¿No puede dejarme en paz?

2 1 0
                                    

[11 de septiembre]

Limpiaba y organizaba mi casa, barriendo los pisos, lavando ropa, etc.

Lázaro llega a mi casa, me ofrece un poco de su ayuda. La acepto algo resignada, había demasiado desorden y una mano más no me venía mal.

Nos turnamos entre todos y vamos avanzando, mi papá actúa raro, de un momento a otro desaparece.

Terminé con mi parte y decidí buscarlo, me dirijo hacia el frente de mi casa y allí se encontraba con esa rubia que tanto odio, la examino de arriba a abajo, sus piernas todas chuecas y ese pelo que desde lejos se nota que no es natural. ¿Cómo puede lucir con tanto orgullo todo eso?

Me observa y sonríe con sorna, quiero correr y pegarle hasta borrarle esa expresión que tiene en su cara, pero Lázaro me abraza y me tranquiliza.

Ya se va a ir, sigamos. Me lleva hacia adentro y limpiamos lo que podemos, cuando la mayoría del lugar queda impecable y reluciente decido desplomarme en el suelo para descansar.

Por un momento casi me duermo, pero escucho música bastante bulliciosa. Desde la ventana me encuentro bastante sorprendida al ver la pequeña boda entre mi papá y esa horrible persona.

Comienza a faltarme el aire, salgo a tratar de detener eso, sin embargo, sus hijas tratan de besar a Lázaro, mi furia crece y quiero golpearlas, pero mi papá se interpone y me grita.

Se suben a una camioneta y se van, mis hermanos parecen seguirlos.

Me quedo sola allí, me siento en el suelo tratando de procesar todo lo que sucede. Lázaro me abraza, más el pequeño sonido zumbante en mi cabeza y en mi pecho no me permite sentir sus brazos rodeándome.



~FIN~

Historias SoñadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora