[°•°Final°•°]

734 31 3
                                    

—¿de qué hablas?

—pues eso, quiero pedírselo.— le respondí segura.

—creo que estas tomando una decisión muy precipitada— se  apuró a decir Dandara— tan solo llevan unos meses.

—pero es lo que quiero, quiero empezar todo con él y terminarlo juntos.

—no puedes irte... No puedes dejarnos— volvió a intentar Vayu con los ojos cristalizados.

—quiero hacer mi vida, pero tampoco quiero dejarlas.

Por mucho tiempo lo he estado pensando, llevo días, incluso semanas, pensando en lo que estoy haciendo ahora, hablarlo con mis hermanas solo es el el inicio de lo que pienso hacer.

—¡quiero vivir con Hiwa!

—¡pero no queremos que te vayas!

—¡¿entonces qué hago, traerlo aquí o qué carajo?!

—¡si eso te hace quedarte aquí entonces hazlo, traelo!

—¡no puedo vivir todo el tiempo con ustedes, en algún momento tengo que irme y es ahora!

—¡pero siempre hemos sido nosotras tres contra todo, contra nuestros padres, contra la maldita sociedad, con todo!

—¡bien, lo traeré! Pero no voy a quedarme aquí mucho tiempo.

Me encerré en mi cuarto soltando un portazo para dar el mensaje de que estaba que me llevaba el diablo.

Estaba molesta, ellas tenían que entender que no iba a estar con ellas todo el tiempo, saben perfectamente que quería cumplir mi sueño.

Estaba molesta, pero no pude evitar sentirme mal por pelear con ellas, e inevitablemente mis ojos picaron y me sentí culpable, se supone que no estoy haciendo nada malo, quiero vivir con mi novio, no tiene nada de malo, pero la culpa no se va.

No sabía ni que hacer por lo que cuando me di cuenta ya estaba marcando al número de Hiwa y casi al instante me había contestado, cuando hablé y no recibí respuesta me sentí más idiota de lo normal.

Maldita estúpida, Hiwa es mudo ¿como chingados te va a contestar?, colgué al instante que lo recordé y le mandé un mensaje.

«Ey, cariño»

«sucedió algo amor?»

«tuve una discusión con mis hermanas»

«quieres vernos?»

«si, necesito verte»

Cerré el chat y me levanté del suelo en donde estaba sentada y salí de mi habitación sin ver a nadie, cuando salí del departamento pude respirar mejor y sin toda esa tensión.

Caminé con la cabeza abajo mientras seguía sintiendo la culpa en mi corazón. Llegué a un parque y cuando me senté recordé que ni siquiera le dije donde nos veríamos.

—carajo Megan, eres una idiota.

—ya lo creo, eres demasiado estúpida, sin mencionar que eres lenta.

La voz conocida me hizo girar la cabeza hasta toparme con esa cara  burlona.

—Henry, no esperaba verte aquí— dije con una sonrisa pero estaba segura que estaba claro que algo malo había pasado.

—¿nos podemos sentar?— apuntó la banca.

—¿nos?— pregunté extrañada.

—mi hermano y yo— y al mirar por su hombro vi a un chico igual que él, con su cabellera rojiza, solo que se veía mas joven y sus pómulos estaban llenos de pecas.

Silencioso Amor [libro #1]✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora