CAPÍTULO SIETE. Relación Con Engaños.

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-¿Ahora si me dirás por qué no se llevan bien?.

Jason no contestó, solo lo miró seriamente pero en sus ojos estaba un "después te cuento" escrito en ellos, miró a Percy que ni siquiera lo miraba y bajó su vista a su desayuno. Nico estaba extrañado, parecía que esos dos estaban molestos con algo y eso era extraño, nunca los había visto tan molestos entre ellos.

El resto del desayuno Annabeth intentaba aligerar el ambiente, Percy le hacía conversación y Nico tiraba algún que otro comentario pero Jason parecía incómodo, pero Nico no creía que fuera por Percy, el día anterior habían estado hablando y jugando como usualmente lo hacen, más bien creía que la incomodidad del rubio se debía a la mención de la hermana de Set ¿Como asumió eso y no señalar la presencia del hijo de Res como responsable? Fácil, era obvio que no se llevaban, pero eran aparentemente capaces de aguantarse y hasta entablar una minima conversación, pero la repentina mención de la hermana de Set hizo que Jason se incómodase al instante.

-Iremos por la cabaña de Poseidon, nos vemos luego ¿está bien?-dijo Percy luego de desayunar y levantarse de la mesa.

-Claro, nos vemos en el campo de entrenamiento. -dijo Jason, Percy asintió y levantó el pulgar de acuerdo.

Nico miró irse a la pareja para luego mirar a Jason fijamente, mirándolo con obvio interés de saber la situación con el hijo de Ares.

-Bien. -dijo Jason derrotado por la mirada insistente pero silenciosa del pelinegro-. Vamos a tu cabaña.

Nico oculto una persona sonrisa por haber hecho que uno de los semidioses más tercos aceptase que le cuente el chisme.

Ambos se fueron a la cabaña 13, obviamente ya en el camino, habían más campistas despiertos y sus ojos iban directamente a ese par de hijos de dos de los tres grandes dioses, y aún que Jason estaba acostumbrado le sorprendía lo natural que estaba caminando Nico a su lado ¿Acaso no le molestaba? El día anterior estaba algo cohibido pero ahora iba caminando con las manos en los bolsillo de sus jeans negros, bostezando.

-¿Ese es otro tatuaje?. -preguntó Jason notando uno en la el dorso de la mano derecha del pelinegro, cerca de su pulgar, que decía "sin piedad".

-Ah sí. Es el símbolo de papá, es el primer tatuaje que me hice. No sabía que hacerme y solo lo hice. -se encogió de hombros luego de mirarlo un momento.

Al llegar a la cabaña negra con cortinas oscuras Jason entró después de Nico, siguiéndolo a la pequeña estancia, sentándose en el sofá de cuero negro que estaba ahí. Nico miró expectante al rubio, quería la primicia.

-Hiciste más de lo que creó estos cuatro años. ¿Algún otro tatuaje que tengas o algún otro mejor amigo?. -preguntó Jason queriendo no llegar a la conversación que Nico ansiaba.

-No hay otro, sólo son dos. Y sabes que no muy social como para hacer otro mejor amigo... ¿Y bien?. -preguntó Nico mientras se estiraba en el sofá e inclinava su cabeza por el respaldero, viendo al techo.

El rubio se hizo para al frente en el sofá, apoyando sus codos sobre sus muslos, juntando sus manos para jugar nerviosamente con sus dedos, agachando la cabeza entre sus piernas.

-Ahg..Es extraño explicar esto. -Jason no lo miraba, se lo escuchaba algo atormentado consigo mismo-. Sé que eres buen amigo Nico, pero debes de jurar no decirle a nadie lo que te voy a decir.

Nico giro su cabeza aun recostada por el cómodo respaldo a su dirección, la expresión de Jason era seria e intimidaba un poco, por lo que se sentó recto y asintió en dirección al rubio, quien le devolvió el asentamiento de la cabeza. Sabía que Nico no lo juzgaría.

LA TENTACIÓN DE EROS » || Nico Di Angelo || +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora