little heart

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Harry Potter miraba curioso a los niños nuevos, formados en una línea esperando pasar al frente, listos y ansiosos por que el sombrero los asignará a sus casas, algunos de los niños se marchaban a sus respectivos lugares con sonrisas emocionadas, y otros con miradas conmocionadas por la sorpresa de la casa a la cual eran asignados, por su parte Harry pudo ver por el rabillo del ojo un destello banco que llamó su atención.

Volteando curioso se encontró con un chico rubio, cabello casi blanco que destellava a un en la cálida luz que iluminaba el salón, sus mejillas pálidas tenían un rubor muy ligero y sus ojos se movían curiosos, debía tener amenos 15 años, pero era nuevo en el colegio, nunca antes lo había visto, lo recordaría de ser de esa manera.

Así pasaron unos niños más hasta su turno, de nombre Draco Malfoy al parecer de una muy buena familia, había tenido que ser transferido de colegio, tenía 15 años e iría Slytherin, también era un omega bonito, pensó de manera fugas.

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La tarde es fría y los pasillos estan casi desiertos, la nieve cae de manera lenta pintando el paisaje de un blanco puro y Harry que se encuentra oculto en un rincón, deja suaves besos en el cuello de una hermosa pelirroja que se estremeceante el tacto de los labios cálidos, ella se aferra a su cuerpo queriendo permanecer de esa manera todo el tiempo que sea posible, su lugar preferido es entre los brazos de ese alfa de ojos verdes que la sostiene como si fuese algo valioso que tiene que cuidar.

Ambos chicos están perdidos en su propio mundo, sonrisas compartidas y miradas coquetas.

Por otro lado a la distancia,unos ojos de color azul grisáceo similares al hielo contemplan la acción, muerde ansioso su labio inferior y sus manos juegan entre ellas, no tiene mucho que llego al colegio de Hogwarts y supo a primera vista que Harry Potter tenía algo especial, olía como casa, se sentía de esa manera cada ocasión que pasaba por su lado.

Draco sabe que es hermoso, se lo dicen todos sus nuevos compañeros de manera constante, tiene la piel blanca impecable, no como la pelirroja a quien las pecas le salpican las mejillas y el rostro, sus ojos de color hielo no tienen comparación, su cuerpo es esbelto y bien formado, sus piernas aún cubiertas se pueden apreciar de buena manera es un omega lindo, piensa el,y entonces, ¿porque Harry la eligió a ella?, ¿que era aquello que la hacia especial?, ¿acaso Harry estaba enamorado en realidad?

Molestó con la visión frente a sus ojos aprieta sus manos y da la media vuelta alejándose con lágrimas picando en sus ojos, Harry probablemente ni siquiera lo ah notado, no sabe quien es y no puede estar molesto porque el alfa no lo ah notado como todos los otros chicos y chicas del colegio.

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Suspirando rendido camino por los pasillos, estaba solo, últimamente siempre era de esa manera, cuando llego a su sala común su molestia había disminuido siendo remplasada por la tristeza, quería tantas cosas que no podría tener, sus nuevos amigos lo miraban curiosos y el no sabía como explicar que apenas unos meses atrás después de su llegada había sentido algo especial cuando pasó por su lado de Harry.

***
En la comodidad de su cuarto y completamente solo se tiro sobre la cama y se acurrucó en medio de ella, pensando en todo momento que tendría que hacer para que Harry se acercará a él, que le diera una oportunidad si el alfa se fijará en el, las cosas podrían cambiar.

Mientras pensaba se quedó dormido, acurrucado pensando en unos ojos verdes que por primera vez lo miraban con ternura con interés.

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A Harry le gusta pasar sus ratos libres con cierta pelirroja que no le exige más de lo que el le da, ella es una beta y el es un alfa, es casi imposibles que esa relación dure por mucho tiempo, los betas no tenían la capacidad de calmar el celo de los alfas, no amenos que estuvieran destinados y Harry aún cuando le tenía mucho aprecio a la chica, sabía que ella no era la mujer de su vida, no importaba que tanto le gustará a la pelirroja pensar de esa manera.

Ginny tiene un aroma a frambuesas y canela, es dulce pero no es su aroma natural, ese rico olor solo lo tiene después de tomar una poción que le causa malestares después.

A ella no le importa que tan mal se sienta después de tomar esa poción porque a Harry le gusta el olor y cuando tienen sexo a ella le encanta la idea de quedar embarazada y poder ser la esposa de esta magnífico hombre, la idea de poder formar un lazo con el es demaciado encantadora como para que un malestar le impida lograr eso que ella quiere.
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-Harr-y. - sale entre suspiros de su boca la voz pequeña y casi inaudible, el pelinegro la tiene contra la cama sus piernas desnudas se mueven al ritmo de las embestidas, y sus manos se aferran a la fornida espalda, sus uñas dejan una marca en la suave piel.

Con un fuerte suspiro Harry sale de ella, retira el condon que ella insiste en que no use y lo desecha, se aleja de ella como si su cuerpo quemara y cada vez ella lo siente peor.

***

Me aseguro de que el pasillo esté vacío antes de salir del cuarto de las chicas, Ginny parece molesta mientras sus labios rojos hacen pucheros.

- tengo que regresar a mi recamara, si alguno de los prefectos me descubre aquí seré hombre muerto, esta prohibido que los alfas estén en el ala de los omegas y lo sabes- murmuró, y ella simplemente hace un puchero y no puedo evitar sonreír, es tan infantil.

- vamos Harry, quédate un poco más, yo soy una beta, no te dirán nada- si tono de voz es bajo, sin embargo puedo ver que dos omegas se asoman de sus recamaras, y solo puedo negar

- duermes en el ala de los omegas, Ginny te veré otro día- después de eso solo la dejo de pie en la puerta, ella parece molesta y sin embargo sonríe al final de todo.

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Harry camina con prisa y de momento se detiene de golpe, pareciera que lo petrifican, pero no es así, no del todo.

Mueve su cabeza buscando, es ligero y casi se a ido por completo pero lo puede sentir, es un aroma a manzanas verdes, ácido y dulce al mismo tiempo, no logra entender porque lo siente hasta ahora, pero de alguna manera lo sabe "mi omega" murmura y el pequeño rastro se pierde, resignado sigue con su camino pensando en que el dueño de ese maravilloso aroma a manzanas está cerca.

Piensa entonces de manera fugas, que probablemente tendrá que dejar a la pelirroja, no quiere encontrar a su destinado y que este piense que ella es más importante, claro es una gran amiga, es la hermanita de su mejor amigo y ella es francamente genial, pero si su Omega está en algun lugar cerca de él, simplemente no puede seguir como hasta ahora.

Cuando llega a su habitación puede ver a Ron y Neville dormidos, y se alegra porque no tendrá que explicar donde estaba, o con quien.

Se desnuda rápidamente y pone un pijama abrigado y mientras cae en un profundo sueño no puede evitar que una mirada de ojitos color hielo aparezca aún. Cuando no entiende porque.