ONE

33 3 4
                                    

Odio el instituto. No me malinterpretéis, me encanta aprender cosas nuevas y allí puedes estar con muchas personas distintas con personalidades variadas. Pero odio el hecho de medirnos con una estúpida nota, no entiendo el por qué de esa necesidad. No es como si dentro de diez años me preguntará el panadero que nota saqué en sintaxis y me pida analizar una oración. Es absurdo.
Pero aquí nos encontramos. Primer día del nuevo semestre.

Ya me puedo imaginar a Lydia, con una falda o un vestido, una blusa, y sus colgantes que parece que van a tocar el suelo. Yo, en cambio, voy con unos pantalones vaqueros rotos anchos, una camiseta de tirantes negra corta y unas converse negras. Oh, y una camisa que le he robado a Stiles. Quiero decir, si voy a tu casa no dudes en que voy a robarte ropa.

Estábamos esperando a que Scott llegara en su típica bicicleta. Al parecer había llamado a Stiles mientras yo todavía dormía y le había contado que le había ¿atacado algo?

-Colega, cuidado con la pintura- con todos nosotros, Jackson Whittemore, igual de imbécil que siempre.

Y entonces es cuando me di cuenta que se estaba dirigiendo a Scott. Puse una cara de disgusto, no soy muy fan de él, pero tengo que soportarlo por Lyds. Si, es su novio.

Scott nos vio y se acercó a nosotros. Stiles estaba ansioso por ver la herida.

-Bueno, vamos a verla. Woah- estiró la mano para intentar tocarla, pero se la aparté antes de que tocara la venda.

- Estaba demasiado oscuro para ver, pero estoy bastante seguro que fue un lobo. - Dijo Scott mientras se bajaba la camiseta que anteriormente se había levantado mostrando la venda.

- ¿Un lobo te mordió? - Stiles empezó a negar, como si eso fuera imposible. Y en cierta manera lo era-Uh, Oh. No, no es posible.

- Oí a un lobo aullando. - Scott seguía insistiendo.

- No, no lo hiciste.

- ¿Cómo sabes lo que oí?

-En california no hay lobos. No desde hace como unos 60 años. - decidí intervenir en la conversación.

- ¿En serio?

- Sí, de verdad. No hay lobos en california. - Stiles dijo dando a entender mi punto.

- De acuerdo, entonces, si no me creéis sobre el tema de los lobos, definitivamente no me vais a creer cuando os diga que encontré el cadáver. - ¿Acaba de decir lo que creo que acaba de decir?

- ¿Estás bromeando? - Stiles y yo nos miramos cuando ambos pronunciamos las mismas palabras. Era algo más frecuente de lo que parece.

- No, tío, ojalá. Voy a tener pesadillas durante un mes.

- Oh, dios, esto es impresionante. - Stiles empezó a hablar mientras andaba de espaldas camino a la entrada del instituto. -Quiero decir, en serio, esto va a ser la mejor cosa que le ha pasado a este pueblo desde el nacimiento de Lydia Martin. - En ese momento mi hermana iba pasando con algunas de sus amigas, si es que se las podría llamar así. ¿Alguna vez han hablado realmente? - Hey Lydia te ves.... dispuesta a ignorarme. - Lydia pasó totalmente de Stiles, pero a mí me mandó una ligera sonrisa que correspondí- Tu eres la causa de esto, lo sabes. - Dijo dirigiéndose a Scott.

-Ajá. - No era la primera vez que teníamos esta conversación.

- Arrastrándome al mundo de los empollones.

-Vamos Stiles, deja de quejarte y empieza a caminar, no quiero llegar tarde a clases. - Lo cierto era que, aunque Scott y Stiles siempre estaban conmigo, solía ser en las casas de estos donde quedábamos, aunque había ocasiones donde íbamos a mi casa y Stiles se ponía nervioso cuando veía a Lydia. Ella, creo que realmente no se sabe ni su nombre.

Semper fidelis | Teen Wolf | Temporada 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora