Maid Of Evil (Fred X Usagi)

5. Pecado original: El segundo Proyecto "M"

Viejo Calendario 015.

El País Morado, aquel en la cima del mundo. En su Ciudad Capital se podían ver a las personas caminando tranquilamente, sin percatarse de una pequeña de seis años oculta en un callejón. Traía una bata blanca y una expresión de miedo en su inocente rostro.

"Ahora es tu turno"

Alguien le dijo esas palabras y desde entonces vaga sola por las calles.

«¿Quién será mi padre, y también mi madre? Sólo sé que nací completamente sola...» Pensaba la niña mirando a todas las personas caminar frente a ella.

Estaba sola, totalmente sola. Sin una sola pizca de amor.

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Viejo Calendario 001

Ella corría por las calles. Todo ahí era un caos. Aquella niña en el callejón creció con un gran potencial magico, una poderosa bruja de la Organización criminal: Ghost. Con sólo veinte años se enamoró de aquel hombre, el líder de Ghost, nombre clave: Primero; Apocalipsis. Aquel castaño corría con ella mientras el caos reinaba.

"Corriendo por ese sendero que está manchado por el mal, lleno de la sangre de las víctimas. Huyendo, junto a este gran amor que sabe que es corrupto"

Entre el caos y los gritos, la pareja se separó. El líder que llevaba una máscara se perdió entre la multitud, ella seguía peleando y mantado a las personas a su paso. Entonces, miró a una mujer en un charco de sangre.

-¡No veo a mis hijos! ¡No puedo encontrarlos! —Sollozaba aquella peliverde cubriendo su rostro.

Distraída por aquella pobre mujer, la castaña fue sometida por un guardia.

-¡Agh! —Se quejó ella al ser sujetada por el guardia.

-Te atrape, bruja —La esposo para poder llevársela, pero ella se resistía.

-¡Taht! —Escuchó un grito a unos pasos.

Al mirar, un pelimorado se acercaba corriendo, llegándose hasta la peliverde, quién lo abrazó de inmediato. En eso, él la miró mientras intentaba soltarse del guardia.

-Camina, malvada bruja —El guardia la jalo del brazo para llevársela .

Ambos caminaban hasta una carroza para ir a la prisión. Cuando estaba por entrar logró ver a ese hombre, aquel que era su pareja.

-¡Por favor, ayúdame! —Exclamó forcejeando con el guardia.

Él sólo la miró unos segundos y se fue.

-¡No, espera! -.

-No te preocupes, bruja, él pronto te acompañará en prisión. Ahora, entra —La agarró del cuello y la hizo entrar a la carroza.

Ella sólo se sentó y miró por la ventana como aquel amor suyo sólo se alejaba cada vez más.

Su único amor...