Capítulo || II

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Miraba por la ventana abierta de aquel auto gris, sentía como la brisa chocaba contra su rostro produciéndole una ansiada calma en medio de su desesperado intento de recordar que había soñado, sobre todo la razón del porqué se había despertado tan alterado y bañado en sudor frío.

...

Habían pasado ya dos días desde que había despertado y tuvo que quedarse en casa sin hacer nada por cuestiones de reposo y nada de alteraciones. Recomendaciones que le había dado el médico.

Ese día después de terminar su desayuno si habían salido a dar una pequeña vuelta, ni tan pequeña, dado que la curiosidad de Taehyun los llevó a caminar más lejos de lo planeado. Probablemente 'curiosidad' no sería la palabra correcta para describir aquella sensación que tuvo su cuerpo de querer ir más allá del vecindario. Su cuerpo se movía solo como si supiera exactamente a donde quería ir, era demasiado extraño.

Pero esos dos días no las pasó en calma, al regresar de su paseo Taehyun tuvo una repentina fiebre acompañada de un insoportable dolor de cabeza que lo dejó en cama un día entero y con ligeras secuelas al segundo día. Su hermana se había sentido culpable por no cuidarlo de mejor manera y aunque el médico, que tuvo que ir porque el menor no pensaba pisar de nuevo el hospital, explicó que era normal que ocurriera y que solo necesitaba reposo, Sakura seguía sintiéndose culpable y de nuevo no se despegó de su hermano en ningún momento. En un pasado no hubiera estado tan insoportable con ese tema, pero luego de casi perderlo y haberlo visto dormir por días sin abrir los ojos le habían quedado secuelas.

A pesar de que el mismo entendía su estado, lo que más parecía odiar era estar encerrado, en reposo y sin hacer absolutamente nada, sobre todo porque su cabeza se daba el lujo de formar extraños escenarios de borrosos recuerdos que lo conducían a desconfiar de todos, le cuestionaba cosas, ponían en duda muchas acciones, e incluso le hacía pensar que tal vez seguía sin despertar y sus sueños en media madrugada era la realidad. Sobre pensaba demasiado.

Es así que sabía que necesitaba salir y despejarse de todo, por lo que luego de tanta insistencia y apoyo de sus padres, su hermana, que parecía tener el mayor voto, le permitió salir de casa con la excusa de que solo sería por un rato y que sus amigos lo estarían cuidando.

....


Todo estaba en silencio, ninguno de los presentes hablaba y aunque la radio permanecía encendida su volumen era tan bajo que no llegaba a molestar. Soobin, su amigo, se había quedado dormido hace varios minutos atrás apoyado sobre su brazo derecho y Arin, hermana melliza de su amigo, estaba demasiado concentrada mirando la carretera como para iniciar una conversación, eso o ella estaba igual de ida en sus pensamientos.

Estar en silencio no le molestaba, era mejor que tener que seguir el hilo de alguna conversación, pero justo ahora el silencio le estaba taladrando la cabeza.

Se removió en el asiento y movió el cinturón de seguridad por todas las direcciones posibles en un intento de que no roce con su cuello, terminó por colocarlo entre el final de su hombro. Suspiro cansado mirando de nuevo hacia la ventana notando que el panorama había cambiado.

—Ya llegamos — habló Arin en voz baja mirando en dirección de Taehyun, el cual solo asintió y desabrochó el cinturón rápidamente, sintiendo la libertad de ya no tenerlo.

Ni siquiera había notado que el auto ya estaba estacionado o que el silencio había sido sustituido por varias voces provenientes de fuera, había estaba demasiado concentrado en sus pensamientos que ni siquiera lo notó.

・゚Memorias vacías ・゚ೋ 「𝒯𝐻&𝒴𝒥」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora