.

21 3 0
                                    

Vivo en mitad de un océano en el interior de mi mente. Donde las olas están hechas de palabras que mis labios nunca pronunciaron. Donde mi alma envejece, y mi corazón suplica para que el dolor cese.

En ocasiones, me siento vacía y me preguntó; ¿Cómo es que aquello es posible? Si aquí dentro siempre hay algo nuevo. Pero, supongo, que una persona no se puede llenar solo con dolor y lágrimas el alma. No cuando sabes de la existencia de una vida con calma.

Una última cartaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora