El mundo al otro lado del estanque

Capítulo 8: Construyendo puentes

A la mañana siguiente comenzó la rutina de nuevo, y Harry se encontró temiendo el día mientras se inclinaba sobre sus salchichas y huevos en el desayuno.  Los tres estaban exhaustos y Ron ya había logrado insultar a Hermione para que se callara.  Sin embargo, Harry no estaba convencido de que esa fuera la única razón por la que ella no hablaba, ya que se dio cuenta de que estaba prestando atención a la mesa donde Jake se sentaba con Lao Shi.  Jake estaba tratando de imitarlo mientras apuntaba con un dedo en garra a una copa, haciendo que flotara en el aire y girara, aunque Jake solo logró volcar y derramar su contenido.

Pasaron a los encantamientos, donde el profesor Flitwick comenzó reiterando la importancia de los O.W.L., un mensaje que Harry se estaba cansando de escuchar.  La hora pasó rápidamente, y pronto estuvieron bajo la mirada transfigurada de la profesora McGonagall, escuchando el mismo discurso una vez más.  Al parecer, Jake y Lao Shi también estaban observando esta clase.  No podía ver sus manos, pero Harry tuvo la sensación de que Jake estaba practicando cualquier técnica que había estado usando antes, dado que los objetos al azar alrededor de la habitación seguían tambaleándose o temblando.  Neville siempre fue torpe, pero debió haber dejado caer su varita una docena de veces mientras intentaba hacer que su caracol desapareciera para la lección, para diversión del dragón rojo.

Hermione todavía se rehusaba a hablar con Ron cuando llegó el almuerzo.  Ron y Harry estaban comenzando a entrar en pánico por la carga de tarea que tenían que completar, por lo que decidieron sacrificar sus almuerzos por un tiempo precioso en la biblioteca.  Estaban comenzando a caminar cuando Harry se giró para decirle a Hermione que se encontrarían con ella en su próxima clase, solo para descubrir que ella ya estaba en el pasillo hacia el Gran Comedor.

"¿Vas al Gran Comedor a almorzar, Jake?"  La voz de Hermione sonó detrás de él.  Jake se volvió y vio a la chica brillante de cabello castaño rizado que acababa de alcanzarlo a él ya Lao Shi.  Lo había sospechado antes, pero después de ver su lección de transfiguración, supo que Granger era un prodigio.  Ella había lanzado con éxito el hechizo de desaparición en su tercer intento, mientras que el resto de la clase no había hecho desaparecer ni un pelo.

"Yah, me muero de hambre, ¿vienes?"  Se dio cuenta de que estaba sola y preguntó: "¿A dónde fueron Harry y Ron?"

"Oh, bueno…" hizo una pausa, poniéndose al lado de Jake mientras caminaban.  "Ron me molestó antes, así que realmente no hemos estado hablando esta mañana. Fueron a la biblioteca a trabajar en la tarea, pero ya terminé la mayor parte".  Lo dijo con tanta indiferencia, pero Jake sabía todo acerca de las cargas completas que habían recibido hasta ahora.

"¿Es esto algo normal? Tú y Ron peleando, quiero decir", preguntó Jake.  Acababan de entrar al pasillo y se estaban moviendo para encontrar un asiento en la mesa de Gryffindor.  Lao Shi tocó brevemente el hombro de Jake antes de dirigirse hacia la mesa principal, probablemente para hablar con Dumbledore o uno de los profesores.

Granger soltó una risa cómplice.  "Más de lo que me gustaría admitir. Bien podríamos ser hermanos, por la forma en que discutimos".

"Créeme, lo real es mucho peor", coincidió Jake sonriendo, llenando su plato con golosinas cercanas en la mesa.

"¿Tienes hermanos y hermanas?"  Preguntó Hermione.  Había querido hacerle preguntas a Jake sobre los dragones de la isla Draco, y esta parecía una buena forma de comenzar la conversación.  Su necesidad de conocerlos era insaciable.

Jake negó con su cabeza escamosa.  "Sólo una hermana, y ella es suficiente. ¿Tú?"

Granger también negó con la cabeza.  "Hijo único, aunque siempre me he preguntado cómo sería. Si son como Ron, creo que estoy bien."  Ella no pudo evitar reírse de eso.  "Si no te importa que te pregunte, ¿eres de los Estados Unidos? Los únicos dragones salvajes que he oído que son nativos de las Américas estaban en Chile y Perú…" tartamudeó antes de mirar a Jake alarmada.  "¡No es que seas un dragón salvaje, por supuesto! Tu lote no es tan grande o insensato como la variedad típica."  Jake arqueó una ceja ante eso, Hermione pensó que lo había ofendido y continuó divagando y con suerte aliviar la tensión.  "Es extraño que todos ustedes vengan de la Isla de Draco pero tengan diferentes ... uhm, ¿etnias? ... ¡Lo cual no es algo malo! ..."