Helena ♡.¸『BatLantern』

Play-Doh

(+2 años)

—Galleta —pasó entre sus manitas la imitación de comida que tenía, acercándose con un plato improvisado donde el mayor de los Wayne trabajaba desde su escritorio.

Bruce revisó por unos segundos el objeto, no parecía del todo una comida sana, pero como intento era bastante bueno. Fijo la vista en la menor, percibiendo que esta la señalaba varias veces, como si tratase de decirle algo.

—¿Quieres que la... coma? —cuestionó con miedo, tanteando entre sus dedos la masa. Suspiró en alivio al ver que esta negó tres veces.

—Aún no —concluyó, regresando sus pasitos al lugar donde elaboraba más de esa comida artificial.

En un ladeo de su cabeza, el azabache se percata que ella no era la única que tenía en juego la arcilla fluorescente. En la habitación de enfrente yacía una montaña de envases de ese característico juguete.

—¿Jason? —llamó en pregunta, notando al fin los ojos marinos sobre él —¿Qué haces ahí?

—Cocinando, duh —obvió, moldeando con mucho esfuerzo un trozo de la plastilina.

—Sí, ya me percaté de ello, me refiero a el cómo y por qué estás ahí

—Helena necesitaba ayuda para hacer palomitas, así que vine a ayudarle

—... Claro —quiso acercarse a ver qué tanto desorden habían hecho ellos dos, hasta que el sonido de unos pasos corriendo le hicieron retroceder en reacción.

—¡Al fin, lo conseguí! —casi cayendo gracias a sus propios pies, aterriza como puede la mujer frente a los otros dos cocineros —Tuve que patear dos niños, pero valió la pena

—Pero Kate, necesitábamos el Juego de fideos, no el horno mágico —Todd tomó en brazos la caja que había traído la pelirroja.

—Lo sé, pero una mocosa me mordió tratando de agarrarlo del estante —dijo con pesar, rozando de vez en cuando su mano como recordatorio del mordisco —¡Además, aún sirve! Podemos hacer cupcakes, más galletas y-

Se detuvo al sentir tras suyo al millonario, teniendo un semblante serio, mas sin embargo intrigado por la forma en la que había aparecido con una enorme caja.

—¡Bruce! —saludó en nervios, no esperaba en absoluto encontrarlo en casa —¿Qué, eh... haces aquí?

—Trabajando, como siempre acostumbro —alzó una ceja en obviedad, fijando la atención en el horno colorado —¿Y tú? Grata es la sorpresa de verte por estos lados sin aviso

—Ah, eso, verás... Como hace poco me enteré de que había un nuevo miembro en la familia, quise venir a verle propiamente, no perdería la oportunidad de pasar un tiempo con esta preciosa masita —observó por un momento a Lena, sonriéndole con dulzura y saludándola por cortos lapsos —. Aprovechando la ocasión, traje algunas cosas para ella

—Ajá... Algunas —señaló a espaldas de la mujer la montaña de envases de plastilina que se empezaba a apilar.

—¿Qué? Ella necesitaba y, por consecuencia, debíamos proveerle —Peter alzó los hombros junto a su excusa, terminando al fin la forma que llevaba ya diez minutos haciendo —. Mira nada más las cosas que hemos hecho

Haciendo caso a sus palabras, se percata de la variedad de comida que habían recreado, alguna estaba hecha casi a escala y otras tenían diversos colores en sus alrededores, entre tanto, habían incluso unos animalitos que no simulaban ser "comestibles". Aunque nada lo era, de hecho.

—Nos faltaba hacer fideos, pero alguien no lo pudo conseguir y ahora tendremos que improvisar —fulminó con la mirada a Kate, haciendo que esta se cruzara de brazos con enojo.