𝗆 𝖺 𝖽 𝖾 𝗅 𝗒 𝗇

𝐪 𝐚 𝐫 𝐚 𝐧 𝐭 𝐞

〄

    LARGAS HORAS PASARON ANTES de que la pequeña familia regresara a Forks. Nathaniel estaba conduciendo, una mano en el volante y la otra en el muslo de su esposa. Madelyn casi estaba saltando de la emoción, ansiosa de ver al resto de sus familiares. Aiden también estaba emocionado, balbuceando de vez en cuando. Él ahora tenía una semana de vida pero se veía como si tuviera un año, tal vez más grande. Ahora podía hablar oraciones completas, para el asombro y orgullo de sus padres. Incluso estaba comenzando a hablar francés.

"¿Estás emocionado de ver al abuelo?" Nathaniel le sonrió a su hijo, volteándose en su asiento. Aide tenía una pequeña idea sobre Charlie y no podía esperar a conocerlo realmente.

"¿Est-ce que Papi va être content de me voir?" [¿El abuelo estará feliz de verme?]. El pequeño niño preguntó, jugando con sus dedos mientras observaba hacia afuera.

"Por supuesto que estará feliz de verte, mi amor. Él era el más emocionado cuando le dijimos que volveríamos a casa. No te preocupes por nada" Madelyn le sonrió tranquilizadoramente a su hijo, saliendo del auto con el vampiro.

    Ella tomó a Aiden de su asiento y cerró la puerta, Nathaniel tomando las valijas que querían dejar en la residencia Swan. Mientras Madelyn estaba caminando hacia la puerta de entrada, Aide se acurrucó aún más en el cuello de su madre, tratando de esconderse a sí mismo.

    El vampiro rápidamente se reunió con ellos, dejando un beso en ambas cabezas y envolviendo un brazo alrededor de su compañera. Ellos no tuvieron tiempo de tocar la puerta que esta fue abierta, con un Charlie sonriente del otro lado.

"Por fin están de vuelta" Él sonrió, envolviéndolos en sus brazos con emoción.

    Madelyn rio, sin estar acostumbrada a que su padre actuara así. Las preocupaciones de Aiden parecieron ser lanzadas por la ventana en cuanto dejó ir el cuello de Madelyn y envolvió sus brazos alrededor del cuello de Charlie, haciéndolo saltar. Alejándose de la pareja, él abrazó protectoramente al pequeño niño que se abrazó a él. Finalmente observando al infante, él sonrió aún más grande.

"Y allí está el hombre de la ora" Aiden rio y abrazó a Charlie otra vez. Dejando entrar a la familia, ellos se sentaron en el sofá.

    Por la hora siguiente, Madelyn puso al día a su padre con todo lo que había sucedido en Nueva Zelanda, bueno, casi todo, mientras el hombre Swan estaba jugando con su nieto, asombrado de que fuera tan brillante.

    La siguiente parada de la familia fue la casa Cullen, ya que tenían otras cosas que guardar antes de encontrarse con la manada, Antes de que siquiera pudieran abrir la puerta de entrada, Alice ya estaba allí, abrazando a la cambiaformas fuertemente.

"¡Te extrañé tanto Maddy! Estoy tan feliz de que estés bien, deje de tener visiones sobre ti y estaba preocupada, y luego Nate me colgó mientras estábamos hablando...." La pixie divagó, notando a su tío parado allí con una sonrisa tímida, y sosteniendo a Aiden cerca de su pecho. La pequeña vampira corrió hacia su tío, golpeando su nuca. "¡No me vuelvas a hacer eso! Creí que iba a tener un ataque al corazón" El silenció a su tío cuando fue a hablar. "¡Aww, en aquí pequeñito! Soy la tía Alice" La sonrisa de Aiden se hizo más grande mientras el profesor se lo pasaba a su sobrina.