𝑽𝒐𝒍𝒗𝒆𝒓𝒏𝒐𝒔 𝒂 𝒆𝒏𝒄𝒐𝒏𝒕𝒓𝒂𝒓 (𝑯𝒊𝒄𝒄𝒔𝒕𝒓𝒊𝒅)

Capítulo 3

Habían pasado dos semanas ya del encuentro de Hipo con los habitantes de Berk, al regresar todos quedaron en decirle a Mala que fueron de acampada luego de que el se enojó pero por un descuidó de Ivar hablando de más se término enterando, fue así cómo le contaron todo lo sucedido para recibir un castigó durante estas semanas, trabajar en los establos con los dragones, entrenar y nada de salidas.
Los chicos estaban cansados pero Mala tenía razón, la preocuparon mucho y pensar en mentirle no sirvio siendo qué muchas cosas debían decirse.

Mala luego de su charla con ellos se quedo pensando en algo, sabía que a Hipo no le gustaría pero ella ocultó qué en su partida unos guardias le dijeron qué los cazadores se aliaron con Drago Manodura, esto era un peligro para todos los qué convivan con dragones por lo qué una alianza no viene mal, y eso fue lo qué hizo mandó a un viajero a Berk para una alianza y le dijo qué venga en esta semana qué se celebra una fiesta de inicio para los niños qué quieren aprender a entrenar dragones.

Veamos como la están pasando nuestro jóvenes jinetes en su duró entrenamiento supervisado por Crogg.

-Vamos Crogg ya lo hicimos mil veces, danos un descanso,-El hombre lo meditó unis segundos viendo como el castaño rojizo lo miraba con suplicas-por favor.

-Bien, unos minutos de descansó y luego continuamos. -Luego de decir aquello todos cayeron al suelo cansados.

-Me duele todo el cuerpo. -Dijo Eret

-A mi me duelen partes qué no sabía que sentían dolor -Lo acompañó Ivar a lo qué los demás asintieron.

-Esperó que pronto se acabé, odió qué nos den castigos aunque he de admitir qué éste si lo merecíamos. -Menciona Kaira.

-Solo un poco, si le hubiéramos dicho la verdad desde el comienzo, seguramente no tendríamos un castigo tan duró. -Habla Heather en forma de regañó mirando a Hipo.

-Si si lo siento, es solo qué iba a buscar el momento perfecto para decirle la verdad. -Rie con algo de nerviosismo. -Pero Ivar tubo que abrir su bocota.

-Culpa a Erika y a Eret por no avisarme que la Reina Mala estaba detrás mio, aún me dan escalofríos al recordar ese incómodo momento.

-A mi no me metas Ivar, tu y Eret fueron los imbéciles al hablar en alto de aquello y no ser cautelosos.

-Si pero...-Eret iba a objetar, pero la alarma de qué venían visitas a la isla sonó, los 6 jóvenes se levantaron deprisa yendo a sus dragones para saber quienes eran los visitantes, los defensores del ala no recibían gente muy seguido, de hecho casi nunca y esto es sospechoso.

Al llegar al lugar entré la multitud se daban pasó para llegar juntó a la reina y obtener información, ya qué nadie les decía nada de lo que ocurría en la isla.
Cuándo estuvieron juntó a ella iban a hablar pero fueron unterrumpidos por la misma mujer.

-¡Bienvenidos pueblo de Berk!-Al oir aquéllas palabras Hipo palideció, ¿Por qué los llamó? ¿Por qué no le dijo nada antes? ¿Es qué acaso no confiaba en el?

-Ahora en el gran salón obtendrás tu explicación a todas tus preguntas. -Susurró ella en voz baja para ir a recibir a los invitados, es como si le hubiera leído la mente.

-¿Que demonios hacen los berkianos aqui?-Preguntó Ivar.

-No lo se, pero seguramente lo sabremos muy pronto. -Dijo Hipo serió.

En el gran salón

-Es un honor tenerlos aquí a usted jefe Estoico, su mano derecha el señor Bocon y a Jinetes de dragones. -Dijo con una sonrisa, mirandolos a todos.