El Príncipe y el cazador (Versión Snk)

#09

Cómo de costumbre, luego de dormir en la habitación del príncipe, Levi se incorporó al ejército para comenzar con los ejercicios y actividades que se les ponían a todos, así que comenzó a activarse junto con todos los demás.

Al caer la tarde a todos los soldados se les permitió descansar; algunos se retiraron y otros tomaron asiento para platicar sobre ciertos rumores que rondaban los pasillos

–Quizás solo se pueda ascender en éste lugar haciendo "favores"– Mencionó uno de los soldados que de vez en cuando volteaba a ver a Levi
–Asi es, nosotros llevamos tiempo aquí y ni a guerreros llegamos, otros en cambio desde su llegada tomaron el cargo. Quizás se deba a ciertas cosas ¿no es así, Levi?–
Insinuó el compañero y él al escucharlo se levantó de dónde estaba para ir hacia él

–¿Qué tratas de decir exactamente? Habla claro– ordenó el pelinegro sabiendo a lo que se referían

–Pues...que en el tiempo que llevamos nosotros nada ha pasado, pero desde que tú entraste rápidamente ascendiste a capitán, y aunque tus habilidades son buenas quizás....se deba a algunos favores, relacionados con algún superior tal vez– le respondió con descaro y esto no hizo otra cosa que molestar al chico, llamando la atención de todos

–Que tú seas un inútil no es mi culpa

–¿Inútil?? Más bien que no tenemos los "privilegios" que tú tienes; aquí ya todos sabemos la clase de relación que tienes con el comandante Erwin y que incluso duermes en su habitación, no es de extrañarse que.....–
Las palabras de aquel hombre hicieron que el chico perdiera la cabeza y de inmediato le soltó un golpe en la cara para callarlo

–Insinuas que todo es gracias a eso ¿No es así??
Me importa muy poco que hables de mi pero como soldado tienes la obligación de respetar al comandante– le exigió para después apoyar un pie en su cara hasta que el otro levantó a su compañero

–Por favor Ackerman, sabemos la clase de delincuente que eras antes, solo por ser el amante del comandante no te da derecho a....–

–¿Quieren callarse los dos?– antes de que la situación se saliese de control, intervino una pelirroja tratando de evitar una pelea

–¿Qué quieres aquí Petra? ¿Acaso vienes a defender a este hombre??–

–Yo vengo a defender al comandante que antes que nada es un príncipe y no tienen derecho de hablar así de él– contestó la chica realmente enfadada

–Entonces ¿estás enamorada de él?? Vaya vaya, ¿Auruo no te satisface?
Veo que Levi tiene competencia– ante tal cinismo la chica no pudo más y terminó por golpear a su compañero

–Sino tienen nada bueno que decir entonces cierren la boca, ¿Qué más da si me meto con otra persona? Ustedes no tienen ni habilidades ni pareja, no son más que un par de envidiosos sin nada–
Con lo dicho por Petra, ambos hombres se callaron y se levantaron pues les habían escupido en la cara (metafóricamente hablando) y no les quedó más remedio que callar

–No era necesario – comentó Levi de ver cómo la chica le había ayudado

–Esos tipos siempre han sido así; esperaba una oportunidad para ponerlos en su lugar por irritantes pero no me espere llegara tan pronto– sonrió de recordar las caras de aquellos soldados cuando soltó sus verdades

–Petra, hay algo que quiero discutir contigo, acompáñame– pidió el pelinegro aprovechando la ocasión para charlar con la mujer
–Si capitán–
Inmediatamente lo siguió hasta donde el joven quiso y después de tomar asiento empezó la charla

–Lo que quiero hablar es acerca de cómo es estar enamorado–
La chica quedó impactada debido a la petición de su superior pero sobre todo, se sentía feliz y honrada de haber sido escogida para hablar del tema

–¿Te parece graciosa mi duda??–
Al verla sonreír le hizo dudar por unos minutos si había sido buena idea preguntarle

—Oh no, no capitán, solo que me alegra que usted haya tenido la confianza de preguntarme– de inmediato se disculpo y se acomodó en el asiento para explicarle acerca del amor.

–Bueno verá, el amor no es muy fácil de explicar pero es un sentimiento muy bonito, empieza con una cierta atracción por parte de esa persona y con el tiempo va tomando fuerza, a menudo es confundido con la amistad o el cariño; también puede expresarse de diferentes formas, hay personas cursis y otras que no tanto, también están....–

Así la chica fue explicándole todo cuánto el hombre quería saber del amor, resolvió algunas de sus dudas e incluso llegaron a beber té juntos mientras seguían con su charla, una escena totalmente increíble para los demás soldados pues parecían amigos de toda la vida, cosa que no era usual en él.
Levi estaba asombrado con todo lo que Petra le contaba, desde el surgimiento del amor hasta las maneras de expresar el mismo, como descubrirlo y distinguirlo entre otras cosas. El pelinegro se iba identificando más y más con las descripciones que ella le daba y ahí fue cuando cayó en cuenta qué, evidentemente, estaba enamorado.

Aún seguían con la plática cuando el príncipe se presentó en el lugar buscando a Levi, hallandolo de lo más cómodo y tranquilo junto a Petra.
Por un momento y sin saber porqué; o tal vez sí, empezó a sentir celos de ella y de la manera en que se estaba llevando con la chica, pues al parecer tenían una buena comunicación y era algo que el joven también deseaba compartir con Levi, sin embargo éste era demasiado frío con él, sumado a la noche anterior donde sin pensar lo había besado, ahora no sabía ni como actuar frente a él, pero de algo estaba seguro y era de que también llegaría a disfrutar de esa especie de "conexión" con él.
Rápidamente se acercó a ambos para hacerse notar y que la chica se fuera o mínimo pudiera integrarse a la conversación entre los dos

–Levi, te estaba buscando– le mencionó parándose justo en frente de él pero sin ser tan evidente

–¿No te enseñaron a no interrumpir?
Al tenerlo de frente se asustó pues estaba platicando de algo muy importante que no deseaba compartir con el rubio ya que en cierta parte él estaba involucrado en ello.

–Con su permiso comandante, me retiro– Petra entendió inmediatamente y se alejó del lugar yéndose con Auruo para conversar acerca de su relación.
Levi al quedarse ahí se levantó algo molesto y recogió las tazas de té para llevárselas a la cocina

–¿Estás molesto?

–No creo que a alguien le agrade que interrumpan su conversación– le contestó mientras caminaba hacia la cocina yendo Erwin tras de él

–Lo siento

–Que más da, ¿a qué has venido? Aún no es de noche para que vaya yo a verte–
Al llegar dejó la bandeja en la mesa y comenzó a lavar los trastes, importandole poco el que Erwin estuviera ahí mientras él lo miraba sorprendido, no se imaginaba que Levi hiciera eso

–Ayer me llevaste a conocer la ciudad, quiero hacer lo mismo por ti pero está vez conocerás este lugar ¿Te agrada la idea?– ofreció algo dudoso y nervioso pues debido a los términos en que habían quedado era probable que el chico le rechazara y con facilidad, esperando internamente que no sucedería

–Me sería útil, ¿Cuando sería?–
Afortunadamente no ocurrió y Erwin se sintió aliviado de no haber sido rechazado

–Esta tarde ¿Estás de acuerdo?

–Bien, ¿Donde empezamos??
Lleno de emoción le tomó del hombro para indicarle donde, siendo el primer lugar la cocina pues era donde se encontraban

–Te mostraré primero este lugar y luego las otras partes del castillo, algunas ya las conoces y otras solo lo sabe la familia real. Espero que te guste el recorrido

Estaba tan feliz de ser aceptado que incluso contagiaba de su alegría al pelinegro quien aún cuando mantenía ese rostro tan serio, estaba contento de conocer un poco más del lugar y eso él lo sabía pues a pesar de siempre estar inexpresivo, el rubio aprendió a reconocer sus gestos, cosa que nadie más había logrado y que de cierta forma le llenaba de orgullo.