Día 16- El amor | Todobakutodo

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Pov Omnisciente

Supo que estaba jodido cuando el otro chico le llegaba a mandar un mensaje y él simplemente sonreía ante aquello.

Sabía que estaba jodido.

Desde el primer momento en el que se había dado cuenta de que se había comenzado a sentir bien junto al chico bicolor, es que se había percatado de aquello y que, posiblemente, eso ya no tenía vuelta atrás.

Recordaba haberse reprendido a si mismo por ello puesto que, ante su pensar, el amor no llegaba a ser algo más allá de simples casualidades que, algunas veces, tendían a ser caóticas.

Que no era más que simples respuestas de sí o no.

Creía que el amor no tendía a durar toda la vida.

Que no era como esos cuentos de hadas donde vivían felices para siempre.

No, claro que.

Él había visto a sus padres discutir algunas veces.

Había visto como se habían dejado de hablar por días.

Sabía que había peores matrimonios que el de sus padres.

Sabía que el amor no era como esos poemas de antes donde decía que aun pese a las adversidades seguían juntos.

¡Que lo superaban todo!

Después de todo, estaban juntos.

Pero, esos cuentos, esos poemas, habían sido escritos cuando la mortalidad de las personas rondaba los 40 años.

Habían sido escritos cuando aún no se vivía lo suficiente.

Cuando si se podía decir que la vida era corta.

Y, joder, con eso cualquiera llegaría a vivir al lado de su "ser amado" toda la vida, ¿no?

Con esas estadísticas de vida, cualquiera podría durar toda una vida juntos.

Y eso solo en algunos casos.

Entonces, no había entendido porque seguir atesorando aquello que, en algún momento, podría llegar a acabarse.

Aquello que en algún momento dolería como el verdadero infierno.

Eso que, así como podría hacerte sentir en las nubes, y te llegaría a dar ganas de seguir con la vida; también podía ser aquello que te dejara heridas que tardarían años en sanar. Y no habló de heridas físicas, que algunas veces también las llega a dejar, hablo más bien de aquellas heridas emocionales que, algunas veces, aun cargas muchos años después.

Por ejemplo, esas personas a las cuales las llegan a cambiar por otras; después de eso, ellos tienden a desconfiar de los demás.

Llegan a sentirse mal cuando, una vez más, les ha tocado sonreír ante un simple mensaje de buenos días.

Ante un "¿Cómo estás?"

Ante una nueva persona que, así como los podría llegar a amar el resto de sus vidas (aunque eso se llegue a ver imposible) también les podía llegar a dañar de una horrible manera.

Así como esa persona en algún punto podría llegar a compartir cama con uno y eso se convirtiese en lo mejor de la vida, también podría llegar a compartir autobús con uno y eso sería la peor tragedia de la vida, pues incluso llegarían a evitar ese camino hasta por un par de años.

Si, estaba jodido.

Sabía que posiblemente aquel amor que comenzaba a sentir podría llegar a tener alguna fecha de caducidad, al igual que un simple galón de leche.

Sabía que aquellos aspectos del chico bicolor que en aquel momento le encantaban, también podrían ser aquellos que tanto odiase en algún futuro.

Sabía que todo en algún punto podría irse al carajo.

Y, aun así, en lugar de alejarse como lo harían algunos, había decidido quedarse allí; seguir con aquella amistad la cual esperaba que, quizás, se convirtiese en algo más.

Porque, después de todo, ¿Que era el amor sin el dolor? ¿Que era la música sin el silencio? ¿Que era la vida sin aquellas emociones y momentos que, algunas veces, te llegaban a hacer sentir en el cielo, y otras tantas que te llegaban a hacer sentir en el mismo infierno?

Estaba jodido, sí, pero se la jugaría.

Después de todo, podía que aquello pudiese llegar a ser una buena anécdota.

Una buena historia.

Un aprendizaje más.

Una herida que le dolería toda la vida o un amor que apreciaría por el resto de su vida.

Flufftober Todobakutodo 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora