Capitulo 23

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Luego de interrogar al señor Massoner descubrieron para sorpresa de ambos que la actual amante de él era nada más ni nada menos que Nicole, la amiga íntima de la pareja. Aún debían corroborar que él no tuviera nada que ver con el asesinato de su esposa tal y como lo afirmaba pero ya no quedaban dudas que Glenn y Nicole les habían ocultado cierta información.

—¿Desde cuando lo sabes?—Pregunto Elliot directamente en la sala de interrogación.

—No se de que hablas.—Respondió tranquilo Gleen.

—Glenn, por favor, sabemos que tú fuiste el que compró el Dieldrin, revisamos tu computadora.—Respondió Olivia sentandose frente a él con una carpeta que contenía los documentos extraídos del computador.

—Desde el principio.—Respondió a la pregunta anterior luego de unos segundos, ya no tenía caso seguir mintiendo.

—¿Por qué lo hizo?—Lo cuestionó Olivia.

—Él se robó a mi mujer.

—Ella no es de tu propiedad.—Respondió Elliot molesto.

—Es mi esposa. Nos amábamos.

—Glenn, debes entender que a veces las personas aman, y de la misma manera dejan de amar, no podemos hacer nada para evitarlo ni mucho menos justificar nuestras malas acciones.—Respondió Olivia. Su voz sonó tan segura y a la vez muy personal como si fuese algo que se dijo a sí misma porque así lo sentía. Elliot solo la observaba y retumbó por unos segundos en su cabeza la frase "las personas aman y dejan de amar", ¿por qué lo dijo?

—Solo quería que él sintiera el dolor que yo sentí.

—¿Ojo por ojo?—Pregunto Elliot tratando de concentrarse en el caso aunque estaba bastante descolocado pensando en Olivia.

—Mi mujer por su mujer.—Respondió Gleen totalmente frío a sus palabras

Olivia giró al instante su cabeza hacia un espejo detrás de ellos, Nicole se encontraba del otro lado oyendo cada una de las palabras que su esposo decía y la reciente confesión del asesinato de Danielle.
Ya no tenían nada más que hacer con el, tenían una confesión sólida y ya quedaba en manos del asistente del fiscal de ahí en adelante.

Ambos salieron del cuarto, Olivia salió con el paso más apresurado que elliot y se dirigió directamente a la oficina donde una nicole alterada los esperaba. No podía creer lo que oía, tampoco entendía como fue que sucedió todo, como supo el de su romance, hace cuanto, porque llegó al extremo de asesinar a una persona y peor aún conociendo a la víctima. Tenía demasiada información en su cabeza y pronto las piernas comenzaron a fallarle y su respiración entrecortada no le permitía hablar. Gracias a Olivia no termino su cabeza contra el suelo de la estación ya que freno su cuerpo antes, ante el desmayo rápidamente los de la unidad llamaron una ambulancia y detrás de ella los detectives la siguieron al hospital.

—¿Quieres?—Ofreció Elliot una soda luego de unas horas mientras esperan los resultados de los estudios a Nicole.

—No gracias. Ya no bebo soda.

Después de estar en tantas huelgas, marchas e involucrarse con el grupo ecofriendly, saber lo que las empresas productoras hacían en sus testeos y pruebas cambió su forma de ver las cosas, sin dudas no volvería a consumir algunos productos.

—¿Algún otro cambio del que quieras hablarme?—Pregunto Elliot.

Desde que regresó notó ciertos cambios en ella, el principal estaba claro en su actitud, luego su cabello, ahora que ya no bebe sodas, ni siquiera la había visto beber su café negro desde que llegó.

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⏰ Última actualización: Mar 30 ⏰

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Mil años más-BenslerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora