El primer maestro de Pars

Lo que sucedió ese día

Unas horas antes de la masacre

El rey Andragoras salió de su tienda, montó en su caballo y se dirigió directamente a la cabeza de la columna principal.

¿En qué otra tierra se puede encontrar un rey tan digno y carismático? Los criados a su lado no pudieron resistirse a un pensamiento tan orgulloso.

Era el rey de la gran nación de Pars, un general feroz e invicto, un gobernante que impresionaba incluso a los señores y reyes de los países vecinos.

Vahriz hizo una profunda reverencia y procedió a transmitir su informe.

- ¡85.000 soldados de caballería y 138.000 soldados de infantería, todos listos para desplegarse!

- ¿Qué hay del número de enemigos?

El anciano Eran convocó a Qaran, el Marzban a cargo de todas las investigaciones.

Qaran respondió respetuosamente a la pregunta del rey.

- Según mi análisis, calculo de 25.000 a 30.000 soldados de caballería enemigos y de 80.000 a 90.000 soldados de infantería. Desplegaron aproximadamente el mismo número en Maryam

- Después de una larga serie de batallas, su número debería haber disminuido, ¿no?

- O pueden haber sido reforzados con refuerzos desde casa

Ante esas palabras, el rey asintió, pero no sin cierta desgana. Había estado esperando datos más precisos y sólidos.

Fue el propio Qaran quien se ofreció como voluntario para encabezar las investigaciones, y era cierto que tenía la capacidad necesaria para ello. Por esa razón, el rey le había permitido asumir toda la responsabilidad de sus esfuerzos de investigación.

Y, sin embargo, ahora Qaran, que normalmente era incluso más exigente y prudente que Dariun o Vahriz, se comportaba con tanta asertividad ante su rey.

- Dicho esto, en estas condiciones no podemos determinar las formaciones exactas del enemigo

- Por favor, no se preocupe, señor. Asimismo, el enemigo tampoco puede distinguir nuestras formaciones. Mientras los superemos en número dos a uno, la victoria definitivamente será nuestra

Qaran habló con tal fuerza y ​​convicción que el rey Andragoras asintió con la cabeza. Vahriz, que había detenido su montura a veinte gaz distancia, lanzó una mirada preocupada en su dirección, pero ni una palabra de su furtivo intercambio llegó a oídos del anciano.

- ¡Enemigos avistados!

El grito pasó por las filas hasta llegar a la columna principal. El jinete que había hecho sonar la alerta hizo que su caballo se adelantara para dar su informe.

Había movimiento en la línea del frente de los enemigos ocho amaj adelante.

- Ante nosotros se encuentran las laderas del monte Bashur, donde el espíritu del rey héroe Kai Khosrow hace guardia. Tampoco existen fallas o depresiones en la zona. No importa qué tan espesa sea la niebla, no debería haber ningún problema mientras nuestros caballos avancen en línea recta

Tras la declaración de Qaran, el rostro del rey Andragoras estalló de inmediato en una expresión de engreído deleite.

Siempre había sido un general audaz y militante, más propenso a rechazar las cautelosas consideraciones de alguien como Dariun mientras favorecía una estrategia más agresiva. Este tipo de feroz ataque directo había sido su deseo para empezar.

Por otro lado, si Dariun estuviera presente en ese momento, probablemente habría dado lugar a la incómoda sospecha de que Qaran estaba incitando deliberadamente al rey a actuar.