･ﾟMemorias vacías ･ﾟೋ 「𝒯𝐻&𝒴𝒥」

Capítulo || IV

◈◈◈

Encerrarse en su habitación por días no era opción, pese a que su cuerpo le suplicaba no salir más y estar solo recostado. Sentía su energía drenada, pero si no salía su cabeza se llenaría de más pensamientos y ero lo que menos quería.

Se despertó muy temprano esa mañana, en realidad no había dormido nada, bajó hasta la cocina donde solo estaban sus padres desayunando ya que su hermana no había pasado la noche ahí, y les pidió disculpas por comportarse de esa manera, aislándose de todos, claramente ambos le hicieron saber que entendían la situación y por ello no tenía que disculparse, brindándole el más cálido de los abrazos al cual correspondió con efusividad. También descubriendo que le agradaba los abrazos. Para ambos lados la situación era difícil de manejar, pero si Taehyun no colaboraba solo iba a seguir haciendo un hueco en su habitación o al menos así pensaba. Por lo que en lo que se comía la cabeza decidió que retomar sus estudios desde ese mismo día era la mejor opción, aunque sus padres lo frenaron, primero debían informar que regresaría a la Universidad y entregar un montón de papeles informando el porqué de sus faltas, tal vez el día siguiente si podría regresar.

Con la decisión tomada se liberaba de otro peso que llevaba. Le había estado molestando hace tiempo el no ir a clases, se sentía irresponsable y sentía que se iba a olvidar del tour que le hicieron. Aunque tal vez y solo tal vez era otra de sus escusas.

°❉°

El día que podía regresas a sus actividades académicas había llegado.

Sus padres debían trabajar y su hermana había salido muy apresurada de casa luego de recibir una llamada de su jefe en donde decía requerirla con urgencia y sin importar las mil escusas que había puesto para no ir, la querían ahí sin importar que. Al final tuvo que ceder y salió sin antes dejarle una lista de cosas que podía hacer en caso de que se pierda en medio del campus, tuviera algún dolor o cualquier inconveniente, a la vez que ponía su número como el primero en urgencias, también había llenado la maleta de su hermano de pastillas para los mareos y el dolor de cabeza, agua, galletas y además de varias copias de sus documentos de identificación. A ella le seguía pareciendo muy apresurada la idea de ir a clases o siquiera de salir de casa, pero tampoco podía guardarlo en su cajita de cristal para siempre. Aun así, seguía siendo difícil.

Como nadie de su familia podía llevarlo, su única misión era llamar a Soobin o Beomgyu para que lo ayuden a llegar a la universidad, sin embargo, sentía que estaba siendo demasiada carga por lo que no quería molestar a sus amigos prefiriendo no llamar. Además, estaba muy seguro que recordaba cómo llegar ahí y caso contrario el GPS de su celular lo ayudaría a llegar.

Grave error.

Debió hacer caso a su hermana o en todo caso tomar un taxi, más su insistente instinto de aventura lo condujo a perderse. Tal vez no estaba tan perdido, pero sin duda ese no era el camino a la Universidad. Una vez más su cuerpo lo había conducido a seguir su presentimiento.

Estaba parado junto al semáforo, luciendo como un turista perdido mientras miraba a todos lados leyendo el nombre de las calles una y otra vez, algo estaba mal. Por más extraña que se mostraba la situación sentía, no, conocía el sector donde había terminado luego de bajar del autobús, recordaba el nombre de las calles e incluso podría cubrirse los ojos y adivinar que tiendas había a cada lado y eso fue exactamente lo que hizo.