little heart

5

Harry acaba de descubrir  que le gusta mucho pasar todo el tiempo que puede con un bonito omega rubio, Draco es dulce incluso cuando no quiere serlo, es tierno y Harry se siente completo cuando está con el, constantemente se le queda mirando fijamente y es inevitable que una sonrisa aparezca en sus labios.

Harry también se ah dado cuenta de que realmente odia cuando otros alfas se acercan mucho al rubio, no le gusta que lo miren por mucho tiempo de la misma manera que no le gusta cuando intentan tocarlo, aún no es capaz de sentir las feromonas que salían del omega y se llena de molestia al comprender que es al único que le pasa.

La envidia es un sentimiento fuerte que puede hacer que quien la sienta no pueda controlar ni siquiera las acciones más básicas,  Harry nunca había experimentado ese sentimiento, no con la magnitud con la que lo hace ahora.

Claro que en su momento Harry envidiaba a sus amigos que habían encontrado a sus parejas,  sentía solo un poco que el también merecía lo que ellos tenían, pero siempre se consolaba con la idea de que cuando su Omega llegara sería el momento indicado y no le molestaba esperar un poco más.

Justo ahora Harry experimentaba lo que era la envidia en su máxima expresión,  le irritaba no sentir las feromonas del omega frente a él, no poder sentir por completo al pequeño rubio era algo que le molestaba y mucho.

Pero se compensa bien la falta de su sentido del olfato  mientras pueda sostener al pequeño rubio entre sus brazos, mientras que sus sonrisas sean solo dirigidas a él, Harry comienza a adorar los momentos en los que simplemente están ellos dos, le gusta como ninguna otra cosa en el mundo.

Es por eso que no duda en aprovechar cada momento que pude tener al rubio con el, cosa que sucede muy seguido.

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Resulta algo nuevo para todos aquellos que conocen a Harry verlo con el omega y no con Ginny,  después de la intoxicación que sufrió la pelirroja pasó dos semanas en cama sin poder hacer nada, todo ese tiempo Harry apenas la visitaba y en las ocasiones que lo hacía el tiempo era limitado, Harry siempre parecía tener prisa por llegar a algún lugar y sus ojos parecian constantemente perdidos,  como recordando algo importante, Ginny se sentía cada vez un poco más molesta cosa que el ojiverde parecía ignorar.

Pero algo sucedió al final de la segunda semana, Harry estaba en la sala común junto a Draco, ambos estaban abrazados pasando la tarde, Harry se encontraba sus manos por el cabello rubio, mientras hablaban de cosas sin importancia, las sonrisas que Draco le regalaba a Harry lo llenaban de una sensación de orgullo, como si hacer que el omega sonriera fuera un logro, Harry lo sentía de esa manera.

Draco miro a Harry, sus ojos encontrandoce y la tensión que seguía aumentando entre ellos era casi palpable, mientras que Draco se sentía satisfecho de estar en el lugar donde estaba, justo entre los brazos de Harry, de ese alfa que se sentía como suyo, le gustaba la manera en la que Harry lo sostenía y como parecía no poder evitar los gruñidos o las malas miradas cuando cualquier persona intentaba  aproximarse a él, pero a pesar de todo, seguía estando confundido, Se suponía que cuando encontrara a su alfa este comenzaría a forjar el lazo de unión, pero Harry no lo estaba haciendo, incluso podría sospechar que parecía no estarlo sintiendo.
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"Harry", miro en dirección en la que escucho la pequeña voz que eh comenzado a adorar, Draco se está mordiendo el labio y sus ojos se mueven por el lugar, parece incapaz de mirarme a los ojos y no puedo pensar que exista alguien más tierno que el.

"¿qué sucede bebé ?" Cuestiono y sonrió cuando puedo ver sus mejillas colorearse de un lindo tono rosado, abre un poco sus labios, como preparandoce para decirme algo y no puedo despegar mis ojos de él, se siente tan correcto la manera en la que el encaja entre mis brazos.