Me Before You (Johnlock)

El cumpleaños de John

Después de lo ocurrido en la boda y que la madre de Sherlock regañara a ambos por no llegar a dormir ambos se sentían muy felices los últimos días.

Justo ahora se encontraban en el jardín charlando

-Oye Sherl, mi cumpleaños será este sábado y mis padres querían hacerme una pequeña comida. A la cual querían que te invitara... obviamente les dije que no, se que no te gusta comer frente a las personas, pero si tu...

-Oye oye detente. No tomes decisiones apresuradas por mi. Iré. Claro, si me invitas.

La cara de John se ilumino y sus ojos brillaron.

-¡Te presentare a mis padres!

-No creo que me agrede mucho conocer a los padres, pero por ti lo haré.

🖤🖤🖤

Sábado

-Bien, aquí tienes, la mochila de emergencias y muchas felicidades John.

-¿Seguro que no te quedas?

-No, gracias debo atender unas cosas.

-sherlock le susurra al oído a John ~esas cosas son mi hermano~ y ambos sonríen picaramente.

-Claro, suerte–menciona un John risueño.

Todos sabían que Greg y el hermano mayor de Sherlock, Mycroft. Tenían una relación "secreta" desde unos meses antes del incidente de Sherlock, por eso fue fácil tener un doctor para él.

-Mamá, papá. Él es Sherlock Holmes.

-Mucho gusto cariño, y muchas gracias por darle un empleo a nuestro querido hijo.

-Un gusto señor Holmes –el padre de John estiro su mano esperando estrecharlas hasta que se dio cuenta del error– ¡Discúlpame! No era mi intención de verdad lo siento...

-No se preocupe... con una reverencia basta.

Todos comenzaron a reír y el hielo se rompió. Pasaron a comer mientras hablaban tranquilamente.

-Ojalá Harriet estuviera aquí. Ella es el cerebro de la familia. Adelanto dos años de escuela ¿No cariño? Supero a nuestro John.

-No tan inteligente como para evitar embarazarse.

Y ahí estaba de nuevo el ambiente incomodo. Salvado por unos golpes en la puerta. John se apresuro a abrir

-¡Hola!

-Hola amor, feliz cumpleaños. Un poco tarde pero aquí estoy.

-¡Si claro! Pasa, solo 45 minutos tarde, ¡Yupi!

Mary solía poner muchas veces sus rutinas de ejercicio y cardio sobre John y aunque el menor estaba acostumbrado siempre pensaba en que al menos el día de su cumpleaños las cosas cambiarían. Entraron a la pequeña cocina con los demás.

-Así que tu eres el tal Sherlock Holmes –Mary siguió comiendo el pollo con papas que la mamá de John preparo–.

-Así es. Por cierto señora Watson, el pollo esta delicioso, muchas gracias por la invitación.