Naruto: El Hijo de los Sannin

Capítulo 106: Aguas calmadas

Otro día, otra batalla hecha

Mientras Mei y Zabusa luchaban contra Kisame, Suigetsu estaba ayudando a Ameyuri a lidiar con Raiga Kurosuki. Los dos espadachines vivientes estaban mirando al no muerto, que estaba listo para atacar en cualquier momento.

"Entonces, ¿Cuál es tu plan para lidiar con este tipo sin ser frito?" Ameyuri preguntó en un susurro.

"Sé algo que puede funcionar. Pero necesito que actúes lo más rápido posible y le cortes ambos brazos", le dijo Suigetsu, mientras adoptaba una posición defensiva. "¿Podrás hacerlo?"

La pelirroja le frunció el ceño. "Tu falta de fe en mis habilidades es un insulto".

"Solo quería estar seguro, no hay necesidad de ponerte tan susceptible, caray ..." dijo Suigetsu, antes de ver algo por el rabillo del ojo. "¡MIERDA!"

Durante menos de un segundo, el miembro del clan Hozuki apartó los ojos de Raiga, lo que el zombie tomó como una señal para derribarlo. Afortunadamente, Ameyuri fue igual de rápida y pudo detener el golpe con ambas espadas. Chispas eléctricas bailaron de ambas hojas.

"¿Todavía dudas de mi habilidad?" Ameyuri dijo, antes de empujar a Raiga hacia atrás con un empujón, antes de lanzar golpes rápidos, forzando al ninja no muerto a la defensiva. En ese momento, Suigetsu saltó hacia adelante y arrojó la aguja de coser a Raiga como si fuera una jabalina. Raiga, sin embargo, logró desviar la hoja perforadora sin mucho esfuerzo.

"¡Ja! ¡Aficionado!" se jactó el espadachín no muerto.

"¿Tú crees? ¿Qué tal esto entonces?" Suigetsu tiró del cable conectado a la espada para recuperarla, mientras apuntaba a Raiga con la otra mano, haciendo una pistola con un dedo. "Estilo de Agua: ¡Pistola de agua!"

El ninja de cabello blanco disparó múltiples balas de agua a presión a Raiga, pero el espadachín no muerto las desvió con sus espadas mejoradas eléctricamente, empujándolo un poco hacia atrás con cada disparo. Ameyuri corrió hacia Raiga por su flanco izquierdo y decidió que era hora de atacar. Sus propias espadas también chisporrotearon con electricidad. Sin embargo, una mano era todo lo que Raiga necesitaba para bloquear el golpe de la chica peluda.

"¡Y no estás mucho mejor!" Raiga dijo, antes de patearla de vuelta. "¡No estás demostrando ser digna de un buen funeral!"

"Un poco irónico, de alguien que apareció de un ataúd. ¡Y al ataúd volverás!" Dijo Suigetsu, mientras lanzaba su espada a Raiga de nuevo.

El resultado fue el mismo, con Raiga parando fácilmente la aguja gigante y Suigetsu tirando de ella hacia atrás con el cable ninja adjunto. En ese momento, Ameyuri eligió atacar una vez más, pero los reflejos de Raiga demostraron ser mucho mejores de lo que parecían, y bloquearon su estocada de manera experta, antes de empujar la espada a un lado y hacerla caer de espaldas con una poderosa patada.

"¡Estoy empezando a cansarme de ti, pequeña descarada!" gritó el ex espadachín de Kirigakure, mientras corría hacia ella. "¡Muere ya!"

"¡Mierda!"

Todavía en el suelo, Ameyuri levantó ambas espadas para bloquear el golpe entrante, pero dicho golpe nunca llegó, para su confusión. El brazo derecho de Raiga se mantuvo en el aire, temblando, como si intentara moverse pero no pudo.

"¿Qué ...?" Dijo Raiga, mirando su brazo inmovilizado con incredulidad. En ese momento, tanto Raiga como Ameyuri notaron un breve brillo metálico, y los dos se dieron cuenta de que su brazo estaba envuelto en alambre ninja. El cable que estaba conectado a la aguja de coser que Suigetsu estaba tirando.

"Pensaste que al detener mi espada estarías a salvo, ¿no es así?" Suigetsu dijo en un tono burlón, mientras tiraba con mayor fuerza. "El mayor peligro es el que no se ve tan fácilmente".