Nuestros hijos

Capítulo 5 - La boda

Nadie llegó a imaginarse nunca que una cosa semejante llegaría a presenciarse en la mansión Malfoy: decenas de personas van y vienen presurosas por toda la mansión, es un hermoso y soleado día del mes de junio, el enorme jardín de la mansión está dispuesto para celebrar tan esperada unión, sillas blancas y un arco en la parte delantera han sido adornados con las más hermosas flores doradas que Pomona Sprout personalmente había cultivado pensando en su gran amigo Remus Lupin; el profesor Flitwick ha encantado centenares de florecillas blancas para que revoloteen por todo el jardín como si fuesen mariposas; Minerva Mcgonaggall ha transformado todos los arbustos del jardín en fuentes que despiden chorros de agua que parecen plata líquida... Muchos piensan que aquel parece un pequeño paraíso, Draco Malfoy había encargado a Hagrid tiempo atrás el cuidado de los pavos reales blancos de su padre, ahora se habían multiplicado y hay muchos de ellos extendiendo su cola majestuosamente.

Remus Lupin está en el último piso de la mansión, mira por la ventana pero es una mirada distraída, está recordando una noche especial, en casa, cenando con Sirius, Harry, Ginny, Draco y Astoria...

-Gracias por invitarme -les dice Astoria a Sirius y a Remus mientras toma la mano de Draco, éste sonríe complacido.

-Gracias a ti por venir -Responde Sirius.

-También quiero agradecer a Ginny por acompañarnos esta noche. -Añade Remus.

Todos visten de acuerdo a la ocasión, Ginny y Astoria lucen sencillos pero lindos vestidos cortos, los cuatro caballeros visten sacos de traje, pero ninguno de ellos lleva corbata, se había dicho con anterioridad que no iba a ser una reunión muy formal.

-Debo decir que esta casa ha cambiado mucho desde la última vez que vine aquí con mis padres, claro, fue hace ya varios años, yo era pequeña, pero puedo notar claramente la diferencia, con tu perdón Sirius, pero ahora se siente más calor de hogar.

-No te disculpes Astoria, no es para mí un insulto, -contestó Sirius- se que mis padres no irradiaban precisamente calor de hogar, pero es muy lindo de tu parte este cumplido para con nuestra casa.

-Y cuéntanos Ginny -preguntó Remus- ¿cómo siguen las cosas en la madriguera?

-Bueno, las cosas no han sido fáciles desde lo de Fred, especialmente para mamá, pero la noticia del embarazo de Fleur ha cambiado mucho el ánimo de la familia, hace poco nos han visitado Charlie y Tonks y eso también la ha animado bastante, además, con Percy y papá trabajando en el ministerio, también han mejorado mucho las cosas a nivel económico.

-Y hay más noticias, -Añadió Harry- Charlie y Tonks han venido al país porque él le pedirá a Andrómeda la mano de Tonks en matrimonio.

-¡Pero esa es una noticia fantástica! -Exclamó Remus.

-¡Enhorabuena! -Se alegró Sirius.

-¿Saben algo? -Interrumpió Draco-. Ustedes dos también deberían casarse.

Todos se quedaron en silencio, Remus y Sirius se quedaron mirando a Draco como si no pudiesen creer lo que él acababa de decir, Harry y Ginny tenían en sus rostros un gesto de incredulidad y al momento siguiente se iluminó en ellos un gesto de aprobación. Astoria miraba a Draco y a los aludidos alternativamente, expectante...

-No estarás hablando en serio. -Dijo por fin Remus.

-¿Por qué no? -Respondió Astoria en su lugar- ¡Es una idea encantadora!

Harry y Ginny apoyaron a Astoria:

-Si, si, ustedes lo merecen -Dijo Harry.

-Ustedes se aman, y éste sería un paso muy importante. -Añadió ginny.