Louis bajaba la calle empedrada con una sonrisa recordando las dos últimas ocasiones y el toque de Harry en su cuerpo. Al entrar a aquel lugar entre la penumbra y la tarde gris en su esplendor, dejó las velas una a una para ir recorriendo con un encendedor y apagando la luz, mientras se desnudaba.Harry entró poco después con curiosidad, como un felino sigilosamente que trata de no ser descubierto para oler a vainilla, ese aroma que desprendían las velas intensamente mientras Louis le rodeaba por la espalda, anhelando cada vez más su roce de piel con piel.
Harry desesperado buscó su boca sedienta en un beso donde se decían lo que empezaba a nacer de dentro de ellos, lento, como el fuego que comienza a arder y recorriendo la espalda de Harry, Louis lo posicionó contra la pared mientras levantaba sus brazos y enseñaba su cuello para que fuera atacado por el contrario.
Louis, ansioso por tocar y recorrer cada trazo de piel que se dibujaba a la luz de las velas, dejó caer el cuerpo de Harry mientras quitaba la bata satén azul cielo que llevaba este para rozar su entrada y sumergirse en su interior con las ansias de sentirlo empezando el vaivén.
Lento pero continuo.
Suave pero preciso, como una pantera recorriendo con su vista inexistente al bosque en busca de un olor conocido. Como cordero ante su sumisión, siente la daga antes de introducirla en la rosa.Con calma pero con ansias, en ese baile de luces que las velas y su aroma perfuman, en el que las sombras se persiguen el juego de la seducción, introduciendo Louis un dedo mientras recorre los lunares de su espalda como si fueran constelaciones del universo. Preciado este que se extiende al anochecer, causando que derramen estrellas mientras los gemidos son la música que adorna semejante espectáculo.
Y con más fuerza, la fuerza de la noche cayendo con precisión, Harry sujeta su pelo mientras simula estocadas y la pasión recorre cada extremo de su cuerpo. Con habilidad, arqueando su cuerpo con cada espasmo de placer, subiendo y bajando al ritmo de las pieles chocando. Una con una, como si se pertenecieran en alma haciendo un pacto etéreo con la eternidad.
El fuego recorre con cada estocada lenta, con cada llamarada mientras boquea y sube un escalofrío que recorre la columna vertebral mientras el calor aumenta con cada roce lascivo. Fuego que asciende quemando a su paso todo con lo que la inocencia se camufla de blanco. Llama que arde entre los suspiros y gruñidos desatando la tormenta entre las nubes grises que, en una tarde de otoño desciende con fuerza, con poder entre la majestuosidad de la llama que aún encendida llega a su límite cuando el orgasmo llega a su culmen; y estalla en rayos, luz y relámpago mientras que la llama se desvanece guardando y privando al resto, del secreto de dos amantes obnibulados a la luz de las velas.
Sé que iba a subir mañana, pero estaba inspirada y amé cómo quedó el final.
Mañana subo otro más largo, lo prometo,Vuestra emocionada,
Bayofstars ♡♡.
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Lo que esconden tus ojos
Fanfiction- Muy bien, señor Tomlinson...¿Alguna preferencia; champagne o algo que desee? - Sí, tengo una condición: yo llevaré los ojos vendados y el chico que entre a la habitación puede llevarlos vendados o no, como él prefiera. 🍒 Idea original mía; NO A...