El mundo al otro lado del estanque

Capítulo 10: Comprensión de las repercusiones

"Escuché que fuiste a una fiesta, Jake", dijo Haley.  Ella se había sentado a su lado en la mesa de reuniones después de verlo solo en la sala central.  Había libros esparcidos a su alrededor, Jake centrado en el huracán de papel.  Desafortunadamente, su intuición había vuelto a ser correcta, Lao Shi le indicó que trabajara hasta altas horas de la noche hasta que no pudiera moverse de la fatiga y luego siguiera trabajando.  La cueva distorsionó su sentido del tiempo, y Jake no estaba seguro de cuándo exactamente se había ido a la cama, solo que para cuando se despertó, el desayuno había llegado y se había ido.  Le dolía el estómago por el hambre, le ardían los ojos por la lectura interminable, pero aquí estaba tratando desesperadamente de terminar con lo último de esta molestia a su alrededor.

"Lo que no entiendo", dijo, ignorando el comentario dirigido por Haley, "es por qué las clases que están tomando todos parecen tan fáciles, pero apenas puedo hacer este estúpido trabajo escolar muggle".

"Estás empezando a hablar como ellos, chico", se rió Dominic mientras se unía a ellos en la mesa.  "Y es porque sus clases te interesan. Esto", señaló con la mano al desorden de papeles, "claramente no lo hace".

Jake ya lo sabía.  Le podrían importar menos las matemáticas y la química, pero ¿Transformaciones?  Encantos?  Cómo muchos de los estudiantes podían quejarse de sus clases cuando estaban aprendiendo cosas tan asombrosas estaba más allá de sus conocimientos.

"Dales una clase llena de estas cosas aburridas y te rogarán que vuelvan a Pociones", sugirió Jake.

"Ya tienen uno, se llama Estudios Muggles", corrigió Haley.  "Sin embargo, es sólo un curso optativo, por lo que nadie lo toma".

Nerk ahora se unió a ellos, reclinándose en su propia silla.  "No puedo decir que los culpo. ¿Fue la fiesta un destripador?"

"Ni siquiera fue una fiesta", dijo Jake, cansado de que constantemente hablaran de anoche.  "Un poco de bebida, un poco de canto, eso es todo".

"¿Bebiendo?"  Dominic cuestionó.  A pesar de las expectativas de Jake, en realidad parecía intrigado, no molesto.

"¡Jake, cómo pudiste!"  Haley los acusó como si los hubiera traicionado.

"¡No, no, no! ¡No beber, beber, solo cervezas de mantequilla! Joder, todos necesitan relajarse", terminó Jake con un murmullo.  Demasiado por confiar en mí, pensó.  "No salí por mucho tiempo; probablemente no debería haber ido en absoluto".

"¡Pero tienes que ver su sala común!"  Jake solo se encogió de hombros en respuesta.  "¡Eso es un gran problema! Luna ni siquiera me mostraría el suyo", dijo Haley con nostalgia.

"Los Hufflepuff probablemente no me mostrarían, incluso si les preguntara", agregó Nerk, aunque parecía indiferente al hecho.

"Eres tan afortunado, Jake, por la forma en que todos los Gryffindors te aman. No es justo", hizo un puchero, con los brazos de dragón rosa oscuro cruzados con disgusto.

Jake se puso de pie abruptamente, revolviendo otra tormenta de papeles.  Quería gritarle, contarle que todos pensaban que era un fenómeno, que estaban aterrorizados por estar en la misma habitación que él, pero sus mandíbulas seguían cerradas.  Haley supo cuando se las arregló para molestar de verdad a su hermano y la vergüenza estaba brotando dentro de ella.  "¿Qué dije?"

Su hermano ordenó juntar la mayoría de los papeles en un montón y los acunó con los libros en sus brazos.  "Solo déjalo," dijo rotundamente.  "¿Cuándo es el almuerzo?"

"Pronto," respondió la voz de su abuelo, el dragón azul llegando desde su propia habitación.  "¿Y cómo han ido tus estudios?"

Jake había desaparecido detrás de una puerta al final de su túnel, un fuerte golpe resonó en el pasillo mientras dejaba caer la carga de papeles.  "Si escucho las palabras estudios, asignaciones o tareas escolares una vez más, voy a gritar".  Volviendo a la vista, vio la mirada expectante de su maestro dragón y respondió con un suspiro, "Estoy atrapado, G."