Escapando del amor [Terminada]

Capítulo 20

—Rubio, estoy bien... ¡No seas pesado! —exclamo divertida.

Después de lo que pasó con el padre de Ethan he estado un poco intranquila y he vigilado las reacciones de Ethan a ver si sabía algo, pero nada ha parecido cambiar... Hasta hace unos tres días que ha dejado de venir al trabajo y aunque no lo quiera aceptar estoy preocupada.

—¿Quieres que vaya a hacerte compañía?

—¿Eres mi papa? —me burlo.

—Es solo una excusa para verte.

Sonrío triste.

—Lo siento, pero tengo mucho sueño y ya me iba a ir adormir cuando me has llamado —me disculpo—. Otro día. Buenas noches Ryan.

—Buenas noches.

Aunque intento con todas mis fuerzas volver a la relación que tenía con Ryan no puedo, al pensar que siente algo por mí, me hace sentir intranquila. Me está haciendo compañía y es muy amable, y hace como si no hubiera ocurrido nada, pero no puedo olvidarlo.

Cuelgo la llamada y me desperezo. Me levanto del sofá y voy a ir a mi habitación cuando oigo el timbre. Frunzo el ceño, pero me encojo los hombros y me dirijo a la puerta. Cuando abro la puerta me sorprendo. Es Ethan, esta con la camisa abierta, parece acalorado y...

—Estas temblando —susurro, luego niego con la cabeza y pegunto—. ¿Qué haces aquí?

—Estoy celoso —afirma ignorándome por completo y dejándome de piedra—. Me pongo celoso cada vez que te veo con Jackson. Te necesito más de lo que quiero admitir. Este mes ha sido una gran patada en el culo —dice, eso último en español.

—Eth... Es mejor que vayas al hospital —parece realmente enfermo.

—Alison me gustas mucho. Me gustas tanto que tengo miedo de la dependencia que he creado sobre ti. Estoy perdidamente enamorado de ti Alison Collins —cae de rodillas agotado.

—¡Idiota! —le grito y hago que se ponga de pie de nuevo, haciendo que se apoye en mi—. Deja las frases románticas ahora. Estas temblando y creo... —junto mi frente con la suya y sí, estoy en lo cierto—. Tienes bastante fiebre, voy a llevarte al hospital.

—No —murmura. Entre cerrando los ojos—. Quiero quedarme contigo.

—Estaré contigo, pero es mejor que te lleve al hospital —digo con voz suave.

—Cuídame tú.

Frunzo el ceño y después de pensarlo unos segundos asiento con la cabeza. Con disficultad le llevo hasta a mi habitación no sin antes cerrar la puerta. Una vez en la habitación le tumbo en la cama con cuidado.

Nunca he tenido que cuidar a nadie, ni si quiera a Dani, casi nunca le he visto enfermo y él siempre cuidaba a mi cuando estaba enferma y ahora no sé cómo cuidar a Ethan.

Me voy un momento de la habitación y cuando regreso llevo conmigo el termómetro, se lo pongo debajo de la axila y cuando pita se lo saco. Arrugo más el ceño, al ver marca cuarenta de fiebre. Miro a Ethan, esta con los ojos cerrados, tiene fiebre alta, además suda mucho y tiembla... Está mal... Lo mejor es que le lleve al médico aunque no sea con su permiso.

—Alison te amo —confiesa con voz débil, yo me detengo ya que había empezado a caminar para agarrar mi bolso. Le miro con un poco de miedo.

—Ahora vengo —digo nerviosa.

—¡No! —grita a la vez que intenta salir de la cama inútilmente, porque cae al suelo, el suelta un quejido.

Pego un respingo cuando oigo su grito. Me ha dado un susto tremendo. Corro hasta él asustada y le dejo de nuevo en la cama con suavidad. Ethan está murmurando mi nombre varias veces.