Cap 15

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Todo eran vueltas y más vueltas en la cama ver pasar las horas, me levante para comer solo dos bocados nada más y vuelta a la cama y directa a la cama.

Me negué a encender el móvil sabia lo que iba a pasar si lo hacía y poco me apetecía hablar y dar explicaciones solo quería lamerme las  heridas.

Eran las cinco de la tarde cuando sono el timbre de mi casa, me acorde de toda su familia por osar a despertarme, me tape con la almohada para no escuchar, el timbre no dejaba de sonar y me levante bastante cabreada.

Mire por la mirilla si no era preciso no iba abrir pero quien había detrás de mi puerta era la madre de Míriam, dude en abrir pensé ya se cansaría, tenía miedo de que Míriam le  hubiera contado  algo.

-Malú se que estas ahí, necesito hablar contigo.... Por favor estoy preucupada por Míriam y se que tu también lo estás....

Abri la puerta y me hice a un lado para dejarla pasar, ella conocía perfectamente la  casa muchos años compartiendola con su hija.

Llegamos al salón y le ofrecí algo para beber pero se negó.

-No me apetece nada.... Siéntate a mi lado.

Se sento primero y luego yo en el mismo sofá pero dejando un hueco entre las dos, ella sonrió y me dijo.

-Tranquila no muerdo.

Yo no la podía mirar me sentía tan culpable de toda esta situación hasta que note la mano de ella sobre la mía.

-Có... Cómo está Míriam?

-Mal... No dice nada solo llora y no se como ayudarla, ni que decirle, cuando no está en el instituto se encierra en su habitación, solo me quedas tu para saber que está pasando.

-Yo.... Yo.... No puedo contarle nada.

-No puedes o no quieres.

No le conteste solo alce los hombros.

-Malú ha roto con Raúl no hay boda es lo único que se, llevo todo el día llamando y anulando, dando explicaciones que no se, Miriam no quiere ver a nadie, sus amigas han venido y literalmente las ha hechado, Raúl ha llegado hace un rato y sólo han habido gritos, tu no contestas las llamadas de nadie ni siquiera de tu madre que por cierto esta muy preucupada, tienes una cara que da pena y no has ido a ver a Míriam eso me dice que eres parte implicada en eso y no se el por que.

-Yo no he tenido que ver con su ruptura.... Lo juro...

Maria así es como se llama la madre de Míriam se acerco más a mi lado, su mano libre acarició mi mejilla.

-De eso estoy segura y no por que no te gusten los hombres, se que no serias capaz de hacerle eso a Míriam ella es como tu hermana.

-Yo la quiero Maria....

-Lo se Malú.

-No como mi hermana....

-También lo se niña.

-Todo el mundo lo sabe?

-Todos no, la idiota de mi hija no lo ve o no quiere verlo, tu madre y yo lo hemos hablado muchas veces, lo buena pareja que haríais.

No puedo evitar sonreír y a la vez sonrojarme pensar que mi madre y la suya hablan de nosotras.

-Y como lo supisteis?

-Eres muy evidente y muy clara, esa manera de mirarla, Raúl nunca la ha mirado como lo haces tú, ni la cuida como tu, lo que te digo mi hija es idiota.

Volvió a sacarme una sonrisa y una confesión.

-El otro día nos acostamos Míriam y yo.

-Dios mío entonces Raúl no ha, sido infiel habéis sido vosotras.

-No..... No le digas a Míriam que se lo he dicho.

-Te lo prometo.

-Cuando volvimos de la despedida la lleve a casa y vimos  a Raúl con otra,.

-Que?

-No quiero entrar en detalles ni nombrar quien es eso es cosa de su hija yo se lo digo para que entienda lo que pasó.

-Entonces la conozco?

-No se lo voy a decir Maria.

-Esta bien.

-Míriam estaba muy enfadada dolida pensó que era su culpa y se me lanzó intente pararla... No pude....

-Lo entiendo y luego se arrepintió?

-Si...lo hubiéramos podido arreglar pero vino Raúl diciendo gilipolleces quería arreglarlo me puse en medio de la discusión y le soltó un secreto... Y ahí terminó Míriam se fue para no volver.

-Tan grave es?

-Va a terminar odiandome usted también, pero ya no tengo nada que perder... Cuando Raúl empezó con Míriam yo aún no sabía quien era, una de mis amantes me propuso hacer un trío....

Maria abrió los ojos y la boca.

-Era el?

-Si... Pero yo no lo sabía hasta que me lo presentó, me quería morir Maria.

-Tampoco es tu culpa?

-No se lo dije y me culpa de no ser sincera con ella, tiene razón si se lo hubiera dicho ahora no estaría pasando por esto parece que está más enfadada por algo que pasó hace un siglo que por lo de ahora.

-Eh Malú tiene que comprender fue hace mucho, un error que no debe manchar vuestra amistad o lo que venga.

-No puede venir nada Maria, Míriam me odia, no quiere verme no puede ni mirarme a la cara, no se que hacer, tengo tanto miedo de perderla...

No pude  más y me heche a llorar en sus brazos Maria acariciaba mi espalda.

-Todo saldrá bien ya veras.

Suspiré y me separe de sus brazos con sus dedos limpio las lágrimas que resbalaban por mis mejillas.

-Dale tiempo a que piense, espacio, esta muy liada con todo superada pero lo tengo seguro que cuando piense un poco recapacitara eres muy importante para ella.

Volvi  a suspirar ojalá tuviera razón, la verdad es que me vino bien su visita, sus palabras y su apoyo, no estaba sola en esta mierda.

-Me voy ahir ya, te he dado bastante la charla y me voy un poco más tranquila, Malú no dejes de ir al trabajo te vendrá bien y ve a ver a tu madre.

-Mañana iré lo prometo pero hoy no me apetece nada.

-Esta bien se lo diré a tu madre que te deje hoy tranquila.

-Muchas gracias Maria hablar con usted me dejan mejor sabor de boca.

Me dio dos besos y se levantó.

-Confío en vosatros dos.

Maria se fue la acompañe hasta la puerta, ya eran casi la hora de cenar y poco me apetecía cocinar, cuando Míriam estaba aquí era la encargada de cocinar y yo la de molestar, decidí pedir algo una pizza estaría bien.

Al encender el móvil casi explota en mis manos miles de llamadas y mensajes de demasiada gente e ignore solo le conteste a mi madre.

-Estoy bien mamá no me apetece hablar solo quiero estar sola mañana iré a cenar a casa dale un beso a papá y otro para ti.

Llame para pedir la pizza y volví apagarlo.

Me di una ducha para relajarme mientras veía la cena, comi media pizza con una cerveza mirando la televisión sin llegar a prestar atención, me quede dormida en el mismo sofá cuando abri los ojos me dolía el cuerpo mire la hora las tres de la madrugada, mejor ir a la cama mañana sería otro día y tenía que afrontar mis problemas.

Casi hermanas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora