Capitulo 22

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—¿Olivia?—Se pregunto atónito y sorprendido. ¿Regresó?¿hace cuánto?¿por qué nadie me lo dijo?¿Ya esta aquí en la unidad?—Comenzó a buscar a la morena con su vista.

—¿Y esa cara?—Preguntó Fin al ingresar y verlo tan confundido.

—¿Olivia está aquí?—Su "concentración" en lo que hacía quedó totalmente de lado, ahora quería saber cómo es que ella regresó.

—Eh...—Dudo que decirle, no quería mentir, pero Olivia no quería que nadie supiera que estaba en la ciudad. Eso fue lo que dijo.

—Craguen lo dijo.—Vio sus intenciones de mentir. ¿Por qué lo haría?¿Acaso Olivia está evitándome?

—No aquí en la unidad, pero si en la ciudad.—Respondió dudoso. Creyó que lo primero que haría Olivia al regresar sería contactar a sus amigos, y si lo hizo pero al parecer eso no incluía a Elliot.

¿Primero se va si decir nada y luego regresa sin siquiera avisar?¡Que demonios sucede contigo Olivia!
La última vez que la vio sintió que las cosas estaban mejor entre ellos, no fue una gran conversación ni nada pero ella estaba menos a la defensiva con él, creyó que volvería...de hecho lo hizo aunque él no pudo involucrarse mucho en el caso de la joven porque según Olivia "estaba bajo control", y le dijo en la última conversación que luego hablarían, pero solo se fue y ni siquiera se despidió o dijo cuando volvería.
Necesitaba verla para aclarar de una vez por todas lo que sucedía entre ellos, porque ella se comportaba así, pero a la vez estaba molesto por marcharse y no quería verla.

—Aquí tienes la dirección que necesitabas. —entregó Fin un papel—Suerte con tu caso del indigente.

Elliot no obedeció las órdenes de Craguen. Necesita despejar su cabeza y el trabajo servía para eso. En la noche fue a central Park, después de ver una triste escena en donde muchas personas se encontraban en situación de calle al fin dio con el hombre que buscaba pero no de la manera que esperaba. El sujeto lo atacó con un cuchillo y él en defensa propia lo golpeó. Para su mala suerte este sufría una afacia de expresión debido a una embolia que sufrió hace dos años, eso fue lo que el médico que ya conocía al hombre le explicó a Elliot. Antes era un exitoso abogado pero a causa de su accidente perdió todo y por eso cada cosa que sucedía en las calles las consideraba una amenaza.
Para Elliot ya era complicado haber golpeado al sujeto "indefenso" sino que también le resultaba muy difícil comunicarse con él para explicar lo que vio pero lograron que, a través de una pizarra, él pueda dibujar mientras Elliot intentaba descifrar, aunque no estaba siendo muy bueno en eso.

—Su cabello. Su cabello era negro...—El hombre negaba ya molesto por no ser entendido—Rojo, ¿era rojo?—El sujeto negó nuevamente

—¿Era como el mío?—Interrumpió Olivia desde el marco de la puerta—¿Así castaño?

—¿Viniste a ayudarme?—Dijo embobado con ella mientras la veía ingresar a la sala. No podía sacar su mirada de encima, más de un mes y medio sin verla y hacía su entrada de esa manera, estaba radiante, su cabello diferente y aunque estaba molesto no podía no dejar de ver lo hermosa y a la vez molesta que estaba.

—Craguen me llamo. —Respondió con cara de pocos amigos, noto la mirada de él y la intimidaba un poco pero no dejaría que la distraiga.—Después de lo que hiciste anoche me asignaron para controlarte.

Trataba de ocultar lo que realmente estaba sintiendo al verlo. Sin dudas no sería nada fácil volver pero tenía que intentarlo a como de lugar.

—Me ataco con un cuchillo.—Justificó como un niño chiquito.

—Entonces su cabello...—Debían seguir con el caso. Ella no dijo más nada y solo se limitó a hacerle preguntas al hombre ante la mirada atenta de Elliot.
Después de varios intentos, una agarrada de brazo por parte de ese hombre a Olivia que casi hace que Elliot decida golpearlo otra vez, y más dibujos en la pizarra lograron entenderlo.

Mil años más-BenslerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora