-¿Amity, no te das cuenta? Me gustas, no se que hacer sin ti, estas en mis pensamientos día y noche, vaya a donde vaya busco tu mirada, eres la dueña de mis suspiros, si no estas me desespero, el estar contigo me da paz, estoy perdidamente enamorada...
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Amity era menor que Edric y Emira por un año, entonces yo le llevaba unos meses. Ella es muy chistosa, muy ágil yo diría incluso que es brillante y lo mejor es que no le teme a nada. A sus dieciséis años se mueve por el mundo como si fuera cada rincón de su casa. Ella ya fue aceptada en la universidad antes que todos los de mi curso y el suyo, pero decidió no aceptarla hasta que sus hermanos también entren, para poder irse juntos.
No Quiere dejarlos allí/ en ese apartamento con ese papá y esa mamá ausentes.
Además de seguir yendo a la escuela y prepararse para los exámenes que pasará fácilmente. Amity trabaja en la biblioteca los fines de semana todo el día, ayudando a encontrar libros, en la sección de niños, o simplemente limpiando. A insistencia de mi profesora Lilith, me puse a estudiar libros interesantes y muy pocos conocidos, para que cuando pasara por ahí pudiera sostener una conversación decente sobre libros con ella.
Lo hice hoy en la mañana y creo que funcionó. Amity se veía realmente impresionada que supiera sobre grandes autores de la literatura renacentista.
