció, Douma seguía con ganas de dormir con Rui. Y Kokushibo le rezaba a Muzan para no dormir con Douma.

Entonces Akaza prefirió sugerir un orden más justo.

Douma, Kokushibo y Rui afuera mientras que el obtendría ambas comodidades.

A ninguno excepto Akaza le pareció justo.

Así que el siguiente orden fue sugerido por Douma, dormiría con Rui mientras que Akaza iría con Kokushibo. Los cuales aceptaron rápidamente antes de que el orden cambiase y les tocara Douma. Así que, arrastrado y en contra de su voluntad. Rui supo que prefería ocupar la habitación con Enmu que con Douma.

Así que, como los seres de la noche que son, simplemente tomaron las partes de la cama que usaría cada uno.

Solo quedaba ver que iban a comer esa noche. Porque no parecía haber nadie a kilómetros a los alrededores.

________________________________

Que Rui ya valió madres dice.