Nuevamente

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Los ojos azules se abrieron lentamente.

El rubio levantó su espalda apoyando una de sus manos y llevó la otra mano a su cabeza. Le dolía y no recordaba nada de lo que había ocurrido.

Solo vió una habitación iluminada por la luz del sol y a su querida Abbey dormida en una silla cercana a él.
Sonrió al verla así y de pronto le llegaron varios recuerdos que prefirió no haber recordado.

Cada vez detestaba mas a Mick así que lo único que se le había ocurrido en esos momentos era pegarle.

También se sintió un poco estúpido por no haber respondido cuando se cayó al agua. ¿Qué más ocurrió para que se desmayara?. Pero sus pensamientos se esfumaron al ver que la rubia se movía y que comenzaba a abrir los ojos.

De pronto, la mirada de ambos se conectaron y se pudo ver como estas se iluminaron cuando la rubia fué consciente de a quién estaba mirando.

En el rostro de Abbey se dibujó una sonrisa, de alivio y felicidad.

Pero después, a esta se le cambió la expresión por completo y dirigió rápidamente su mano a la cara de su amigo.

-¡Auch!, Ya se que me lo merecía, pero me duele la cabeza- exclamó Brian mientras posaba su mano en el sitio del golpe reciente.

-¡Me asustaste mucho! - reprochó la rubia.

-Al menos sigo aquí- sonrió Brian.

-Pero llevas dos días inconsciente-

Brian se quedó en silencio, pero después cambió de tema.

-Por cierto, ¿Se puede saber porqué estoy en tu habitación? Es un poco extraño que esté en tu cama..- bromeó este, y como respuesta, Abbey le pegó ligeramente en el brazo y puso una expresión de desagrado, a lo que ambos rieron juntos, como siempre.

-Podrias ser mas agradecido- miró indignada cruzando los brazos.

-Lo siento, soy un imbécil, deberías de haberme dejado ahí- se victimizó en broma el mas mayor.

-No, porque eres mi imbécil favorito.
Y además, ¡Claro que te hubiera salvado!. No me lo perdonaría nunca si... te hubieras ido- Brian sonrió y sin pensarlo, abrazó a su amiga. Esta sonrió y correspondió el abrazo.

-Eres la mejor, Abbey- dijo Brian mirando a su amiga.

-Tú también- respondió esta y ambos sonrieron.

Minutos después, Abbey le prestó ropa limpia a Brian, el cuál lo aceptó además de que tenían el mismo gusto de ropa, así que no se diferenciaba mucho.

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-¡¿Que casi mueres?!- dijo Harrison, y Jim escupió su bebida al escuchar lo que el moreno repitió.

Brian había invitado a George y a Jim para hablar, y ya de paso les contó lo que le había pasado.

-Más o menos, sí. Fué por una pelea con Mick- explicó el rubio.

-Cuenta, cuenta- dijo George.

-Si se lo cuentas, que no te sorprenda que al día siguiente todo el mundo se haya enterado- avisó Jim mientras dejaba su bebida en la mesa, y
Harrison rodó los ojos ante su respuesta.

-Me caí en la piscina y casi me ahogo. Por suerte, Abbey pidió ayuda y ahora sigo vivo- resumió Brian.

-¿Pero no sabías nadar?- preguntó George confundido

-Sí, pero no sé porqué no reaccioné. Pero al menos Abbey me ayudó-

-Habla mucho de Abbey, ¿No?- le susurró Jim a George, y este asintió. Brian les escuchó y rodó los ojos.

-¿Algún problema con eso?-

-¿Qué? No no, pero eso raro que metas a esa chica en cualquier frase- explicó Harrison.

-¿Acaso te gusta?- bromeó Jim.

Brian abrió mucho los ojos pero simplemente negó.

-¿Porqué debería gustarme?-

George y Jim le miraron con una mirada obvia, a lo que Jones suspiró pesadamente.

-Bien, quizás un poco. Pero no estoy muy seguro. Además, ¿Y si se lo digo y me deja tirado?-

-No creo que lo haga, vuestra amistad es muy fuerte como para que se vaya a la mierda solo por eso- respondió George mientras le daba otro sorbo tranquilamente a su bebida.

Brian se quedó pensando, su amigo tenía razón.

Igualmente, dejó ese tema de lado y continuó hablando de otras cosas con George y Jim.

Ya pensaría en eso en otro momento.

•𝙽𝚘 𝙴𝚡𝚙𝚎𝚌𝚝𝚊𝚝𝚒𝚘𝚗𝚜• [𝐁𝐫𝐢𝐚𝐧 𝐉𝐨𝐧𝐞𝐬]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora