Ya no puedo

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La verdad es que no se que pasara, la situación de mi hermana me afecta, ella no es feliz, yo tampoco lo soy. 

Pasan los días y nada cambia, la situación es la misma, Emma ya no sale de su casa, cada vez que voy, la encuentro en la cama, su cama luce desordenada, todo esta tirado, hay restos de comida en el cuarto, pañuelos sobre la cama  y en el suelo, me sorprende como puede hacer todo este desastre tan solo en un día, incluso abandono su trabajo, esto va de mal en peor. 

Después del trabajo voy a casa de Emma, afortunadamente Gerardo me deja salir a las 7:00, a las 7:30 ya me encontraba en casa de mi hermana, cuando llego comienzo a limpiar su habitación, ella esta sentada sobre la cama, con ese mismo pijama rosa, nunca pensé verla así, mira hacia la ventana, el sol entra por aquella ventana pero la luz del sol no es suficiente para darle luz y alegría a la vida de Emma, estoy harta de esto, no puedo mas, lloro al verla así, me entristece, siento que cada día que pasa pierde las ganas de vivir.

-Emma

Menciono su nombre para traer su atención, ella gira lentamente su cabeza, mirándome fijamente, pero con tristeza en la mirada.

-Gerardo vendrá en un rato, me dijo que quería verte, ¿Por qué no te das un baño, te cambias, te pones bonita y hablan un rato?  

Trate de sonreír, ya que con su forma de ser, me es imposible sonreír, me entristece.

-No quiero ver a nadie!!! ¡¿Porque no pueden entenderlo?! Largo de aquí!!! Vete!!!

Comenzó a gritarme y arrojarme lo que tenia a la mano.

-Basta Emma!!! Yo solo quiero ayudarte...

De mis ojos comenzaron a salir lagrimas, sentía que no podía mas.

-Yo no te lo pedí, yo no te pedí que me ayudaras!!! Así que vete y no vuelvas!!! 

Era la primera vez que mi hermana me hablaba de esa manera, pero...tenia que entenderla, necesitaba estar sola, aunque fuera solo un rato, tome mi bolso y me fui. Pero volvería en un rato, se me ocurrió prepararle su platillo favorito, así que iría a comprar lo necesario, seguro eso la animara, o al menos eso espero. 

Estaba en el supermercado comprando lo necesario. De pronto escuche que mi móvil timbraba, lo saque de mi bolso, mire la pantalla, era Gerardo.

Inicio de la llamada

-Hola Mari, donde estas?

-Pues estoy comprando unas cosas para mi hermana. ¿Ya llegaste a la casa de Emma?

Hubo un momento de silencio.

-¿Sigues ahí?

-Perdona Mari, no creo que pueda ir, surgió algo aquí en el trabajo y tengo que encargarme. Iré mañana.

-Esta bien, no te preocupes. Nos vemos.

-Adiós, cuídate Mari.

Fin de la llamada.

Tome un taxi que me llevaría a casa de Emma. 

-Señorita ya no puedo llevarla mas adelante

-¿Por que? ¿Qué pasa? 

Intente mirar pero había un gran alboroto, patrullas, bomberos, reporteros, personas que se acercaban, vecinos. Realmente era un gran barullo, le pague al taxista, fui acercándome mas, cuando note que todo este alboroto venia de la casa de Emma, corrí lo mas rápido que pude, soltando lo que llevaba en mis manos, cuando logre pasar a todos, vi una ambulancia, policías alejando a la gente, la casa de Emma se había incendiado, me acerque, pero un oficial me detuvo.

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