Una habitación diferente a la que conocía fue la que recibió a Mikasa tras despertarse. Estaba un poco confundida, pero tras espabilar inmediatamente busco a su alrededor.
-Hola-Sentado en un taburete frente al gran ventanal se hallaba Jean-¿Te sientes mejor?
Aquel joven que seguía descalzo fue hasta Mikasa. Los ojos claros de Jean la miraban con sincera preocupación y ella se sonrojo, especialmente al sentir la mano ajena colocada sobre su frente.
-No tienes fiebre-Entonces Mikasa recordó lo que causo su desmayo.
-¿Dónde está Marco?-Confundido, Jean ladeo la cabeza hacía la derecha.
-Fue por medicamentos ¿Conoces a mi hermano?-Mikasa asintió-¿De dónde?
-Pues... es difícil de explicar-Jean se sentó en el borde de la cama.
-¿Será que lo confundes con otra persona?-Ella negó fervientemente con su cabeza-¿Mh? Marco no te ha mencionado ni a ti ni a este lugar.
-¡No miento!-Jean sacó su móvil, buscando algo en él.
-Estos somos Marco y yo-Lo que observo en aquella foto la dejó sin palabras-Somos mellizos, él es el mayor.
Al lado de Jean estaba un joven alto, de tez blanca, cabellera rizada en tono negro, ojos claros y con un par de lunares debajo de sus ojos.
-No... ¡No puede ser cierto! ¡La persona que yo vi no se parecía en nada a este individuo!-Jean le entrego el celular a Mikasa.
-Puedes ver los álbumes y te darás cuenta que no te estoy mintiendo-No era la única fotografía donde estaba aquel chico de oscura cabellera rizada.
Diferentes tomas, otros sitios, distintas fechas, diferentes días... en todos y cada uno de ellos eran los mismos chicos, algunas tomas individuales y otras más en familia al lado de Vesemir.
-Mis hermanos mayores no son tan fotogénicos y es difícil que los veas aquí, pero los conocerás en la cena-Ella regreso el móvil.
-Quizás estaba alucinando... es imposible que los muertos vuelvan a la vida-Llego a esa conclusión y se quedó seria.
-¿De verdad estás bien?-Mikasa seguía pensando en las cosas que pasaron esa tarde, estaba su cabeza hecha un lio pero asintió-Si quieres, puedo traerte la cena hasta aquí para que no te muevas y descanses un poco más.
-Gracias, es muy considerado de tu parte pero ya me siento mejor. Seguro se me bajo la presión y por eso me desmaye-Los ojos de Jean la observaban como tratando de entender lo que estaba pasando por la mente de Mikasa.
Hasta ese momento Mikasa notó algo poco común en los ojos de Jean porque la mitad de cada irise era de tono miel y la otra gris, indicio de heterocromia parcial en ambos ojos.
-De acuerdo-Poniéndose de pie, Jean se encamino a la salida-Te acompaño para que no te pierdas.
Tardo pocos segundos en levantarse de la cama, siguiendo a Jean que la guio por el inmenso pasillo de la segunda planta hasta llegar a una de las esclareas gemelas por la que ambos descendieron.
El gran comedor se observaba: una amplia mesa de madera fina con cuatro sillas a cada lado y dos más ocupando la cabecera principal, así como un fino candelabro colgando en el techo.
-¿Te sientes mejor?-Observo Mikasa a dos jóvenes que estaban sentados y preguntaban por su salud.
-Marco se asustó tanto que fue a la farmacia en busca de medicinas para ti-Mikasa se sintió fuera de lugar.
-Oigan ustedes dos, no sean groseros y preséntense-Jean reprendería a sus hermanos mayores.
-Soy Bertholdt, un placer conocerte-Alto, de tez morena, cabellera oscura y ojos claros, aquel chico fue el primero en presentarse.
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Arena y cenizas
FanfictionNo importa cómo lo vea, desde que Mikasa adquirió ese curioso diario las cosas a su alrededor se volvieron sombrías. Su mundo ya no se limita a ser la chica inadaptada del salón, ahora las cosas se han invertido para bien de ella pero para mal de qu...