Veneno

701 37 2
                                    

Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, la historia es mía.

Una disculpa por la tremenda tardanza, no me odien.

A leer.

Capítulo 5: Veneno.

-Deberías -avanza hacia mí y me recarga en un casillero, acorralándome entre sus brazos.-Ahora ónix, o me besas o esto se pondrá feo.

-¿Qué crees que estás haciendo? -pongo una mano en su pecho y giro la cabeza hacia un lado.

Edward da un golpe contra el casillero que hace eco en el pasillo.

-¡Te lo advertí! -exclama antes de tomarme la barbilla y estampar sus labios contra los míos.

Está frío, pero es suave y lento, contrario a su carácter. Mete los dedos entre mi cabello para que mantenga mi cabeza quieta mientras él mordisquea mi boca y succiona todo lo que puede.

Nuestro primer beso. Mi corazón sufre las consecuencias y late desbocado en su sitio.

Subo mis manos a su cabello y le imito, acercándonos hasta el punto en que es imposible respirar. Bueno, él no lo necesita.

Edward parece escuchar mis necesidades y abandona mi boca para deslizarse a mi oreja.

-Respira, ónix -me acaricia la mejilla- No queremos a nadie muerto esta noche.

¿Ésta noche?

Trato de respirar a un ritmo normal, para que él no pueda darse cuenta de hasta qué punto me ha está afectando, pero es imposible. Me estoy mareando.

Me sonríe hasta que se arrugan las comisuras de sus ojos.

-No le veo la gracia -me acomodo el cabello- Eso ha sido totalmente innecesario.

-Claro que no. Lo querías ónix, casi tanto como yo.

Error Casper. Lo quería muchísimo más que tú.

«Y tengo que ser brusco contigo -continúa- De lo contrario me hubieras mandado al demonio»

-Más vale que te dejes tu actitud cavernícola para conmigo en casa.

-Pudiste haberme dado una bofetada, tuviste todo el tiempo del mundo; pero en lugar de eso me acercaste a tu boca carmesí y dejaste que te devorara por completo -hace una pausa que utiliza para limpiarse la comisura de la boca- Voy a tener por siempre la sensación de tus dedos en mi cabello.

C-A-R-A-J-O ¿A dónde ha ido el fantasma al que solía gastarle bromas? Hace solo unos días él era tan... dulce.

-¿Exactamente en qué momento decidiste que te gustaba, eh? -pregunto, envolviéndome el cuerpo con los brazos.

-Desde el principio, supongo -encoje los hombros- Al comienzo me parecisteinteresante, luego tu humor oscuro me hizo sentirme vivo de nuevo y me gustó estar a tu lado, para cuando me di cuenta de que estaba enamorado ya era tarde. No había vuelta atrás.

Paso saliva- ¿Te molesta que sea así?

-Claro que no. Lo de "demasiado tarde" lo digo por ti. Tenía miedo de que tú no me...

-Quisieras -completo y niego con la cabeza, bufo- Qué desastre ¿no? Esto es un maldito desastre.

-No pienses en eso -sonríe- Tenemos un año por delante, no tenemos por qué desperdiciarlo -dice sugestivamente alzando las cejas.

-Ni de broma -me alejo y comienzo a caminar, pero él me envuelve por la cintura y me planta de nuevo en mi sitio.

-Ah no- musita- Te dije que vendrías porque tenía ganas de follarte. Estás aquí, así que...

Beautiful SoulsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora