¡Evitando al protagonista! [2]

Capítulo 221. Gracias por dejarme verlo de nuevo (1)

Había pasado el resto del viaje en autobús en un estado de ansiedad, preguntándose qué pasaría una vez que viera el libro. Ni una sola vez pensó que terminaría viéndolo de nuevo.

"Qué casualidad. Señorita, ¡incluso logró encontrar el camino a mi casa!"

El disgusto del hombre quedó claro por el tono sarcástico de su voz.

Ella pensó por un momento antes de levantarse. "Señor Chen, creo que está malinterpretando algo. No vine aquí por ti", trató de explicar.

"¿Ah, de verdad? Entonces dime, ¿a qué viniste a mi casa?"

La abuela Chen vio a los dos enfrentarse con dagas en los ojos y rápidamente explicó: "Junxing, ¿qué estás diciendo? La señorita Xin amablemente me dio su asiento en el autobús e incluso me acompañó a la floristería hoy. La invité a comer como agradecimiento. ¡No la asustes!"

Chen Junxing escuchó la explicación de su abuela pero le lanzó a Xin Siyue una mirada significativa.

Naturalmente, ella entendió su mirada. Ella reconoció que a sus ojos, ella era solo otra mujer desesperada por acercarse a él.

Como no podía llegar a ninguna parte con él directamente, decidió acudir a su abuela. Sin embargo, esa realmente no era su intención.

Xin Suyue pensó que esta comida no era importante de todos modos.

Su única intención era conseguir el libro.

Se acercó a la abuela Chen y le dijo cortésmente: "Aprecio tus buenas intenciones, abuela Su. Si hay una oportunidad en el futuro, los invitaré a comer. Por ahora, ¿podrías dejarme ver el libro?"

La abuela Su no era una persona ignorante. Ella podía decir que había discordia entre los dos y no se atrevió a hacer que Xin Siyue se quedara. "Entonces, espera aquí, Siyue. Iré a buscarlo".

"Gracias, abuela Chen. ¿Quieres ayuda?"

La abuela Chen dijo apresuradamente: "¡No, no! Deberías sentarte y tomar un té. Junxing, por favor ayúdame a hacerle compañía a Siyue".

Cuando la abuela Chen subió las escaleras, le lanzó una mirada a Chen Junxing. A pesar de sentirse molesto, asintió. Después de cada dos pasos, miraba hacia atrás para asegurarse de que los dos no comenzaran a pelear.

¡Pensó en lo extraño que era! ¿Por qué no se llevaban bien? ¡No fue científico!
Chen Junxing también se sintió poco científico. ¿Por qué cada vez que veía a esta mujer, sentía la necesidad de burlarse de ella? De alguna manera sintió una sensación de victoriaal ver su expresión agraviada.

Sin embargo, cuando lo pensó detenidamente, ella no había hecho nada malo. Lo máximo que había hecho era confundirlo con otra persona, lo que lo perturbaba mucho.

Xin Siyue se sentó en la esquina del sofá y no trató de romper el incómodo silencio.

Fue Chen Junxing, que estaba detrás de ella, quien finalmente abrió la boca después de unos minutos. "¿Tu nombre es Xin Siyue?"

Lo escuchó de su abuela antes.

"Mhm", dijo distraídamente, aparentemente perdida en sus pensamientos.

Al ver esto, Chen Junxing frunció el ceño y dijo: "Mi nombre es Chen Junxing". Cuando sus palabras cayeron, la vio mirarlo con una mirada profunda.

Aunque no sabía lo que significaba esa mirada, aún así explicó: "No soy el hombre que estás buscando".

Xin Siyue sonrió amargamente. "Señor Chen, sé que usted no es él. ¿No podrías dejar recordarmelo a propósito cada vez? Puede que esté desesperado por encontrarlo, pero no estoy tan desesperado como para no poder diferenciar entre ustedes dos".

Chen Junxing se puso rígido y abrió la boca para replicar, pero ella lo interrumpió primero. "No tengo ninguna intención, ni tengo ningún interés en ti. No necesitas ser tan cauteloso. Solo estoy aquí para buscar un libro".

¿Ese libro otra vez?

De repente recordó lo que escuchó en la librería. Parecía estar buscando una novela romántica... ¿Ese tipo de libro realmente valía la pena todo este esfuerzo?

"Los ojos de mi abuela son malos, por eso dejó de leer libros hace varios años. ¿Estás aquí para pedirle prestado un libro? ¿No crees que suenasospechoso?". No pudo evitar decir.

Xin Siyue lo miró y frunció los labios.

Su desprecio se podía ver fácilmente en esa mirada, lo que hizo que él quisiera gritarle. Afortunadamente, la abuela Chen bajó las escaleras en ese momento. Ella
dijo en tono de disculpa, "Lo siento, Siyue, ¡pero he buscado por todas partes y no podía encontrar el libro!"

Xin Siyue se puso de pie y preguntó con un tono de urgencia: "¿No puedes encontrarlo?"

La abuela Chen negó con la cabeza. "¡No puedo encontrarlo! Pero si quieres, puedo ir a buscar de nuevo".

Por supuesto, Xin Siyue ya no se atrevió a molestar a la anciana. "Gracias, pero no es necesario. Está bien si no puede encontrar el libro. Supongo que es solo el destino".