Nacimiento

3.1K 383 21
                                    

—Tu barriga parece una gran pelota. —le dijo Jiang Cheng cuando luego de algunos meses que no se habían visto, pasó a saludarlo a su casa.

Era normal que su vientre creciera tanto, el doctor le había afirmado que su parto podría darse en las dos últimas semanas. Aún así, Lan Wangji sabía que decirle aquello a su pareja era prohibido, por lo que cuando lo escuchó comentar sobre su gran barriga, mandó una mirada de advertencia a su cuñado, pero era muy tarde, las palabras de Jiang Cheng habían llegado a los oídos de Wei Ying fuerte y claro.

—¿Me estás diciendo que estoy gordo?

—Pues sí, tu cara también está algo redonda, pero es normal, comes por dos.

—Oh... —logró decir antes de bajar la mirada y morder su labio cuando lo sintió temblar.

Lan Zhan se alarmó por el repentino bajón de su esposo y se acercó para abrazarlo. Jiang Cheng se sentía contrariado, antes su hermano hacía un puchero o se molestaba, pero luego reía restándole importancia, ahora lo veía derramando lágrimas silenciosas mientras era consolado por su alfa.

¿Qué demonios? —pensó.

—O-oye, Wei Wuxian, nunca dije que estabas feo, ¿por qué te pones a llorar de esa manera?

—¿No me veo feo? —preguntó, sollozando aún.

—No. —respondieron al unísono su esposo y su hermano, calmando su corazón.

Al escucharlos sonrió y se secó las lágrimas. —Entonces, ¿me veo muy lindo embarazado? —preguntó a cambio.

—Bueno...

—Sí, hermoso, muy lindo. —se apresuró a decir Lan Wangji, mirando de manera asesina a su cuñado por si quisiera comentar de nuevo algo inapropiado.

La sonrisa que recibió a cambio fue hermosa, hasta Jiang Cheng tenía que admitirlo.

Aquel día pasaron juntos, jugando cartas, mirando películas, comiendo bocadillos. Hablaron también de las novedades de los últimos meses con respecto a lo que iban descubriendo Lan Zhan y Wei Ying sobre su bebé.

—¿Ya tienen el nombre para su hijo?

Wei Wuxian miró a su esposo y entrelazó sus manos antes de asentir.

—Lan Yuan. —respondió Wei Ying, frotando con su mano libre su barriga, que se movió justamente en ese momento.

—No está mal. —Jiang Cheng admitió, dando un punto a su favor.

🌺
🌺
🌺

Más tarde, en la cena, luego de haber tomado el té y galletas, su hermano se despidió y se fue de su casa.

Era hora de dormir, por lo que se vestían con sus pijamas, aunque Wei Ying ya no utilizaba ninguna de las suyas, más bien, había empezado a utilizar las de su marido, ya que estas eran más grandes y cómodas ahora. Lan Zhan le había dado la opción de comprar nuevas pijamas pero Wei Ying se había negado, confesando que el aroma de la ropa de su esposo le relajaba y que prefería dormir con ellas. Lan Wangji no pudo negarse, mucho menos cuando la ternura de ver a su esposo andando con sus ropas era demasiada para su corazón.

Ya era costumbre verlo tomar su ropa, ya que con ellas hacía su nido cuando su esposo no se encontraba en casa debido al trabajo y necesitaba sentirse relajado y feliz. La primera vez que llegó a su casa y lo vio acostado y dormido en medio de un montón de su ropa le había parecido tan tierno que en secreto guardó una foto en su celular. A Wei Ying le habían dado permiso los últimos meses en su trabajo y ese tiempo se dedicaba a hacer todo lo que su panza le permitía, Lan Wangji por lo contrario, debía trabajar hasta que el parto del bebé se presentara, luego tendría un tiempo para disfrutar junto a su familia, permiso concedido por su tío, dueño de la empresa donde laboraba.

Wei Wuxian se miraba al espejo mientras se lavaba los dientes, observaba los cambios que sufrió en los últimos meses, era verdad que estaba más relleno, sus pechos se hincharon y su cara estaba más redonda. Recordaba como era antes de quedar en cinta, su cuerpo esbelto, su barbilla afilada... Ahora hasta tenía unas algunas estrías en su barriga.

Suspiró y bajó la mirada, no se autopercibía como lindo o agradable en ese momento. Terminó de lavarse los dientes y salió del baño, su alfa lo esperaba sentado a un lado de la cama, mirándolo llegar a paso lento hacia su lado. Lan Wangji se extrañó por cómo su esposo no lo miraba a los ojos y se preocupó, acercándose para con una de sus manos acariciar el rostro de su amado, y susurrar su nombre en interrogación.

—¿Pasa algo, cielo?

Las mejillas del omega se colorearon y algo nervioso preguntó. —¿Podemos hacer el amor?

Lan Zhan lo miró un momento, tratando de entender el trasfondo de aquella pregunta, porque sabía que había algo con respecto a lo que había dicho. No encontrando nada inusual, Lan Zhan asintió, mirándolo con amor antes de inclinarse y besarlo suavemente.

Wei Ying correspondió el beso, disfrutando de los labios de su amado. El alfa lo llevó hasta la cama, sentándolo con cuidado sin dejar de besarlo, luego tomó uno de los botones de la camisa que usaba Wei Wuxian y lo desabrochó, haciendo que el omega se apartara del beso.

—¿Wei Ying?

—Yo...

Debido al embarazo avanzado, sus todos los días se habían pospuesto muchas veces, pero nunca había visto inseguridad en los ojos de Wei Ying cuando lo hacían, ahora Lan Zhan no sabía qué había cambiado o qué había pasado para que se mostrara de esa manera.

—¿No te molesta que yo esté así? —preguntó Wei Ying, haciendo que Lan Zhan no entendiera el porqué de la duda.

—¿Así cómo?

El omega soltó un suspiro. —¿Acaso no lo ves? Estoy gordo, tengo estrías, mis pechos se oscurecieron un poco, parezco una vaca, un sapo.

—¿Cómo puede molestarme si todo de ti lo amo con mi ser?

El omega trató de replicar, Lan Zhan se adelantó.

—Tienes a nuestro hijo aquí. —Lan Wangji tocó por encima de la pijama su vientre. —Estas marcas demuestran que A-Yuan está creciendo y es la prueba de nuestro amor. —ahora tomó con sus dos manos el rostro de su amado. —Gracias a ti, nacerá fuerte y sano, y tus pechos alimentarán al bebé. Wei Ying, amo todo de ti... porque cada pequeña cosa es hermosa y una gran fortuna para mí. Eres hermoso, para mí siempre lo eres.

—Lan Zhan... —susurró, sonrojado, con sus ojos brillantes y bastante emocionado. —Tú... No digas todo eso de la nada, cielos... Mi corazón es feliz, me late muy fuerte, yo... oh, Lan Zhan, te amo mucho, mucho, mucho.

Lan Zhan vio y sintió el cambio de su omega en sus ojos y sus feromonas, entonces prosiguió con sus besos, contentando mucho más a su amado, besando su cuello, viajando hacia el sur. Ahora dejaba que lo desvistiera y que lo admirara, que sus manos recorrieran todo de sí y que lentamente lo amara. Esa noche Lan Zhan demostró lo mucho que lo amaba, tal y como siempre lo hacía.

🌺
🌺
🌺

Tres días después, Lan Yuan nacía en horas de la noche, alegrando las vidas de todos los que lo esperaban con anhelo.

Padres - WangXian (omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora