“Hola he pensado mucho sobre esto y me gustaría verte en persona, y no sé a lo mejor tener una cita”---Noooo!!!! Qué hiciste Hyung!! Por qué hiciste eso??--- Le grito como loco a Tae Min mientras este ríe y huye de mí por toda la habitación.
---Solo te di un pequeño empujón, deberías agradecer--- dice entre risas
---Pequeño empujón?? AAAAHHHH Te odio por esto, me las vas a pagar vas a ver---
---Lo siento pero me tenías harto, Jennie esto, Jennie lo otro, Jennie, Jennie, Jennie… no aguantaba más, además cual será la sorpresa si llevan días chateando, ya era hora que tomaras la iniciativa---
---Exactamente!! YO!! No tú---
---Ella no lo sabe---Miro la pantalla del teléfono para comprobar de nuevo lo que este idiota escribió… “Hola he pensado mucho sobre esto y me gustaría verte en persona, y no sé a lo mejor tener una cita” Dios es que no me lo creo. Espera… lo leyó
---LO LEYÓ!!!--- Le grito a Tae Min. Los nervios recorren mi cuerpo y las manos comienzan a sudarme ---Espera… Está escribiendo!!---
---En serio?? Deja ver, aparta la mano que no veo--- me dice mi amigo que cruzó la habitación a zancadas para ver la respuesta de Jennie ---Si es tan rápida es que te va a rechazar rotundamente o que estaba esperando que tú tomaras iniciativa---
---Espero que sea la segunda opción, si me rechaza y no puedo escribirle más vas a morir esta noche---“Sí, me gustaría mucho”
Y así empezó todo.
Mientras más tiempo pasaba con ella más cosas nuevas descubría, la chica de mirada fría que salía en las revistas y sus feroces actuaciones en el escenarios no tenía mucho que ver con la verdadera Jennie, excepto cuando se enojaba por algo, en ese momento sí daba miedo. Pero en general ella era demasiado tierna y algo tímida, y tenía una de las sonrisas más lindas que he visto en mi vida, por eso siempre intentaba hacerla reír.
A veces cuando salíamos se quedaba pensativa y se perdía en su propio mundo. En nuestras primeras citas tenía la costumbre de hacer rodar en su dedo un anillo, era evidente que no era de ella ya que la talla no concordaba con sus delicados dedos, una vez le pregunté por qué siempre lo llevaba… ella solo lo guardó en su bolso y con una sonrisa dijo que no era nada importante, luego de eso no volví a verlo.
Cada vez que la besaba era como si el mundo a mi alrededor se detuviera, adoraba acariciar sus suaves y abultadas mejillas. Cuando salía conmigo rara vez llevaba maquillaje o accesorios excesivos pero aun así era la chica más linda que mis ojos veían, en cambio yo siempre intentaba verme mejor para llamar su atención.
Sus amigos… a las chicas nunca las pude conocer en persona, era bastante difícil encontrarme solo con Jennie, sería casi imposible un encuentro con las demás, pero una vez hablé unos minutos con Jisoo mediante el teléfono de Jennie, me pareció muy graciosa y amigable.
A quien conocí en persona fue a Mino, debo decir que hasta el día de hoy no es alguien de mi agrado, nos cruzamos en un show mientras hacíamos promociones, él parecía demasiado cercano a Jennie y eso me molestaba mucho, él lo notaba y se divertía con eso, siempre con una sonrisa como si ocultara algo, en ese tiempo pensé que ellos habían tenido una historia, estuve sospechando de él hasta el final.
Las cosas se empezaron a tornar más serias en nuestro viaje a París. Desde que supe que nuestras agendas iban a coincidir no perdí tiempo y preparé todo. Todo estaba planeado perfectamente en mi cabeza para que esa fuera nuestra noche. La cena romántica bajo la Torre Eiffel y luego, si ella aceptaba, la culminación de la noche en el hotel, incluso preparé una playlist en mi teléfono para ese momento… mi mayor error.
Esa noche pasaron varias cosas que no tuvieron sentido para mí en aquel momento. Entramos a la habitación y la envolví en mis brazos mientras la besaba, podía sentir el deseo de ella y su respiración agitada, mis manos recorrieron su cuerpo y me deshice de su vestido, quité mi camisa y ella acariciaba mi abdomen, todo iba perfecto hasta que esa canción empezó a sonar, ella me llamó “oppa” era la primera vez y me sentí feliz, luego se apartó de mí y dejó la habitación. Resulta que no era a mi quien llamaba así.
Luego de que la prensa publicara sobre nuestra relación ella me llamó desesperada, quería mantener el secreto a toda costa, quería que yo mintiera, yo solo quería que pudiéramos tener una relación normal, y mentir a medio mudo no era la vía para eso, en ese momento tome la decisión de no escucharla, fui egoísta, pensé que eso era lo mejor para los dos, que ella podía estar molesta un tiempo pero que eventualmente me perdonaría y podríamos estar juntos sin tantos problema, pero ese fue mi mayor error, pensar por ella, porque hasta el final nunca supe lo que pasaba por su mente.
La última vez que nos vimos ella terminó conmigo. Estaba muy molesta por no haberla escuchado, hasta ese momento de la discusión pensé que luego se le pasaría hasta que dijo Oppa nunca haría una cosa así… en ese momento me di cuenta que ese Oppa a quien se refería era otra persona, no era yo, los celos me invadieron y mientras la sacudía por los hombros exigía que me dijera quién era ese hombre, más bien esperaba que me confirmara que era el idiota de Mino, pero el idiota fui yo al pensar que era él.
Solo hasta el día de hoy leyendo esta página desagradable en internet sé a quién se refería, quién estaba detrás de sus miradas tristes que yo como tonto me esforzaba por borrar, quién era el dueño de aquel anillo que nunca volví a ver, y de quién era la canción que sonó aquella noche en París, esta batalla siempre estuvo perdida para mí.
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Mi ídolo, Mi Musa | Jendragon
FanfictionKim Jennie & Kwon Ji Yong Una joven aprendiz de idol conoce al que sería el gran amor de su vida. En el camino por alcanzar su sueño su vida se ve ligada a la de una estrella ya consolidada, él su mentor y ella su musa... "Lo que sientes por mí y lo...