Abstracciones reales

¿Amor?

Todos me miran como si estuviera loca cuando hablo del amor, cuando digo que no me importa, que no existe. Lo que pasa, es que no entienden que soy incapaz de amar.

Cada vez que alguien se acerca a mí, acaba hecho pedazos, - y no es que yo crea que soy importante, al contrario-.  Pero hay algo en mí, un mal, que por todos los medios evita que me rodee de buenas personas, por ello les hace daño. Y puede que ese mal sea una excusa para decir que yo no tengo nada que ver, porque me duele el recordar todo el daño que he hecho.

Mi cerebro funciona de una manera que ni una máquina estropeada de los 90' lo haría, y da igual todo el aceite que le eches, porque nunca funcionó bien. Se crea historias enrevesadas de que está enfadado contigo e incluso puede crear patrones y hacer que esa información parezca cierta. Tu cabeza da vueltas en un bucle infinito intentando recordar que es lo que hiciste, qué dijiste; y mientras pierdes tu tiempo con todo aquello, el verdadero dolor ha surgido a tus espaldas. Dejándolo abandonado cuando más necesitaba tu compañía, cuando lo pasaba mal.

Y es por todo eso y mucho más, que cuando se acerca gente, levantas un muro; o al menos lo intentas, porque esa persona significa tanto para ti que darías todo lo que tienes, ya que lo único que quieres es estar entre sus brazos y escuchar su voz. Piensas: "antes de hacer daño, me alejo para que no sienta". Puede que sea un error pero, hay gente que no está hecha para amar ni ser amada, así que para qué involucrar a alguien más.

Es mejor olvidar su risa, sus ojos, sus labios. Y recordar siempre sus lágrimas y su mirada decepcionada, para que así, esta vez, ella no salga malparada.