Capítulo 2: Ni por todos los Santos.

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Brooke

Odio los rumores.

Son como la peste. Se extienden tan rápido que a penas y te da tiempo de analizar qué fue lo que sucedió o como demonios pasó.

Lo peor es que, cuando ya tienen a una buena cantidad de oyentes, es muy difícil desmentirlos. Por lo que terminan arruinando tu vida, tu destino y tú existencia.

Eso fue lo que me pasó a mí. Luego de que el beodo inútil se largará dejándome en el baño rodeada de un montón de chicas que son como pirañas cuando de los huesos de Stone se trata; obviamente que el chisme de que yo era su novia se expandió como un tumor.

Milagrosamente pude salir del shock y retirarme a mi dormitorio con mi cabello intacto y mi cara completamente a salvo. Pero no todo es color de rosas, debido a que obtuve una amonestación.

Una amonestación que jodidamente debía de ser de Grace, a quien miré fijamente antes de salir de la sala de víboras con mis cosas.

Por supuesto que también obtuve un montón de susurros a mí paso en los que las palabras: Perra y Brooke, era las únicas entendibles.

Pero lo peor vino después. Cuando llegué a mi cuarto y me encerré con llave, decidida completamente a no salir jamás de allí. Comenzé a plantearme la posibilidad de dar las clases en línea; eso o ser despellejada por alguna de las locas fanáticas del prostituto. Claro que mi instinto de supervivencia superaba mi vida social, incluso los deseos de ir al baño.

Pero todo se me frustró cuando vi que no había posibilidades de ninguna clase en línea y que me tocaba asumir.

He estado acostada en mi cama desde entonces...intentando pensar en alguna idea factible para lograr, o desmentir todo, o salir bien de esta.

— Brooke— llaman a la puerta y me levanto de un brinco.

Y hasta ahí llego el plan de supervivencia.

Cierro los ojos e incluso sostengo la respiración... Debo de evitar a toda costa que se aseguren que estoy dentro.

— ¡Brooke, abre la puerta!— la manija se comienza a agitar y yo solo puedo pensar en cómo mantener mi vida a salvo .

Comienzo a buscar excusas para intentar, al menos, salvar algo de mi reputación. Pero todas se hacen añicos cuando reproduzco en mi mente la escenita de hace un momento.

No puedo decir que no es lo que parece... Porque demonios, sí que lo es.

Todas vieron a una Brooke alías "futura cadáver" desnuda, a excepción de la impúdica toalla, que solo cubría lo esencial.

Vieron a un Jack Stone alias: El "prostituto" agarrando la cintura de la "futura cadáver", con todo su cuerpo pegado al de ella.

Y jodidamente, todas vieron el beso húmedo que el imbécil me dió. Sin tapujos.

Así que, joder, sí es lo que parece. Y a pesar de que yo les diga que todo fue un teatrillo suyo para evitar explicar el verdadero motivo por el cual estaba allí, incluso si delato a Grace, estoy jodida.

¿Por qué?. Porque nadie creerá que yo detesto a Stone... o sea, según ellas, nadie en su sano juicio le dice que no al Dios del Campus.

Pues amigas, acaban de encontrar a una de las pocas personas para nada cuerdas de todo el bendito estado.

— ¡Brooke Singer Gray, si no abres la maldita puerta ahora mismo te juro por el Papa Francisco que la derribaré a patadas y si tengo que romper uno de mis pradas porque tú te rehusas a dar la cara, entonces realmente que estarás muerta!.

Maldito Jack StoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora