El juicio terminó después de unas largas horas para suerte y alegría de todos a favor de Chelsie. Alex estaba en la oficina con el juez y el abogado del acusado ultimando papeles, Olivia no podía esperarla para recibir su sermón, tenía que ver a Elliot, QUERÍA mejor dicho verlo y debía apresurarse si quería encontrarlo en la unidad.
El viaje no planeado a Oregón le sirvió para aclarar sus ideas y pensar en Elliot, en ellos dos, en todo. No pasó un solo día en que ella no quisiera estar con él, tenerlo cerca, lo había extrañado tanto...quería arriesgarse, y aunque el miedo aún era fuerte estaba decidida a decírselo, solo esperaba que él no haya cambiado de opinión y que el tiempo lejos le haya servido tanto como a ella.—Hola.—La saludó una mujer rubia sentada en su escritorio.
—Hola.—Respondió sorprendida, no es que esperaba su escritorio vacío todo ese tiempo, pero olvidó el detalle de que podría estar ocupado...por una mujer.—¿El detective Stabler está?
—Está en un interrogatorio. Soy Dani, su compañera. ¿Puedo ayudarla?—Pregunto. No la conocía, pero algo en ella no le agradaba en lo más mínimo.
—No, gracias.—Sonrió falsamente. El entusiasmo con el que había llegado se esfumó en un segundo.—¿El capitán está en su oficina?
—Si, ¿y usted e...—Iba a preguntar, pero Olivia no dejó que termine de hablar y se dirigió un tanto molesta hacia la oficina.
—¡Olivia!—Levanto la vista de su escritorio cuando golpearon la puerta.
—Capitán.—Sonrió, no tenía mucho ánimo para eso pero si la alegraba verlo de nuevo.
—No esperaba verte.—Se puso de pie y la saludó con un abrazo para luego volver a su lugar.
—Lo se, ¿Cómo estuvo todo por aquí?
—Bueno, ya sabes...—Iba a continuar hablando pero vio como ella se acercó a la ventana de su oficina. La vista daba justo al escritorio de Elliot y la nueva detective, Dani.—No tengo lugar para ti, no me avisaron que ya regresarías y me tomara unos días reubicarla.—Mencionó con pesar señalando a Dani beck, la joven sentada en su escritorio.
En ese instante Elliot apareció, Dani aún estaba sentada en su escritorio, hablaban y él puso una de sus manos sobre el hombro de Ella. Al instante lo sintió en su corazón como una roca que derrepente apoyaron encima, no era una interacción más. Ella tomó su mano, la misma que él había dejado en su hombro, la acarició y se sonrieron. Elliot no era así con cualquiera.
Fue como un balde de agua fría para Olivia.—No, está bien. —Se apresuró a decir, tratando de disimular sus ganas de llorar por lo estúpida que se sentía en ese momento. Lo que encontró al regresar no era justamente lo que esperaba pero se convenció que era lo que tenía que ser y agradecía internamente que haya sido a tiempo y no después de que su arrepentimiento sea peor.—Venía justamente a avisarle eso, aún no estoy lista para regresar.
—¿Estás bien? —Preguntó luego de unos segundos.
—Lo estoy. —Inhaló aire y siguió.—Se que estuvieron preocupados por mi, quería saludar y que vean que nada pasó. —Sonrió.—Entonces...¿nos vemos luego?.
—Olivia...
—De verdad estoy bien.
—En cuanto termine su traslado te avisaré.—Mencionó con firmeza, quería dejarle en claro que no estaba como una opción que ella quede fuera de la unidad.
—No tiene porque apresurar los trámites capitán. —No lo había tomado en serio, pero ahora veía sus otras ofertas como una posibilidad.
—¿Hay algo más?
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Mil años más-Bensler
FanfictionSon compañeros de trabajo, y compañeros de la vida. Son complementarios, son mejores amigos. Son fuego y aire. Son el sol y la luna. Son almas gemelas, o al menos, eso creían. Elliot y Olivia, ¿Qué pasa cuando una amistad deja de verse como tal?¿Qu...