8.CAPITULO OCHO.

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Chiara.
Tatareaba una música que a veces me hacía sentir tan única, mientras mantenía mis ojos cerrados.

Estaba en la parte trasera de la preparatoria, era una cancha de básquet, el viento daba en mi rostro.

Escuchar música me relaja y me ayuda a pensar bien.

Han pasado dos putas semanas.
Y no hemos podido decirle a Jule lo de Patrick.

Ellos se han vuelto muy unidos.
Con decir que pasaron tres días en un hotel los dos solos, y luego aparecieron como si nada hubiese pasado.

Jugaba con el cable de los de mis audífonos.

Algo me está pasando en estas últimas semanas...Es algo muy raro, sueño con alguien que ni conozco, su rostro siempre se me olvida, en los sueños siempre lo nombre, pero no lo recordaba.
Al principio no le daba importancia.

Pero ahora son más seguidos y ni siquiera el nombre me lo sé.

Voy A investigar.
Los único que recuerdo de él es que es pálido, su pelo es negro y es bien delgado.

Doy un suspiró.

Me diriji a la habitación, tenía q ir arreglarme para salir con Jule a comprar ropa nueva.

Ya que hoy en la noche hay  una fiesta y según ella no tenemos que ponernos.

Al llegar me diriji a mi baño.

Al salir con una toalla envuelta en la cabeza y en el cuerpo buque algo para ir al centro comercial.

Me puse unos shorts negros cortos y una blusa verde.

Me acosté en mi cama...hasta que llegó con su escándalo.

- Chiara levanta tu lindo y precioso trasero para irnos porque no quiero que faltes a esa fiesta.- pongo los ojos en blanco.

- Ni que fuera la Reina Isabel...- digo en sarcasmo - hay pero mira si la tengo al frente mio. - Mi risa era eco en la habitación.

Miéntras Jule se cruzaba de brazos enojada.

Salimos de la residencia al centro comercial.

Al llegar nos dirigimos a una tienda de ropa a lo lejos pude ver un vestido que me encantó demasiado.

Tenía que llevarlo.

Vi de reojo a Jule y ella ya estaba agarrando casi todo.

Me diriji a cojer ese lindo vestido...es precioso.

Es un vestido blanco apretado, de tirantes y su tono blanco era perlado.

Me encanta.

Fui a buscar las zapatos que llevaré y ya los encontré.

Unos tacos color blanco mate no tan altos.

Busque a Jule por toda la tienda y la encontré.

Joder esa niña está llevándose todo.

Le hago una seña de que ya voy a pagar mi vestido y mis zapatos.

Pero antes me fui a buscar un collar que resaltara.

Busque como niña cotilla y encontré un collar dorado con una pulserita y unas argollas que iban a resaltar con mi vestido y mis zapatos.

Ahora si me dirigí a pagar y vi a Jule con un sinnúmero de bolsas en sus manos.

Al salir fuimos camino a la residencia y a la lengua larga de mi amiga se le ocurre hablar.

- Oye Chiara ¿No te pasa que empiezas a soñar con alguien y no lo recuerdas? - pregunto dando con suspiró de cansancio.

Las imperfecciones hacen la perfección Donde viven las historias. Descúbrelo ahora