Ellos No Saben Nada De Nosotros

CAPÍTULO 8

Lisa estaciono el auto detrás del de su padre que ya había llegado para el almuerzo, tomo su mochila que estaba en los asientos traseros, donde Minnie la había dejado. La puerta del copiloto y la trasera se abrieron y de ellas descendieron Jennie y Minnie, Lisa se bajó y abrió la puerta trasera, que se encontraba de su lado, y de ella saco a Lía.

La ojiverde la tomo en brazos y cerró la puerta, Minnie ya había empezado a caminar a la entrada de la gran residencia, ella seguía confundida por la actitud de la castaña hace minutos atrás. No sabía quién era realmente esa chica, y si era capaz de lastimar a su hermana, pero por lo que había visto, ella ya no estaba tan segura de sus teorías.

Minnie tendría que contarles a Rose y Jisoo lo que había sucedido esa tarde, pero eso sería otro día, porque ella en esos momentos solo quería entrar a su habitación, lavarse la cara para despejarse y recostarse en su cama, dormir toda la tarde no suena tan mal.

Lía rodeaba el cuello de Lisa mientras la mayor cerraba las puertas y aseguraba su coche, para luego acercarse a Jennie que la observaba con ternura y sonreía. Lisa se puso nerviosa, la sonrisa de Jennie removía todo en su interior.

Caminaron juntas a la casa, Minnie había dejado la puerta entreabierta.

"Creo que tu hermana me odia" comento la castaña.

"Minnie suele ser así, solo debes conocerla" respondió la ojiverde una vez cerraron la puerta.

Con Lía aun en brazos, Lisa condujo a la castaña hasta la sala, donde ya se encontraban sus padres. La ojiverde dejo a Lía el suelo, y ella rápidamente corrió a sus padres.

La sala era grande, tenía un gran ventanal que adornaba la pared. La habitación estaba adornada con hermosos muebles de piel, en una esquina se encontraba la chimenea, y encima de esta, un juego de espadas.

"Mami, papi" saludo la niña corriendo hacia ellos.

"Hola cariño" saludo su madre.

"Hola bebé ¿Cómo te fue en la escuela?" pregunto Marco.

"Bien papi, mira..." corrió de regreso a las chicas y apunto a la castaña "Ella es Jennie, es amiga de Lisa y es muuuy linda" presento la pequeña.

"Mucho gusto señores, Manoban" saludo Jennie, cuando tuvo la atención de los mayores.

"Hola querida" La señora Manoban sonrió amablemente al conocer por fin, a la chica que hacia sonreír a su hija.

"Buenas tardes señorita" saludo sonriente el padre.

"Mamá, papá. Jennie se quedara a comer y luego haremos un trabajo en el que nos colocaron juntas" informo la ojiverde a sus padres.

"Claro, cariño" contesto La Sra. Manoban, sonriente, dirigiéndose a su hija para saludarla.

Su rostro cambio al notar el labio lastimado de su hija, y rápidamente acuno el rostro de Lisa con preocupación "¡¿Qué te sucedió?!" pregunto asustada, alertando a su esposo.

Marco camino rápidamente hasta donde estaban su esposa y su hija.

"¿Lalisa, que te ha sucedido?" preguntaba su padre.

"No es nada malo, es un pequeño rasguño. Un chico de la competencia se ha enojado porque le he ganado en la última pelea, nada más... sabes cómo son" dijo, dirigiéndose a su padre.

"¿Sabes a qué do-jo pertenece?" pregunto Marco, más calmado.

"No, no lo sé. Iba con pasamontañas y camisa negra. No logre verle la cara, pero no ha ido a mayores, solo me defendí"