Planes a futuro

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Alana se encontraba sentada al lado de su madre quien limpiaba sus lágrimas y la animaba a tomar té. Jacob, y Abel estaban al borde de los nervios queriendo matar a todos los hombres que recordaban la habían mirado alguna vez. Franco acribillaba con la mirada a sus hijos intentando sacarles la verdad aunque fuera a palos. Mientras que Magdalena y Belmont se sentían orgullosos de sus hijos y sus principios.

Sebastián y Lidia miraban nerviosos a Sergio, "Que no haga una tontería Dios" rogaba su madre al saber que seguramente terminaría yendo tras de ella fuera cual fuera la decisión que tomarán.

-Lo mejor será llevárnosla de aquí- dijo Jacob- si no quieres que el padre lo sepa debemos tenerte lejos mija- y los ojitos llorosos de su ahijada le rompían el corazón

-El doctor ha dicho que es un embarazo de riesgo, por el tiempo que pasó montando sin saberlo, así que no sé qué tan prudente sea que esté lejos- dijo Sergio

-Puede quedarse hasta los seis meses- dijo Magdalena- después podría ir a Nashville-

-No creo que sea buen lugar- interrumpió su marido- estoy seguro que esa persona conoce sus pasos debería ir a algún lugar que no conozca-

-¿Las cumbres?- dijo Franco pero solo recibió un no a coro de todos- yo solo sugería-

-Puede quedarse aquí- dijo Abel, nadie entra ni sale sin que nosotros sepamos, y a los seis meses, te iras a Nebraska, las nuevas oficinas estarán listas el siguiente mes, necesitamos una cabeza de familia por allá, así que, todo estará bien y nadie sabe de nuestra nueva inversión- Belmont asintió tranquilo-

-Puedo irme en unos meses y buscar el rancho como lo habíamos acordado, algo cómodo, yo lo soluciono mija- dijo Jacob intentando que estuviera tranquila- me podría quedar con Sergio, no sé qué opines- Sergio asintió sin decir nada

-María irá contigo también, después de todo sería como mover el equipo de aprendices hacia Nebraska- dijo Magdalena- Adán terminara la escuela en 3 meses, así que para ese entonces podrá ir también, al menos hasta que todo esté tranquilo y sepamos que nadie se enteró que tuviste un hijo-

Alana solo asintió. No querían que nadie se enterara, porque fuese quien fuese el padre, quizá querría a su hijo de regreso, y no solo a su hijo si no al imperio de la familia. Aunque eso era lo último que pensaban, lo que les angustiaba, era que si la destrozó una vez podría hacerlo de nuevo.

Una vez que todo se calmó Vincent se reunió con todos los involucrados en Nashville, donde sabía Abel no podría enterarse.

-Hablen, ¿Es de Genaro?- y los primeros en asentir fueron los gemelos- demonios- suspiro sobando su cuello- hasta donde yo sabía ellos estaban saliendo-

-Genaro está prometido con Pamela- dijo su hija sintiendo como el frío le recorría el cuerpo- el tío Pedro nos lo dijo-

-Pedro no miente- dijo Vincent intentando comprender cómo la vida era tan hija de puta-¿Genaro sabía que eran parientes?-

-Si me lo preguntas a mi padre, Genaro no sabía ni porque lo golpeamos, quizá quería dejar a Pamela, o no se-

-¿Golpearlo?- y fulminando a su hijo con la mirada todos se hicieron pequeños- No puedes andar por la vida ensuciándote las manos- regaño a su hijo- por más satisfacción que eso nos dé-

-Que miedo dan los Belmont- susurro Vicente sintiendo la soga en su cuello

-Bien, nadie dirá nada, y nos mantendremos alejados de las cumbres y de los Bravo, si preguntan por Alana "Está en casa" si alguien teme a Abel, ese es Jacinto Bravo, así que ni de locos pisaran la Ilusión. Nadie moverá nada, nadie investigara nada-los señalo- dejaremos que las cosas fluyan y solo de ser necesario veremos qué hacer. Alana se merece una gestación feliz-

Los BravoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora