¿Destino? Si, soy su perra [Traducción]

Capitulo 5 "La vida temprana de Hadrian Serpens Peverell"

"Bienvenido a casa, amor". Natalia Peverell, de soltera Itsurou *, sonrió amorosamente a su esposo, que cruzaba el salón principal de su mansión.

"Estoy en casa, mi amor". La besó en la frente y luego levantó a Hadrian para acurrucarse y llover besos por su rostro. "Estoy en casa, mi querido Hadrian".

Hadrian apenas se contuvo de hacer muecas, a pesar de estar ridículamente feliz por el amor que puede sentir de sus padres. Aunque no se detuvo de lloriquear y apartar el rostro de su padre del suyo. Sin embargo, todo lo que hizo su padre fue reírse antes de sentarse junto a su esposa, abrazar a Hadrian contra su pecho y hacer rebotar sus piernas para entretener a su hijo.

Hadrian se desconectó de la conversación de sus padres, mientras pensaba en los eventos de los últimos meses. Han pasado seis meses desde que llegó a su nueva vida, que realmente no le gustaba recordar.

" Sentir su pequeño cuerpo pasar a través de un agujero más pequeño que resultó ser la vagina de su propia madre, y luego experimentar la lactancia materna por primera vez le haría eso a cualquiera, tal vez". Harry hizo una mueca cuando desafortunadamente recordó todo después de aclarar su mente. "Ningún niño, y quiero decir que nadie debería recordar cómo fue su propio nacimiento". Y cuando le dijo a Muerte exactamente eso, todo lo que hizo la entidad fue reírse de él.

Hadrian no estaba realmente seguro de cuáles deberían ser los logros de un bebé normal, pero como es un adulto, al menos mentalmente, practicó mucho. Se aseguró de practicar sus brazos y piernas por la noche cuando sus padres dormían, estirándolos (o eso creía él). Tampoco se olvida nunca de practicar su vocalización, tratando de hacer que sus músculos vocales se acostumbren a que él realmente hable y forme palabras reales, aparte de Ah o Uh. Aunque si alguien le preguntaba a la Muerte, todo lo que diría es que un bebé estaba jugando en su cuna tratando de alcanzar y balbucear lo que fuera que estuviera viendo o imaginando, más o menos, mientras se reía de él también. Sus padres tienen las mismas opiniones cuando lo vieron haciendo sus cosas. Fue completamente frustrante, pero al menos estaba haciendo un buen trabajo.

Pudo superar el horror de alimentarse de su madre, sin embargo, experimentó un horror completamente nuevo cuando sintió que hacía caca por primera vez. No logró contener sus lamentos cuando ese incidente en particular sucedió por primera vez, no porque fuera algo de bebé, sino porque estaba claramente horrorizado por lo que estaba pasando su cuerpo. Sin lugar a dudas, estaba deseando que finalmente pudiera alimentar y limpiar su propio cuerpo. Y como era solo 1927, los pañales aún no se inventaron. Sin embargo, recordaba haber maldecido a Muerte en Parsletongue por las carcajadas de la entidad. Y estaba bastante seguro de que Muerte intencionalmente lo hizo comenzar desde el nacimiento solo por el bien de la risa.

También estaba bastante feliz cuando sus ojos finalmente se fijaron en un color. Sus padres también lo arrullaban sin parar, diciéndole lo adorable que es con sus brillantes ojos esmeralda. Realmente amaba sus ojos, ya que era lo único que Harry obtenía de Lily.

Fue durante el primer mes después de su nacimiento, que finalmente logró poner su cuerpo en sus manos y rodillas, aunque temblando bastante, estaba realmente feliz. Finalmente sintió que sus esfuerzos estaban dando resultados. También fue durante su tiempo en su parque mientras sus padres tomaban un té de la tarde tranquila en el salón principal de su mansión. Sin embargo, hizo muchos pucheros cuando sus padres gritaron de júbilo al ver su primer logro, lo sobresaltó tanto que cayó de su orgullosa posición. Trató de hacerlo de nuevo, y solo logró hacerlo una vez más antes de que su cuerpo se rindiera debido al agotamiento. Permaneció en el regazo de su madre después de eso, disfrutando del calor de una madre viva y encantadora. Sus padres estaban entusiasmados con que él era un genio por haber logrado tal hazaña cuando solo tenía un mes de edad.