BUSCANDO A LILI

LA INCERTIDUMBRE COMIENZA

BUSCANDO A LILI (Parte 2)

Fui corriendo a casa de Li, quería buscar mi celular que había dejado cargando en la mañana cuando salimos, debía ir a poner una denuncia y para eso necesitaba fotos de ella, llegué al pequeño departamento en el que dormí tantas noches con ella, al pasar por la cocina la pude visualizar sonriendo mientras preparaba el desayuno, me derrumbé a llorar, me sentía tan culpable, sino la hubiese hecho sentir tan mal, ella no hubiese cruzado la calle sola, y ahora no estaría con saber quien y corriendo tanto peligro.

Llegué a la habitación y justo sobre la mesa de noche estaba mi celular, pero al ver la cama, esa cama en la que tantas veces hicimos el amor, por primera vez me arrepientí de haberla dejado, Lili lo único que hacía era amarme, en verdad se desvivía por verme feliz, me enviaba desayunos el día de mi cumpleaños, me escribía poemas, cuando estaba mal nunca me dejó solo y ahora yo la había dejado y gracias a eso la había puesto en peligro, ¡Qué imbécil soy!

Sobre su almohada estaba su camisón negro de seda, lo tomé y lo olí, tenía su aroma, ese aroma que me embriagaba tanto, sentí tantos deseos de tenerla frente a mí viéndome con deseo, seduciéndome, me acosté en la cama, y tome su camisón, inhalaba su aroma y por un momento me olvidé de todo, cerré los ojos y recordé la primera vez que la vi usar ese camisón, entró al cuarto, se paró frente a mí, se veía tan perfectamente sexy con su cabello rojo alborotado, me vio a los ojos y dijo: -Hoy quiero complacerte amor- me besó y me tiró a la cama, quitó mi pantalón, luego mi camisa y ropa interior, joder me volvía loco, se metió entre mis piernas y tomó mi pē-nə lo introdujo de una en su boca y empezó a succionarlo lentamente, mis jadeos eran incontrolables.

Deslizó su lengua por todo mi gląn-de y de pronto paró, me dijo: -Sentate en la cama, amor- me senté, ella me sonrió, y se puso de rodillas de nuevo, ya no necesitó tomar mi pə-nə con las manos la excitación era más que evidente, cuando menos lo esperaba lo metió todo a su boca mientras me veía a los ojos con esa mirada perversa que tanto me enloquecia, la tomé de su cabello alborotado y ¡Oh joder! Recordar todo esto me puso tan excitado, metí la mano en mi pantalón, saqué mi pə-nə y comencé a mastur-barmə mientras recordaba a Lili entre mis piernas, de pronto ella se puso de pie abrió sus piernas, y de gope se sentó en mí dejando entrar mi pə-nə en su cálida y humeda vã-ginä, los dos gemimos, ella dejó caer un tirante de su camisón y así liberó unos de sus pechos, se inclinó hacía atrás mientras se tomaba de mi cuello, yo tomé su pecho, lo apretaba mientras ella subía y bajaba gimiendo, los rayos de sol entraban por la ventana y hacían brillar su cabello, ¡Joder me estaba co-giəndo una diosa! Mientras recordaba yo apretaba mi pə-nə subía y bajaba mi mano intentando imitar el moviento de caderas de Lili, y joder justo cuando Lili y yo nos venimos entre gəmidos en mi recuedo mi mano se llenó de sə-mən, ¡No lo puedo creer! Lili está desaprecida y yo aquí perdiendo tiempo valioso con el recuerdo de nuestras noches de pasión.

Me limpié, me puse de pie, tomé mi celular y salí directo a la policía a poner la denuncia, le conté todo al policía él me pidió el nombre completo de Lili, se lo di, y fue ahí donde empezó mi maldita incertidumbre cuando lo escuché decirme: -Disculpe señor pero no tenemos ningún registro de que exista una persona con ese nombre- a lo que muy molesto respondí: -¿Cómo no va haber algún registro? Es mi novia, bueno fue mi novia por dos años, -Calma, ¿Tiene alguna fotografía de ella?- preguntó, -Pero claro que tengo, ahora le muestro- respondí sacando mi celular y ¡Pu-tą madre! ¡No hay una solo foto de Lili, todas se borraron, ¿Qué carajos está pasando?

Continuará...

- Lissbeth SM.