Niall recorría Diamantes en la Luz con mucho papel higiénico envolviendo su cabeza y en las manos ondeaba una cinta de color lila que había robado de un camerino, no quiso saber cuál. Al grito de " Nadie me persigue perras ", corría haciendo que muchas miradas se centraran en él, aunque ya estaban acostumbrados a las extravagancias de Niall. Así, en la locura improvisada de un domingo soleado, Harry y Niall trotaban por cada estancia haciendo sonidos inentendibles y tarareando alguna canción de ABBA. No era un buen día para Harry, ya que le habían prohibido volver a ver a Louis después de enterarse de su encuentro a escondidas por última vez en la habitación. Niall había querido arreglar aquello haciendo una fiesta de disfraces inventada diciendo que " los domingos siempre son días para celebrar ". Harry le había mirado con una sonrisa a medias sin añadir nada, pues cualquier motivo era bueno para olvidar que no vería a Louis.- ¿ Crees que el lila me queda mejor que el verde pastel ? Mm, ¿ Tú qué opinas pequeña florecilla ? - Preguntaba Niall fatigado sentándose en un sofá orejero verde turquesa.
- Creo que todos los colores te quedan bien...oye Niall, qué te parece...bueno, mejor no, no sé...- Dijo dudando Harry enredando en sus dedos cinta de color azul celeste.
- Dime Harry, dime, ¿ Qué es lo que quieres hacer ?
- Podemos investigar...algo así como hacer de detectives y buscar pistas, ¿ Qué te parece ? - Dijo Harry saltando de su asiento emocionado.
- Sí, me parece...¡ Genial ! ¡ Maravilloso ! ¡ Fabuloso !
¿ Crees que si me pongo una gabardina pareceré más un detective ? - Respondió Niall levantándose y buscando entre las prendas tiradas.- Creo que sí, pero tenemos que darnos prisa, sabes que cierran la mayoría de las habitaciones a las dos. Vamos, vamos. - Dijo Harry agarrando la mano de Niall.
Y así, dos alocados aventureros decidieron recorrer desde la tercera planta hasta la primera para " recoger pistas ". Niall alegó que era mejor empezar al revés de lo que se solía hacer porque era aburrido ser como los demás. Harry sólo sonrío y tiró de Niall hacia el despacho de la jefa, que por suerte, en esos momentos no estaba allí.
Al entrar se extrañaron pues notaron que la puerta, normalmente cerrada con llave, estaba abierta y parecía haber sido forzada. Lo que más les sorprendió fue ver cajones abiertos, papeles tirados y un montón de relojes y libros tirados en el suelo. Una auténtica ventolera debía haber pasado en ese lugar para que todo se viera tan destrozado y revuelto.
- Dios mío, ¿ Qué ha pasado aquí ? - Preguntó Harry en un susurro mientras se daba un leve golpe con la mano en la frente.
- Alguien quería encontrar algo desesperadamente, eso está claro, pero, ¿ el qué precisamente ? - Preguntó Niall mientras movía unos de los pocos libros que se habían salvado de aquella contienda.
- No lo sé, sólo tenemos que buscar más pistas, ¡ Vamos Niall ! - Gritó Harry emocionado agarrando otra vez la mano del rubio con el entrecejo fruncido pensativo.
Así, los dos detectives, o un intento interesante de ello, se dirigieron hacia la segunda planta hacia el ala norte, donde se encontraba el conserje. La última vez, después del incidente de las patatas en el suelo, Niall tuvo que sobornar al conserje con una tarta de chocolate para que no dijera nada a los superiores de lo ocurrido. Esta vez se extrañaron al no escuchar ningún ruido de esa sala, y procedieron a entrar.
- ¿ No oyes algo en esa habitación de la derecha ? Espera, vamos a entrar - Dijo Niall abriendo la puerta blanca con el pomo dorado.
Ante sus ojos se extendía la escena de una bañera llena a rebosar que le faltaba poco para colmarse. De ahí venía el sonido del tintineo de las gotas al caer.
- ¡ Oh pero qué es este caos ! - Exclamó Harry mientras cerraba a duras penas el grifo dorado de la bañera blanca a rebosar.
- No entiendo nada, si vemos otra cosa parecida, juro que ya no son simples coincidencias. - Dijo Niall robando jabón de manos de lavanda.
- Vamos Niall, deja eso - Dijo Harry mientras salía de la habitación intentando no mojarse los calcetines blancos con el agua del piso de mármol.
Y así, se dirigieron consternados hacia la primera planta donde la recepción era un caos; todos los teléfonos sonando y mucha gente corriendo de aquí para allá.
- Pero, pero... ¿ Qué es lo que está pasando ? - Preguntó Harry después de ser empujado por un hombre con sombrero que corría hacia las escaleras.
- Perdón señorita, ¿ Me puede decir qué está pasando ? - Preguntaba Niall en la mesa de recepción.
Al no recibir respuesta, solamente caras preocupadas o de confusión, decidieron marcharse del lugar a uno más tranquilo.
En el camino, notaron que las limpiadoras habían desaparecido dejando sus carros de limpieza tal y como los habían usado esta mañana. Parecía una huida intempestiva que no sorprendía a nadie en la recepción pero dejaba a Niall y a Harry con la boca abierta.
- Vamos a los cables de la luz, ahí a lo mejor averiguamos algo - Dijo Harry convencido.
Al llegar, tras subir unas escalerillas rojas al lado de la luz de emergencia, el sitio estaba muy iluminado y todo parecía en orden. No fue hasta el momento en que Niall divisó unas cajas grandes de color verde con nombres en negro en una esquina cuando se empezaron a dar cuenta de que algo verdaderamente andaba mal.
- Harrry , ¿ Qué son esas cajas ? - Preguntó Niall acercándose a ellas.
No le dio tiempo a acercarse mucho cuando todas las luces se apagaron de golpe. ¿ Qué había sido eso?
- Niall, ¿ Has apagado tú la luz ? - Preguntó con miedo Harry.
- No, te juro que no he sido yo esta vez.
Al minuto volvió la luz y Harry gritó al ver a Niall manchado de pintura roja, simulando sangre. Niall gritó a su vez cuando vio sus manos manchadas.
Sin pensarlo, corrieron escaleras abajo y fueron directamente hacia sus habitaciones. Tras discutirlo después de una necesaria ducha, Harry y Niall llegaron a la conclusión de que algo extraño sucedía en aquel lugar.
- ¿ Qué crees que sea lo que ocurre Niall ? Tengo bastante miedo y ahora dudo de que vaya a pasar algo bueno en estos días - Dijo Harry con cara de preocupación.
- La verdad esque no tengo ni la remota idea. Es algo que nunca había visto en todo este tiempo aquí. Por lo que hemos visto, el caos indica que algo más grande va a pasar.
- Tengo miedo Niall, justo esto ocurre después de que no me dejen ver a Louis.
- Puede ser un motivo para que ocurra esto, aunque ahora que lo pienso, es raro que no te lo dijeran en persona sino que te comunicaran el mensaje en un trozo roto de papel.
- Sí, eso es lo que me sorprende más, no entiendo porqué ni siquiera me mandaron un mensajero. Normalmente suelen llamarme a su despacho o me llaman en recepción.
- Déjame la nota, tal vez encontremos algo más. - Dijo Niall levantándose y haciendo un gesto con la mano.
- Estaba en mi mesita de noche, déjame que lo busco - Dijo Harry acomodando su bata de satén brillante color malva.
A los pocos segundos volvió con dos objetos en su mano:
- Qué raro, yo no había dejado esta rosa blanca en mi mesita de noche; debió de dejarla alguien cuando nos hemos ido antes.
Niall agarró el papel y palideció cuando leyó lo que había escrito en la parte posterior del mensaje de sus superiores:
" El caos antes de la tormenta ".
Ya estoy aquí. Estoy triste, pero a la vez emocionada, porque no queda nada para el final.
He escrito sobre el color del lila y el verde pastel porque la escritora tiene una leve obsesión últimamente con esos colores.
De últimas noticias, Harry ha sacado su marca de maquillaje llamada " Pleasing ".
Con mucho sueño y hambre,
Bayofstars ♡.
ESTÁS LEYENDO
Lo que esconden tus ojos
أدب الهواة- Muy bien, señor Tomlinson...¿Alguna preferencia; champagne o algo que desee? - Sí, tengo una condición: yo llevaré los ojos vendados y el chico que entre a la habitación puede llevarlos vendados o no, como él prefiera. 🍒 Idea original mía; NO A...