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DESPUES DE HABER ECHA PUBLICA SU RELACIÓN CON LOS MIEMBROS DEL EQUIPO–en el cual Tony no tardo en decirle a Natasha asaltacunas y Clint diciendo que ya lo sabía–, se prepararon para la fiesta de Halloween que el anterior mencionado esta preparando en su torre, afortunadamente la daría solo para los miembros del equipo, ya que tienen a dos menores de edad en dicho grupo y dio aviso sobre la hora en que tienen que estar presentes, también le dijo a Clint que podía traer a su esposa e hijos, claro, si ellos están de acuerdo en venir.
Alaska entro a su habitación y sus ojos se fijaron en una foto en específico, con pasos lentos fue acercándose al mueble y tomo entre sus manos la foto enmarcada, mirándola una vez más el rostro de su hermano, Pietro, sonriendo con melancolía, incluso aun mirando la imagen podía escuchar su voz llamándola ya fuese a Wanda o a ella, o incluso bromeando. La foto que tiene en sus manos Steve se la había dado después del funeral que le hicieron a su hermano mayor una vez las cosas se calmaron y les dejaron hospedarse en la torre Stark, dándoles tiempo para que se acostumbraran a toda la tecnología que abarca la residencia y espacio para que afrontaran la perdida del único familiar que les quedaba.
Steve pudo ver a la lejanía que tanto Wanda como Alaska a pesar que salían cada día de sus habitaciones para conocer lo que será su nuevo hogar, en sus rostros pudo ver la notable tristeza que las inundaba cada día junto con la incomodidad. Y podía entender porque ambas están incomodas, están viviendo en el hogar de la persona que creo las bombas que les arrebato tanto su hogar como a sus familiares y no solo eso, si no la persona que creo a Ultron y les arrebato a su hermano mayor, no era fácil para ellas acomodarse y fingir que todo está perdonado para el Strak, sabe que las menores aun le guardan un–gran–resentimiento.
Así que poco a poco fue acercándose y tratando de ganarse la confianza de ambas Maximoff para poder apoyarlas y aconsejarlas en lo que podía con su experiencia de vida, convirtiéndose en una especia de figura paterna para ambas menores.
Dejo la fotografía en el mueble y se fijó en el reloj digital que descansa a un lado del marco de madera, señalando la hora, frunció un poco el ceño y su mente empezó a trabajar sobre que disfraz iba a ponerse, porque si, Tony dijo que hará la fiesta privada pero tienen que ir con disfraces, ya fueran en pareja; amorosa o con amigos, si o si, no aceptaba no por respuestas, y para Alaska fue divertido ver la expresión de Thor, toda confundida y preguntando sobre que era la fiesta de disfraces.
Salió de sus pensamientos cuando la puerta de su habitación fue golpeada, girando sobre sus talones se acercó a la puerta y tomo el pomo, girándolo, dejando ver a su hermana.
—Wanda. —Sonrió, al verla—. Pasa.
—Gracias. —Respondió, una vez su hermana se retrocedió y cerró la puerta detrás de si—. ¿Ya decidiste que ponerte?
—No, aun nada. —Dijo, sentándose en la orilla de la cama y dando ligeros golpecitos a su lado, invitando a Wanda a sentarse—. ¿Tu?
