Battlefield [Dean Winchester y tu]

Capítulo 12

Tardamos una hora y poco más en llegar a nuestro destino. El trayecto había sido algo pesado, porque apenas habíamos hablado y cuando lo hacíamos era sobre grupos de rock que sonaban en la radio y que a los dos nos gustaban.

Solo llegar decidimos que primero sería mejor buscar un motel en el que alojarnos y dejarlo todo allí, entonces empezar la investigación. Esta vez, nos alojamos en el Clarion Hotel.

Yo me quedé dentro del Impala mientras Dean entraba a recepción. Unos minutos más tarde abrió mi puerta y me dejó salir. Los dos nos dirigimos al maletero a coger nuestras cosas, después yo le seguí. Fue a la habitación número 14. Él dejó una de sus mochilas en el suelo y yo le tendí mi mano.

Él me miró extrañado, no lo comprendía.

-La llave de mi habitación –dije.

Negó con la cabeza.

-Solo les quedaba una habitación libre –metió la llave en la cerradura y abrió la puerta. Entonces vi que era una habitación con cama de matrimonio.

Le miré para que me contase la verdad, pero él se limitó a hacer un gesto con los hombros. Yo miré alrededor y justo vi a un hombre que dejaba la habitación.

-¡Anda! –Dean también miró en la misma dirección- Voy a pedirme esa habitación.

Caminé hacia adelante, pero de nuevo me cogió del brazo para detenerme.

-No deberías estar sola –me advirtió.

Sonreí de lado y él me soltó.

Entré primera y dejé la mochila en el suelo y la guitarra cuidadosamente sobre la cama. Dean se colocó a mi lado y ambos observemos la habitación; Una gran cama de matrimonio, un escritorio, una televisión y el baño. La verdad es que no estaba tan mal comparado con otros moteles.

Respiré y miré a mi izquierda, a Dean. Él me devolvió la mirada pero estábamos muy serios así que solté una broma.

-Nuestro nidito de amor –él sonrió y nos miramos unos segundos.

-Nos merecemos algo mejor –caminó hacia adelante, entonces se detuvo y volvió a mirarme- Bueno, solo me lo merezco yo.

-¡Oye! –me quejé, me acerqué a él y como estaba a la altura de la cama le di un leve empujón y cayó sobre ella.

Cogí la guitarra y la apoyé en una esquina, acto seguido me di la vuelta y vi a Dean estirado boca arriba tapándose los ojos con las manos y haciendo cosas raras.

Sonreí y me acerqué a su lado, entonces me apoyé con las manos en la cama y esperé a que abriese los ojos.

-Deberías dejar de hacer el idiota –abrió los ojos y sonrió.

-¿Para hacer qué?

-Investigar, por ejemplo.

-Es que antes de empezar un caso me gusta relajarme.. –cerró los ojos de nuevo.

-En ese caso.. ¿quieres que te ayude? –dije algo ligona, acto seguido me puse encima de él y volvimos a quedar muy cerca.

-¿Me lo estás pidiendo? –susurró levantándose un poco para estar cerca de mis labios si la respuesta era Sí.

Sonreí y rodé hacia el otro lado de la cama.

-Quizás –me hice la interesante- Mejor otro día semental.

Después de estar un buen rato convenciendo a Dean para que se levantara de la cama, nos dirigimos hacia donde habían pasado las víctimas. Cogimos varias armas y nos adentramos en un huerto, pero rápidamente encontramos un espantapájaros y nos paramos a observarlo.