Desde los tres años comencé clases de ballet, mi madre es una mujer muy perfeccionista, ella siempre quiso ser bailarina de ballet pero su cuerpo no se lo permito, tenía los pechos muy grande.
Desde que tengo uso de razón mi madre me dijo debes saber que si no eres bella no llegarás a ningún lado los hombres aman a la mujer bella, desvalida y un poco tonta.
- Debes ser delgada, esbelta y debes hacer todo para mantenerte así. Yo odio el ballet la competitividad y la maldad es el pan nuestro de casa día, a mis siete años tenía una audición para el cascanueces el personaje principal de Clara Drosselmeyer, yo perdí la audición y mi madre estaba fúrica me dijo que la perdí porque estaba gorda.
Luego de ese día solo podía consumir proteínas. No podía comer pasteles, panes o azúcar. Mi desayuno eran berenjenas, chayota o alcachofas. Entre merienda solo había frutos rojos, los almuerzos eran lentejas y ensaladas. En la cena volvían las chayotas ese sabor insípido aún me persigue.
A los nueve años tenía que usar vendas en el pecho, para que no se desarrollarán mis pechos, era muy doloroso y casi ni podía respirar, debía sacar buenas notas en el colegio y ganar audiciones. Yo no tenía amigas, ya que mamá me decía que eso sería una distracción para mí carrera.
A los 12 años comencé a comer y vomitar solo para lograr ser delgada casi como espiga, mis compañeras de ballet también lo hacían no sé si todas pero la mayoría si, también fumábamos cigarrillos y así calmábamos las ansias por la comida. A mis 15 años tuve la oportunidad de audicionar a una obra de ballet.
Al fin pude ganarme un protagónico en la obra teatral Coppélia, se trata de él doctor Coppelius que crea una muñeca bailarina de tamaño real con la que los aldeanos de un pueblo fronterizo se obsesionan. - Franz se enamora de ella hasta el punto de abandonar a su amor verdadero Swanilde, la cual intentará mostrarle su locura.
La obra fue todo un éxito y eso me abrió las puertas como bailarina, ya que la obra se presentó en muchos teatros, las personas sabían quién era yo. - El año siguiente audicione una vez más para el cascanueces y volví a perder esta vez con una chica llamada Liv, mi madre me dijo que descuidé mi cuerpo, que me veía extremadamente gorda y por eso perdí. Yo pesaba un poco más de 45 kilogramos mis rodillas y dedos de los pies me torturaban pero solo me exigían más y más.
A los 18 años seguía bailando y mi peso lo mantuve era realmente delgada, desayunaba papillas y agua, no consumía ni sal y menos azúcares, en las tardes aguacate y tomate, en la noche volvía a comer papilla y agua. - fumaba unos 22 cigarrillos al día, todos los días practicaba ballet unas nueve a once horas diarias, mi menstruación prácticamente había desaparecido.
Y una vez más me enfrentó a la audición del cascanueces, mi madre me dice que debo conseguir esta audición sea como sea ya que ella había invertido mucho tiempo y dinero en mí. - yo me sentía miserable no sabía qué hacer.
Comencé a entrenar catorce horas diarias, por seis semanas, los siete días de la semana, era muy poco lo que comía pero lo estaba logrando. El día de la audición fue bastante placentero ya que conseguí al fin el papel de clara Drosselmeyer en el cascanueces. La obra fue todo un éxito nos presentamos a nivel nacional e internacional viaje por el mundo durante tres largos años.
A mis 21 años estaba agotada, pero tenía una audición muy importante en la obra Gisella y comencé con mi entrenamiento de dieciséis horas de entrenamiento, comí muy poco y dormía unas seis o siete horas al día, fumaba una cantidad ridícula de cigarrillos aproximadamente seis o siete cigarrillos por hora.
- El día de la audición llegó y yo me presenté, di lo mejor de mí fue espectacular, el director estaba muy emocionado con mi técnica. Yo por un momento pensé, ¿ es esto lo que realmente quiero? ¿ Qué pasaría si dejara el ballet? y me dedicará a ser algo más, algo que me llene como mujer.
Mi madre que era mi representante se acerca a mí y me dice te viste regular creo que debes poner más de tu parte, te falta armonía y técnica, yo le dije madre no digas eso tú viste lo que dijeron allá afuera, el director estaba feliz con mi participación. - Mamá, mamá me duele el pecho no puedo respirar y de pronto caí.
Al despertar estaba en un hospital de la cuidad y tenía muchos tubos conectados a mi cuerpo, allí estaba un enfermero llamado Luis y me dice bienvenida al mundo señorita, ya viene la doctora García.
La doctora García me dice tuviste un infarto y estuviste bastante mal debido a tu bulimia y anorexia nerviosa a partir de ahora debe verte un psicólogo para ayudarte a superar todo esto.
- Yo le digo doctora yo tengo una carrera que cuidar y no tengo tiempo para psicólogos, la doctora García me dice si falleces tampoco tendrás una carrera y eso de provocarte el vómito puede terminar dañando tus cuerdas vocales.
Te pregunto ¿ cuántos enemas te haces?¿ o cuánto Laxante te estás tomando? tu sola te estás haciendo daño, por eso tú perdida de cabello, debes detenerte o vas a empezar a sufrir de un cuadro clínico muy desfavorable.
El día siguiente entro a mi cuarto el enfermero Luis.
Él era muy amable y me dijo buenos días hermosa bailarina vamos a dar un paseo yo conduciré. Me senté en la silla de ruedas y salimos al jardín. Él me dice usted es realmente bella es más creo que nunca había visto a una mujer como tú, yo sonreí y le dije yo bella creo que me ves con ojos de cariño, él me dice si eres preciosa ¿ Por qué no me crees? No lo sé. Eso fue lo que le dije.
Pero realmente nadie me había dicho que era bella, yo le digo sabes algo de mi madre, él me dice que ella le dijo que la llamarán cuando yo estuviera bien.
En la tarde fue el psicólogo y comenzamos a hablar y el me explico mi cuadro clínico y lo que me podía pasar si seguía haciendo lo mismo.
- Él me dijo que debemos vernos dos veces por semana y el me ayudaría para que mi vida pueda mejorar. - Después de tres días de haber despertado, mi madre fue al hospital a verme y me dijo que el papel de Giselle se lo dieron a Liv.
Yo le dije me alegro por ella pero mamá yo odio el ballet y todo este mundo me está haciendo daño, yo quiero ser maestra de preescolar y quiero que tú estés a mi lado pero si no quieres pues déjame sola y yo lucharé por mis sueños, mamá ¿porque nunca me dijiste que yo soy bella ? ¿ Por qué no me dijiste que yo era capaz.?
Mi madre me dice tú estás buscando palabras de aliento, que quieres que te aplauda y me ponga como esas madres consentidoras para que después tu seas una floja y no logres tus cosas, creo que estar en el hospital te está haciendo daño.
Yo le digo madre la única que me está haciendo daño eres tú sal de mi habitación. - Ella se fue me dejó sola en esa habitación, de pronto entro el enfermero Luis y me dice no te preocupes vas a salir adelante acá cuentas con un amigo.
Mi vida dio vuelta de 180 grados ya habían pasado ocho años de mi infarto.
Soy maestra de preescolar, estoy casada con mi enfermero favorito Luis, llevamos apenas tres años de casados, somos muy felices. Ahora estoy esperando una bebé, tengo seis meses de embarazo y vivo en una hermosa casa a las afuera de la ciudad. Aprendí a amarme mucho, también amo mi vida, a mi esposo y ahora a mi bebé.
Yo soy Dolores pero puedes decirme Lola.
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Mi historia musical
Random- Estas historia son cortas, una canción una historia. Subiré el vídeo de la canción junto a la historia que me inspiré
